¿Alguna vez tuvo uno de esos días en los que sucede tanto y, al mismo tiempo, nada está ocurriendo realmente? Así se sintió la edición de SmackDown del martes la mayor parte de la noche. Todos intercambiaron palabras unos con otros, haciendo promesas de que serían ellos quienes saldrían victoriosos en el PPV de Fastlane y se dirigirían a WrestleMania con todo el impulso. Se agregaron un par de encuentros a la cartelera y se conectaron algunos golpes de despedida.
Todo fue tan formulista como esperado, hasta un giro de último minuto que podría cambiar la dinámica de la batalla de seis hombres del domingo por el campeonato de la WWE.
El martes, en una vorágine de cinco hombres que involucró a todos los competidores en el próximo partido de Fastlane (sin John Cena) para culminar el espectáculo, Sami Zayn reveló su verdadera motivación. En medio de los golpes, superpatadas, compinches y otros golpes de pugilismo, Zayn, que le había prometido a Kevin Owens que se tendería en el medio del ring el domingo, esencialmente entregando el título a KO, conectó un Helluva Kick a su "mejor amigo" y luego planchó a Owens para el triunfo.
¿Quién lo vio venir? ¿Fue la amistad de Zayn una estratagema todo el tiempo?
En una entrevista en su camino de regreso al vestuario, un Zayn animado rugió que él es el intérprete más subestimado en la WWE y que se merece su oportunidad. Owens, con la boca abierta y los ojos desorbitados mirando hacia la rampa, no podía creer lo que acababa de pasar.
Hemos criticado a SmackDown por su falta de creatividad en las últimas semanas, y si bien el show fue en general poco más que un gran momento para llevarnos al domingo, ese momento añadió otra dimensión a un conjunto de narrativas en juego ya abarrotadas.
Llevó algo de tiempo llegar allí el martes. Se suponía que el final programado sería AJ Styles contra Dolph Ziggler. Pero después de una intensa competencia verbal, comenzaron su lucha un poco más temprano en la noche. La lucha se movió de lado a lado haciendo un agran ejecución de alto ritmo hasta que Owens y Zayn interfirieron, deteniendo abruptamente el combate.
Pero Shane McMahon, como él y/o Daniel Bryan tienden a hacer todas las semanas, surgió de la zona detrás del escenario y exigió que no solo la lucha continuara, sino que también sería un Fatal 5 Way entre los dos luchadores originales, junto con Owens, Zayn y Baron Corbin.
Si bien la presunción estaba en la línea de lo que cabría esperar, el final tuvo un giro ingenioso en el viraje inesperado de Zayn, el tipo de giro que esperarías en un evento de PPV. Una decisión bien jugada del equipo creativo de SmackDown, incluso si ni Zayn ni Owens emergen como campeones el domingo.
A pesar de las travesuras de Zayn y las ambiciones ahora obvias, hay poco que sugiera que Styles no superará las dificultades y se irá con su cinturón. La anticipación entre él y Shinsuke Nakamura en WrestleMania es demasiado grande en este momento. Cualquier otra cosa parece anticlimática.
"Te quiero a tí, Shinsuke", dijo Styles en el ring antes de sus partidos del martes.
Perdido en medio de la eventual anarquía fue la suave química en el ring entre Styles y Ziggler, sin mencionar sus palabras apasionadas antes de darse un golpe el uno contra el otro. Hubo algunas menciones de la vida real que recuerdan a Cena y The Miz en los últimos meses o la paliza verbal de Roman Reigns a Brock Lesnar la semana pasada.
Ziggler se preguntó en voz alta qué le había sucedido a Styles. "Solías ser genial. Ya no eres fenomenal. Ahora estás desesperado".
Styles no perdió el tiempo replicando. "Esto de un tipo que ha estado en la WWE durante 13 años y todavía [no puede encontrar] su potencial".
Se fueron de lado y lado. Ziggler le reprochó la idea de que él, el autoproclamado luchador más exitoso en el negocio, nunca haya tenido un combate uno a uno en WrestleMania.
