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Con equipo renovado para 2015

Crawford, Greinke y el Titán deben aportar muchísimo a la causa de la nave azul. Stephen Dunn/Getty Images

Los Dodgers de Los Ángeles se presentan en la temporada 2015 de grandes ligas, el lunes 6 de abril, en su tradicional horario de la 1:10 de la tarde, iniciando una serie de tres confrontaciones con los Padres de San Diego, en su reducto de las Lomas de Chávez Ravine.

Se trata de la campaña número 132, desde su fundación como equipo de Brooklyn, N. Y., en el ya lejano 1884 y la quincuagésima octava temporada en la gran carpa, desde que se le conoce como Dodgers de Los Ángeles.

La novena que conduce Don Matingly, quien entra en su quinta campaña como timonel azul, lucirá un nuevo rostro, ya que ha sufrido una importante metamorfosis, tanto en lo que se refiere a su plantel de jugadores, lo mismo que en su personal administrativo.

Con Andrew Friedman como nuevo presidente de operaciones, mientras que Farhan Zaidi llegaba desde Oakland para ocupar el puesto de gerente, reemplazando a Ned Colletti, junto a Josh Byrnes, vicepresidente operativo, quien reemplazó a Logan White, a cargo del vital sistema de búsqueda de talento, vinieron una serie de transacciones que dejaron fuera del equipo a peloteros como Matt Kemp, Dee Gordon, Hanley Ramírez, Dan Haren, Brian Wilson y Tim Federowicz, para mencionar a los más destacados.

A cambio, los Dodgers adquirieron al eficiente segunda base Howie Kendrick, al veterano short stop Jimmy Rollins, al receptor cubano Yasmani Grandal, junto a los lanzadores Brandon McCarthy y Brett Anderson, entre otros.

Y de entrada, estos refuerzos ofrecen una mejor perspectiva, con relación a la última temporada, en cuanto al trabajo defensivo del infield.

Al mismo tiempo, el equipo necesita reestructurar su equipo de relevistas y queda aún por verse quiénes serán los apagafuegos que tendrán la responsabilidad de acudir al llamado en los episodios siete y ocho, para servirle la mesa al taponero Kenley Jansen.

Por el momento, Mattingly cuenta con J.P. Howell, Brandon League, Paco Rodríguez, así como con las incorporaciones del veterano Joel Peralta, un diestro dominicano que fuera adquirido del Rays de Tampa Bay, donde en la pasada temporada acumuló marca de 3-4, y una efectividad de 4.41, durante los 69 juegos en los que intervino.

Otro brazo dominicano, es el de Juan Nicasio, adquirido de los Rockies de Colorado, donde el también diestro, de 28 años de edad, lograra en la campaña de 2014, totales de 6-6, con una efectividad de 5.38, en sus 33 juegos, incluyendo 14 como abridor.

Otro lanzador derecho, Chris Hatcher, quien viene procedente de los Marlins de Miami, donde tuviera participación en 52 juegos y 56 episodios, siempre en relevo, logrando en la pasada temporada, marca de 0-3 y efectividad de 3.38, también buscará llenarle el ojo al timonel azul, durante los entrenamientos primaverales.

Los Dodgers, por otra parte, están por cerrar un acuerdo con el relevista Sergio Santos, a quien le han ofrecido un contrato de ligas menores, de acuerdo a los más recientes reportes.

El nativo de Los Ángeles, llegó a rescatar 30 juegos para los Azulejos de Toronto, en la temporada 2011, pero desde entonces, una serie de lesiones han estropeado la carrera del diestro de 31 años de edad, quien la pasada campaña, presentara marca de 0-3, con efectividad de 8.57, logrando salvar 5 juegos, de los 26 en que tomó parte.

Esa es la baraja de opciones que tiene en sus manos, hasta el momento, Don Mattingly, para intentar cambiarle la cara a un bullpen que en la temporada 2014 se destacara como uno de los menos efectivos de todo el beisbol, ya que se ubicó como el número 22, en cuanto a carreras limpias permitidas, mientras que el promedio de victorias (WAR), colocaba al equipo de relevistas de los Dodgers, en la casilla número 26 de la gran carpa.

