Hace casi un año, SmackDown Live buscó encontrar su identidad en la división de marcas cuando el espectáculo anunció que sería la tierra de oportunidades. Un lugar para el otrora relegado talento de nivel B pudiese demostrar sus patadas voladoras y suplexes y convertirse en algo cercano a un nombre reconocible.
Y mientras la dirección ha elevado las estrellas que podrían no tener la oportunidad de brillar en el más reconocido hermani de SmackDown, Monday Night Raw, hay un inconveniente.
SmackDown, de muchas maneras, se ha convertido en un mar de igualdad en los últimos meses. Desde que AJ Styles perdió el Campeonato de la WWE en el Royal Rumble en enero, no se ha destacado ningún luchador. No ha sido Randy Orton, no ha sido Kevin Owens, no ha sido aún Jinder Mahal - y vale señalar que los dos últimos son campeones al presente en SmackDown. De hecho, Styles mismo ha hecho poco para obtener una atención constante desde que perdió el cinturón.
La realidad en los deportes es que tanto como nos gusta la narrativa de ser nadie a ser héroe, también amamos a los campeones perennes. Es por eso que el personaje de Styles funcionó tan bien en 2016. Es por eso que Brock Lesnar actualmente funciona tan bien en Raw, aunque no sea un regular. Es por eso que no podemos obtener suficiente de los Patriotas de Nueva Inglaterra o de los Golden State Warriors, incluso si odiamos la idea misma de que esos equipos ganen. Todavía los vemos.
Todavía observamos a Roman Reigns, y lo hacemos plenamente conciliando su efecto polarizador. La palabra operativa aquí es "efecto", porque tiene uno. Reigns hace algo a nuestra sangre para que hierva. Ahora reconocemos plenamente que Reigns es único, tal vez el personaje más interesante aparte de John Cena en el barómetro del amor y el odio que la WWE ha tenido. Pero fuera de Reigns, Raw ha hecho un tremendo trabajo en desarrollar a Braun Stowman (que está lesionado actualmente), mientras que mantienen a Seth Rollins y Finn Balor no sólamente relevante en el foco del evento principal, sino como personajes atractivos.
La pregunta que se hace últimamente con SmackDown es: ¿A quién vamos a mirar? No es Mahal, todavía no. ¿Es Owens? Shinsuke Nakamura? ¿Styles?
Las últimas semanas son un ejemplo perfecto de defectos de carácter en la marca azul. Styles está perdiendo frente a Dolph Ziggler una semana, derrotándolo la siguiente, todo sin ninguna ramificación real. Si el objetivo es que estos luchadores se enfrenten con resultados mixtos en estos micro feudos, todo por el bien levantar interés en Money in the Bank (que está a semanas de distancia), es algo equivocado, porque la paridad es un camino equivocado a la grandeza.
Lo que SmackDown necesita es un personaje líder. Solo uno.
No necesita ser un ganador perenne, pero necesita ser el rostro perenne que, bueno, corre el lugar. ¿Puede Styles regresa a ese lugar, donde tan pronto como su música suena, sabíamos que estábamos viendo el punto culminante del show?
Usted puede hacer el mismo argumento para las mujeres. Naomi es una campeona merecida, pero no una campeona destacada. Mientras que no hay absolutamente nada malo con viaje hasta el pináculo de la montaña SmackDown, ¿qué le ha pasado a sus rivales principales?
A Charlotte Flair y Becky Lynch las han lanzado junto a Namoi durante algún tiempo, mientras que la facción ruda de Natalya, Tamina y Carmella son también un trío cuya suma es mayor que sus partes. Pero son las partes individuales las que no se destacan. Ese es un problema a largo plazo.
Charlotte fue sin duda lo mejor que le pasó a la revolución de las mujeres. Pero no sólo no es campeona este momento, ella realmente no ha sido un personaje relevante en solitario.
Con suerte, el Money in The Bank no sólo será un pay-per-view digno, sino el comienzo de una nueva dirección en la que alguien pueda llevarse la corona de la atención, porque tal como está, ese título está vacante.
FALLOS Y ACIERTOS
• Bienvenido, The New Day, que hizo su debut en el ring de SmackDown. Es cierto que fue una victoria predeciblemente divertida contra los Colón, pero ¿sería un error entregar los títulos al New Day tan pronto, cuando se encuentren con los Usos en Money in the Bank? ¿Qué dice esto sobre Breezeango? Más que cualquier otro equipo, Fandango y Tyler Breeze merecen una corrida como campeones.
• Hablando de Breezango, su parodia de "Fashion Files" fue otro segmento hilarante con The New Day buscando información sobre los Colón. "Tomé una botella de colonia para los chicos en el laboratorio, sólo para descubrir que no hay chicos ni laboratorio". No tengo idea de lo que Fandango estaba hablando, pero fue gracioso, no obstante.
• Lana hizo su debut también, aunque fue un poco incómodo. Ella caminó por la rampa durante el segmento de apertura y exigió ser parte de la debutante lucha de Money in The Bank para las mujeres mientras las otras chicas observaban. Finalmente, a Lana le fue negada su oportunidad. El comisionado Shane McMahon dijo que tenía que ganarse su oportunidad, y Lana encolerizada. Entonces ella obtiene una oportunidad de título contra Naomi en Money in the Bank ¿Qué? ¿Cómo pasó esto?
• Oh, y cero Rusev otra vez? Sólo digo.
• Los inconvenientes de ser campeón de SmackDown. En primer lugar, Randy Orton tuvo lo que pudo ser su peor reinado como campeón durante su última corrida, y el martes, Jinder Mahal se encontró luchando ante Mojo Rawley, quien, como él mismo dijo, ha sido un no factor desde que ganó el Andre the Giant a principios de abril. Mahal ganó, gracias a una interrupción nefasta de los hermanos Singh, pero no fue un encuentro memorable. Y no hizo nada para construir la credibilidad de Mahal.
• Un evento principal digno entre Owens y Nakamura, pero se sentía que no había diferencias reales entre los dos. Tal vez esta rivalidad crecerá y se convertirá en algo verdaderamente dinámico con los dos enfrentándose por el Campeonato de Estados Unidos en SummerSlam.