Él tiene un punto. Él sigue siendo uno de los talentos más brillantes en la lista. Es una lástima que él y Styles no hayan podido terminar lo que empezaron, en lugar de dar paso a un espectáculo que trata de agregar valor, cuando en realidad no fue así. Hasta que Sami Zayn hizo lo suyo.
Se pone seria la batalla del domingo entre Flair y Riott
El programa de PPV Fastlane del domingo es un gran paso adelante para Ruby Riott, que tendrá su primera lucha individual en PPV y a la vez la primera lucha de campeonato femenino de SmackDown contra Charlotte Flair. Ella abrió el espectáculo al abordar directamente su motivación para llevar a su trío contra la campeona. Todo comenzó el 14 de noviembre de 2017, cuando Flair ganó el campeonato de mujeres de SmackDown. Riott dijo que su enemiga fue exitosa en este negocio porque ella es la hija de un dos veces miembro del Salón de la Fama de la WWE y etiquetó el aura de Charlotte como un mito. ¿Y qué si Flair se hubiera convertido en la primera y única mujer en ganar los campeonatos femeninos de NXT, Divas, Raw y SmackDown? Ella todavía era un mito, y Riott quería destruirlo.
Flair lo negó. "Tuve que trabajar más duro que nadie por quien soy", dijo. "Cuando fallo, se magnifica. No puedo tener éxito, necesito ser trascendental".
Es difícil discutir eso. Pero este fue un momento que podría ser importante. Por primera vez desde que Riott y su escuadrón saltaron a la lista principal, obtuvimos algo más que amenazas y ambiciones aburridas o un ataque de tres contra uno. Riott nos contó una historia. Aunque parece poco probable que gane el domingo en Fastlane, Riott se alejó de esta edición de SmackDown con una imagen más clara de una identidad, lo que debería servirle para seguir adelante. Y la lucha del domingo debería hacer más de lo mismo.
FALLOS Y ACIERTOS
-- Nakamura finalmente tiene un rival en Fastlane. Resulta que Rusev también. Los dos se enfrentarán el domingo en una batalla entre el técnico y el rudo más querido en el planeta. Normalmente no apoyo la interferencia con un resultado esperado, pero tenemos la esperanza de que Rusev no sea enterrado nuevamente con el único propósito de elevar a Nakamura camino a WrestleMania. Parece una súplica semanal, pero por favor, dejen que Rusev desarrolle su nueva fama. Quizás English intervenga y permita a Rusev escapar con las manos en alto.
Por cierto, Nakamura tiene una voz bastante decente,¿eh? ¿Quien sabe?
-- Se agregó una lucha final a la cartelera de Fastlane, ya que Becky Lynch y Naomi se unirán para enfrentarse a Natalya y Carmella. Si bien hay poco atractivo para otra lucha en pareja por el simple hecho de involucrar a todos, hay un par de cosas en juego. Carmella todavía no ha cobrado en su maletín de Money in the Bank, y Natalya dijo que quiere a la ganadora entre Flair y Riott en WrestleMania. ¿O sucederá? Es seguro decir que esto último es más que improbable. Entonces, si Natalya no es una opción, ¿a quién enfrentará Charlotte? Como escribió mi colega Tim Fiorvanti, parece cada vez más probable que Asuka, la ganadora del Royal Rumble femenino, pueda dar el salto a los martes por la noche y enfrentarse a Flair en Nueva Orleans. Parece la oportunidad perfecta para Carmella para finalmente cobrar, ¿no?
--. Randy Orton y Jinder Mahal volvieron a intentarlo, esta vez sin nada en juego. Por supuesto, el oponente de Orton en Fastlane, Bobby Roode, estaba en el ringside, y luego de que Orton lanzara a Mahal contra el campeón de EEUU, Roode finalmente distrajo a Orton, costándole la victoria. ¿Entra Mahal en la lucha por el título de Estados Unidos el domingo? ¿Cuál es la obra aquí? No muchos creen que Orton dejará Fastlane con el título, pero voy a salir mal y predecir que lo hará. ¿No sería esa la oportunidad perfecta para que Orton y Cena reinicien una gran rivalidad de todos los tiempos y desafíe a Orton a una batalla de WrestleMania con oro en la línea?