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Los Carolina Panthers han perdido cuatro partidos consecutivos, pero aun así el técnico Ron Rivera afirma que nadie los puede dar por descontados en una división donde ningún equipo tiene un récord por encima de la marca de .500. "Eso te da algo de esperanza, pero sinceramente, nos estamos quedando sin tiempo", admitió el coach de ascendencia puertorriqueña y mexicana, el único entrenador en jefe latino activo en la NFL. 
"Tenemos que hacer las cosas mejor. Tengo que entrenar mejor. Los entrenadores tienen que entrenar mejor. Tenemos que practicar mejor. Tenemos que salir y tenemos que jugar mejor y tenemos que hacerlo juntos como equipo. Esa es la única manera que vamos a ganar partidos".
Los Panthers fueron humillados 45-21 horario estelar el pasado Monday Night Football por los Philadelphia Eagles, aunque cabe destacar que el marcador no hace justicia a la verdadera paliza que sufrieron, ya que anotaron dos touchdowns insignificantes al finalizar el partido. La defensiva de los Eagles manoteó a su antojo a Cam Newton y a la línea ofensiva de Carolina, derribando al quarterback en nueve ocasiones, un récord en sus cuatro temporadas en la NFL. "Estoy muy decepcionado", afirmó Rivera sobre el desempeño ofensivo y la falta de protección a su mariscal de campo, que negó estuviese sufriendo de ningún problema físico. "Ahora tendremos que ver el video. Por ahora no voy a acusar a nadie. Una vez que tengamos la oportunidad de echarle un vistazo, entonces vamos a evaluarlo". Lo increíble para Rivera es que a las alturas de la undécima fecha de la temporada aún no haya nada perdido en una división donde los líderes, los New Orleans Saints, cuentan con un pobre récord de 4-5. El Sur de la NFC sigue siendo una de las divisiones más deficientes de la NFL. El otro consuelo para los Panthers es que sólo uno de los equipos a los que se medirán en los seis partidos restantes de la campaña cuenta con un récord positivo de mayor número de victorias que derrotas, siendo considerado uno de los calendarios "más fáciles" en la NFL. Carolina enfrentará a un solo equipo con un récord de más de .500, los Cleveland Browns (6-3), el 21 de diciembre. El resto de su calendario incluye un duelo contra los Minnesota Vikings (4-5) el 30 de noviembre, además de cuatro cruciales partidos contra rivales divisionales: los Atlanta Falcons (3-6) el domingo 16, de noviembre y el cierre de temporada el 28 de diciembre, contra los Saints (4-5) el 7 de diciembre y ante los Tampa Bay Buccaneers (1-8) una semana después (14 de diciembre). Rivera ha reiterado que Newton sabrá asumir el desafío de liderar a los Panthers para dejar atrás el pésimo tramo de ocho partidos en el que han ganado una sola vez y que el equipo estará listo para uno de los partidos más importantes de la campaña contra Atlanta el próximo domingo. "Sé que hay una sensación de pánico [a nuestro alrededor] pero no yo no me voy a enfocar en eso. Lo importante es lo que haremos esta semana en las prácticas para prepararnos para Atlanta. Atlanta también tiene tres victorias, así que en este momento estamos pisándole los talones a Nueva Orleáns", afirmó. "Todavía estamos en la posición de ganar el Sur de la NFC, créanlo o no, tenemos una oportunidad. Pero es claro que las cosas tienen que ponerse en marcha en la dirección correcta".
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