Aún conservamos reminiscencias del partido tres y cuatro de las Finales pasadas entre Spurs y Heat, con el equipo texano acariciando los sueños de básquetbol total. Juego de pases preciso, defensa asfixiante, escuela inacabable de talento nacido a lo largo y ancho del mundo.
San Antonio, dios Cronos del básquetbol posmoderno, ha destruido la versatilidad de los rivales a partir de la premisa de que no existe mejor jugador que todos juntos. Y con esa lógica expandida como un virus contagioso, ha quebrado el paradigma de la NBA como la conocíamos hasta ahora: han empujado a LeBron James, estrella absoluta de este juego, hacia lo más profundo de sus entrañas, obligándolo a rever su propia Decisión sin esgrimir una sola palabra. Sólo con los mecanismos del básquetbol.
Con su regreso a Cleveland Cavaliers, el mapa de la mejor liga del mundo ha cambiado nuevamente. El súper equipo de Miami Heat ha muerto para darle lugar a uno diferente, justo en la tierra que vio nacer al dueño actual de la NBA. Así de poderoso es James, el híbrido multiplataforma. Un chasquido de dedos para que el círculo de esperanza complete su último trazo. Es así, de esta forma, como el truco vuelve al centro de la escena.
¿Qué esperar, entonces, de la temporada que comienza? En esta mini-guía, traemos los puntos a seguir de cerca.
El eterno resplandor de una mente sin recuerdos: San Antonio Spurs
Si después de ver las Finales pasadas alguien sigue pensando que este es un equipo lento, más vale que visite cuanto antes un oculista. Los Spurs viajaron a la velocidad de la luz y tuvieron un ritmo de 97.1 en 2013-14, el máximo desde la Liga 1996-97. Revisar este plantel sirve para concluir que este conjunto es mucho más que Tony Parker, Manu Ginóbili y Tim Duncan. Y que avanzará, poco a poco, hasta convertirse en el equipo de Kawhi Leonard, como alguna vez anticipó Gregg Popovich tras la llegada del alero estrella. En el inicio de la temporada actual, San Antonio volverá al laboratorio para purificar aún más la fórmula que le permitió alcanzar el éxito en la temporada pasada. La convicción de recordar lo malo para alcanzar lo bueno es una de las mayores fortalezas de este plantel. No llegaron figuras al equipo porque las figuras ya están aquí. A veces, no hace falta cambiar para que todo cambie. La barba de Pop es un símbolo inequívoco de su sabiduría.
El día después de mañana: LeBron James regresa a los Cavaliers
Si aún estás arrepentido por haber quemado tu vieja camiseta número 23, es momento de que dejes de lado las penas para darle lugar a la euforia. Siempre hay lugar para las segundas oportunidades, y LeBron James es claro ejemplo de esto. Destrozó años atrás a Cleveland con su partida y hoy regresa para cambiar lágrimas por sonrisas. Para construir nuevamente riqueza. ¿Son los Cavs un equipo de campeonato? Todo equipo en el que esté LeBron será contendiente. Tan simple como eso. En este caso, tres preguntas llegan a mi mente: a) ¿Qué tal puede hacerlo David Blatt en su estreno como coach NBA? b) ¿Soportará Kevin Love el hecho de ser tercera opción de tiro en este equipo? (ver: Chris Bosh) c) ¿Puede Kyrie Irving convertirse en la súper estrella que promete ser al lado de James? A decir verdad, soy optimista con la primera y la tercera inquietud, no tanto con la segunda. Aún no se si el apodo "Two and a half men" se mudará de Miami a Cleveland, pero los indicios proponen algo semejante. En el Este, estos Cavaliers darán que hablar. No me aguanto para ver el nuevo mapping que traerá la organización en el Quicken Loans Arena con el regreso de su hijo pródigo.
En busca del destino: Derrick Rose, de regreso en los Bulls
En la temporada 2010-11, Rose jugó 81 partidos, fue MVP de la NBA y tuvo un porcentaje de triunfos del 75.6%. En las tres temporadas siguientes, Rose jugó, en total, 49 partidos con un 62.2% de victorias. ¿Cómo no estar expectantes ante un regreso de tamaña magnitud? Tom Thibodeau deposita esperanzas en su base armador pero ha logrado confeccionar un plantel serio y aplicado en los años de desgracia de D-Rose. Como si fuese poco, los Bulls han concretado el arribo de Pau Gasol y del prometedor Nikola Mirotic, estrella del básquetbol europeo. Como es habitual en los equipos de Thibs, se trata de un plantel en construcción. Si logra mantenerse saludable, y Thibodeau consigue aplicar la defensa asfixiante propia de sus equipos, los Bulls pueden ser favoritos a algo importante. Sólo se trata de descifrar las cartas que están sobre la mesa sin apresurarse a sacar conclusiones prematuras.