Ese será, sin duda, el departamento en el que Mattingly y su equipo de trabajo, tendrán que hacer malabares para integrar un bullpen de respeto, si es que pretenden lograr su tercer banderín consecutivo en la División Oeste de la Liga Nacional.

En lo que corresponde a la producción ofensiva, los de Chávez Ravine pueden integrar un orden de bateo muy respetable, girando en torno a la confiable producción y consistencia de Adrián González, de quien se puede esperar que estará presente en 155 o 159 juegos, en los que deberá remolcar más de 100 carreras e irse para la calle en unas 25 o 30 ocasiones.

También se anticipa un substancial aporte de Howie Kendrick, quien no se distingue precisamente por su poderío, pero sí por su bateo oportuno, como lo indica su porcentaje de .347 con corredores en base, durante la pasada campaña con los vecinos Angelinos.

El eficiente segunda base, intervino en 157 juegos, bateando para .293, disparó 181 imparables, incluyendo 33 dobles, anotando en 85 ocasiones, mientras impulsaba 75 carreras.

Mattingly también cuenta con el guardabosques izquierdo Carl Crawford que puede convertirse en un elemento importantísimo, en caso de que se mantenga saludable y logre superar, en su tercera campaña (segunda completa) vestido de azul, los 105 juegos en que participó durante 2014.

Crawford cuenta con el talento como para doblar su producción de 8 bambinazos y 46 carreras remolcadas, durante el 2014, muy especialmente, si encuentra corredores en los senderos.

Una labor que cae sobre los hombros del experimentado nuevo torpedero del equipo, Jimmy Rollins, y del cubano Yasiel Puig, quien debe regresar a patrullar la parcela derecha.

El nativo de Cienfuegos, intentará consolidarse, en su tercera campaña en grandes ligas, como la gran figura que prometen sus atributos físicos y su instinto natural como pelotero. Puig requiere de una mayor paciencia cuando se encuentra en la caja de bateo, pues su misión, más allá de su bateo largo, es la de embasarse a toda costa.

Luego vienen los bateadores zurdos, Adrián y Crawford, junto con Kendrick, para hacer sonar la registradora. Una ofensiva que se puede complementar con la veteranía de Juan Uribe, con Andre Ethier, Joc Pederson y A.J. Ellis.

Sin olvidarnos de que, cuando aparezcan en el montículo Clayton Kershaw y Zack Greinke, además de su casi intransitable repertorio de lanzamientos, se cocinan aparte cuando se paran junto al plato, con un madero entre las manos, pues se trata de dos de los mejores bateadores, entre los serpentineros.

Greinke logró 6 dobles y un cuadrangular, impulsando 3 carreras, mientras anotaba 5 veces, en los 60 turnos al bate que consumió en el 2014, mientras que el lanzador ganador del Cy Young y del MVP en el Viejo Circuito, en las 63 veces que visitó la caja de bateo, disparó 11 imparables, incluyendo un batazo de tres esquinas, impulsó 3 carreras, anotó 5 y hasta se dio el lujo de robarse una almohadilla.

Esto, sin embargo, no es más que la sal y la pimienta, que los dos mejores abridores de los Dodgers le ponen a lo que ellos mejor saben hacer, que es retirar a los bateadores de la oposición, tal y como lo hicieran en el 2014, cuando entre ambos recetaron 446 chocolates, en su labor conjunta a lo largo de 400 episodios y dos tercios.

Con todo lo anterior, queda claro que en el 2015, el zurdo texano y el diestro floridano, volverán a convertirse en la columna vertebral de la rotación de abridores que utilizará Don Mattingly, misma que se complementará con el zurdo coreano Hyun-Jin Ryu, mientras que para la cuarta y la quinta plaza, están Brandon McCarthy y Brett Anderson.

Con esos argumentos, los Dodgers librarán otra tórrida batalla en su división durante los 162 juegos de la próxima campaña, principalmente, con los rivales de siempre, los Gigantes de San Francisco, ni más ni menos que los campeones de la Serie Mundial 2014, además de vérselas con unos fortalecidos Padres de San Diego, que ahora contarán con los servicios de Matt Kemp, con los Diamondbacks de Arizona, que llegan de la mano de su nuevo timonel, Chip Hale, quien llegó para tomar el lugar de Kirk Gibson, y los Colorado Rockies, siempre impredecibles, con su paraíso para el bateador, el Coors Field.