OWING MILLS -- A medida que el profundo de los Baltimore Ravens, Bernard Pollard, se prepara para jugar en el mayor escenario del fútbol americano, el jugador ofreció un panorama sombrío para el deporte más popular de los Estados Unidos.
"Dentro de 30 años, no creo que exista", declaró Pollard a CBS Sports. "Podría estar equivocado. Sólo es mi opinión, pero creo que con la dirección que las cosas están tomando --donde están lanzando pañuelos por todos lados y todo lo demás-- se va a llegar a un punto en el que los aficionados se van a hartar".
Aunque predecir el final de la NFL es demasiado extremo, Pollard nos lleva a una cuestión importante. La liga está enfrentando una gran presión y escrutinio cuando se trata de cómo el juego afecta la salud a largo plazo de sus jugadores. No ayudó cuando este fin de semana el presidente, Barack Obama, cuestionó la seguridad del fútbol americano, diciendo que lo pensaría mucho antes de permitirle a su hijo jugar.
El fútbol americano es un deporte violento, y es ese aspecto físico del juego lo que atrae a los aficionados. Nadie va a apasionarse por el fútbol americano de bandera (basta con ver el interés en el Pro Bowl). ¿Significa eso la desaparición de la NFL? No lo creo. Sin embargo la calidad del juego disminuirá significativamente si la NFL continúa restringiendo a sus jugadores en el campo. Sin duda pueden apostar que un jugador que golpea como Pollard no estará en el campo en 30 años con base en la dirección en la que se dirige la liga.
Pollard cree que la liga debería estar preocupada por consecuencias más graves que las conmociones cerebrales.
"La liga está tratando de avanzar en la dirección correcta [respecto a la seguridad de los jugadores]", sentenció, "pero al mismo tiempo, [los entrenadores] quieren jugadores más grandes, fuertes y rápidos año con año. Y eso significa que vas a seguir recibiendo grandes golpes, conmociones cerebrales y golpes a las rodillas. Lo único que se puede esperar, y Dios espero que no suceda, es que un jugador muera en el campo. Hemos visto que sucede todo lo demás menos una muerte".
Esperemos que Pollard esté equivocado en ambas predicciones.