Lost: el Thunder sin Kevin Durant
La pregunta inicial de OKC tiene que ver con el entrenador: ¿puede Scott Brooks mantener a un nivel elevado al Thunder sin la presencia de 'La Tarántula'? Se trata, sin exagerar, del mayor desafío de su carrera. Cuando Russell Westbrook no estuvo por lesión, fue Durant quien sacó la cara por los suyos. Cuando Serge Ibaka no estuvo por lesión, fue Durant quien se puso el equipo al hombro. ¿Y ahora qué? En la temporada pasada, informa ESPN Stats, Westbrook jugó 1.411 minutos y sólo 41 de ellos los hizo sin KD a su lado. Preocupante. No existe reemplazante natural para un jugador sobrenatural, por lo que se cae de maduro que lo que tiene que hacer Oklahoma City para extrañar menos a su estrella es que cada uno de los jugadores de un extra adicional. En las últimas dos temporadas, la eficiencia ofensiva de OKC con Durant, agrega ESPN Stats, fue la primera en la NBA, mientras que cayó al puesto 20 sin él. La fractura en el pie derecho lo tendrá, en principio, todo noviembre afuera. Fanáticos del Thunder, por más que quieran acelerar el tiempo, se puede sólo quitar una hoja por día en el calendario. La demanda de psicólogos está alterando la economía en estos lares.
Los Angeles al desnudo: Kobe regresa, Nash queda afuera
Todavía traigo un pañuelo en mi bolsillo derecho para alcanzarle a los fanáticos de Lakers que hablan de Kobe Bryant. Tan dura fue su lesión en el tendón de aquiles que aún la recordamos con dolor todos aquellos que observamos ese momento por TV. Kobe saliendo con ayuda de sus compañeros de la cancha. Kobe saliendo a explicar a los periodistas lo que sentía en ese momento. Kobe escribiendo en Facebook sobre el espíritu de la Mamba Negra. Kobe regresando antes de tiempo y volviéndose a lesionar. Hoy, tiempo después, el astro angelino está de regreso y promete ser as en una mano de póker poco valiosa, ya que los Lakers no tendrán demasiado para demostrar en la temporada en curso. Vaya paradoja para esta franquicia, que sólo años atrás supo degustar los manjares más deliciosos de la NBA y hoy navega en la penuria. Si algo faltaba para ahuyentar a la gente del Staples Center, llegó la lesión de Steve Nash. Pregunta al pie de página: ¿es el cierre de la carrera del base canadiense? Triste, solitario y final. Hay veces que los desenlaces son inevitables.
Algunos tips para conocer algo más de la temporada que comienza
Anthony Davis, ala-pivote de New Orleans Hornets, es uno de los prospectos a seguir de cerca en esta temporada. Figura con el Team USA en el pasado Mundial de España, promete ser una de las grandes figuras de la Liga en el futuro cercano.
Carmelo Anthony sigue en los Knicks, con Phil Jackson como presidente y Derek Fisher como coach. Los bases José Manuel Calderón y Pablo Prigioni intentarán lo imposible: acarrear a las ovejas descarriadas a buen puerto. J.R. Smith y compañía buscarán hacer lo contrario. Esta lucha entre el bien y el mal dictaminará qué será de la temporada de los Knicks, si el cielo o el infierno.
De ninguna manera nos olvidamos de los Clippers: con Chris Paul a la cabeza, seguido por el polifacético Blake Griffin (¿han visto su mejora en tiros a distancia?), el otro equipo de Los Angeles promete ser el animador crucial en Hollywood. La gran incógnita es si Doc Rivers puede transformar un equipo prometedor en uno de campeonato. Yo pondría algunas fichas en esta mesa.
Bienvenido Steve Kerr al equipo más electrizante de la NBA: el experto tirador de tres puntos, ex analista de TV, ha tomado las riendas como coach de los Golden State Warriors. Además de ser maravillosos en ofensiva -claro, juega Stephen Curry- ahora le han incorporado defensa. Si Andrew Bogut mantiene su salud -¿difícil, no?-, pueden conquistar algo muy importante en la Liga. No voy a mentir: es uno de mis equipos preferidos para el NBA League Pass.
Si el dueño Mark Cuban puede recuperar a puro grito desde la tribuna a Jameer Nelson y Tyson Chandler, los Mavericks pueden ser un dolor de cabeza para cualquiera en la Conferencia Oeste. Chandler Parsons significa el equilibrio perdido de una franquicia que necesita cubrir por todos los frentes al veterano Dirk Nowitzki. Todavía no alcanzo a ser optimista con Dallas, pero estoy seguro que con trabajo y algo de confianza pueden estar en la discusión. Seamos cautos a la hora de evaluarlos.