PHOENIX -- Cada vez que llega un nuevo Super Bowl, nos toca hablar de un potencial Factor X.
Siendo sincero, no sé si ha habido alguno más improbable que este en el pasado. Me estoy refiriendo al corredor LeGarrette Blount.
No digo que sea improbable por falta de talento, sino por el simple hecho de que es un milagro que incluso esté vistiendo el uniforme de los Patriots en este momento.
Blount y la controversia han ido de la mano a lo largo de toda su carrera. Incluso desde que estaba en la Universidad de Oregon, cuando le propinó un golpe de puño a un rival, algo que le costó bastante dinero, considerando que a la postre no fue elegido en el draft del 2010.
No obstante, los Titans le dieron una oportunidad, sobrevivió el corte final y quedó en el plantel de 53. Pero luego para hacer lugar para Tim Shaw y Patrick Bailey, Tennessee lo colocó en waivers.
Casi sin perder tiempo, lo reclamaron los Buccaneers y vaya si acertaron. Blount no sólo fue el novato con más yardas por tierra en la temporada 2010, sino que además se convirtió en el segundo novato no elegido en el draft en la historia en superar las 1000 yardas por tierra en su primera temporada; Dominic Rhodes había sido el otro.
Sus características nómadas siguieron en el frente de la escena luego de que los Bucs lo cambiaran a los Patriots por Jeff Demps y una selección de primera ronda.
Quedó claro en ese entonces que Blount estaba cómodo con los Patriots. Si necesitan más pruebas, pueden ver el video del encuentro ante los Bills en el cual acumuló 334 yardas totales, un nuevo récord de franquicia para New England.
Siendo preso de su propio éxito, los Patriots optaron por no pagarle al corredor el dinero que quería, y Blount firmó un contrato de dos años con los Steelers.
Su carrera con Pittsburgh no inició bien luego de que fuera arrestado por posesión de marihuana en agosto, y eso era apenas la base del iceberg.
Digo esto porque el 17 de noviembre en un encuentro ante los Titans, Blount exhibió una carencia de profesionalismo absoluto y decidió retirarse del estadio en pleno partido, debido a que estaba frustrado por su poco protagonismo.
Acto seguido, los Steelers lo cortaron, y su reencuentro con los Patriots era una realidad.
"Lo pasado ya es historia", declaró un Blount a la defensiva cuando le tocamos este tema.
Primeramente me parece incorrecto que jugadores que básicamente fuerzan su salida de un equipo, logren tener una recompensa como Blount. Pero al final del día el talento todo lo puede, y aquí está el polémico corredor a un triunfo de coronarse campeón del Super Bowl.
"Aquí me siento realmente cómodo", admitió Blount. "Belichick genera un gran ambiente y me siento como en casa".
Lo más curioso es que Blount es a mi juicio el Factor X, y debe brillar si los Patriots quieren ganar el Super Bowl.
No sólo porque viene de uno de los mejores juegos de su carrera en el Campeonato de la AFC y porque parece sentirse cómodo en New England, donde muchos jugadores con pasado problemático encuentran su hogar ideal bajo la tutela de Bill Belichick, sino porque su posición coincide directamente con posiblemente la única deficiencia de la defensiva de los Seahawks.
Desde que Seattle perdió a Brandon Mebane, han tenido algunos problemas para detener el ataque terrestre, y eso ha quedado en evidencia.
Porque aunque hicieron un mejor trabajo en la segunda mitad ante los Packers, la realidad es que Carolina y Green Bay se combinaron para 267 yardas por tierra en estos playoffs ante Seattle.
Quizás no sea una cantidad desproporcionada, pero sí es un número alto para esta defensiva.
"Esa defensiva no es inmortal", enfatizó Blount. "Tenemos confianza plena".
Confianza que será vital para correr el ovoide ante los Seahawks, algo que será primordial para los Patriots.
En primera instancia porque es un gran antídoto para las jugadas de carga y todos sabemos que el coordinador defensivo Dan Quinn tendrá un plan agresivo para el domingo.
Y en segundo término porque ser exitoso por tierra abre tu abanico de posibilidades en cuanto a tu libreto ofensivo se refiere, y con Tom Brady detrás de centro, eso generalmente significa un triunfo.
El camino de Blount en la NFL no ha sido el típico. Ha saltado de equipo a equipo con la controversia persiguiéndolo en casi todas sus paradas, incluso al punto que quizás no merecería estar aquí considerando que la mayoría de sus problemas se los buscó él mismo.
Lo que sí no se puede negar es su talento, y por esa razón es que Blount pasó de abandonar a su ex equipo a Factor X del Super Bowl.
Si bien Tom Brady siempre será el amo y señor en New England, las posibilidades de que consiga su cuarto anillo podrían tranquilamente depender de su corredor.
La montaña rusa de Blount ha sido tan improbable que a esta altura ya no sorprendería a nadie si tiene un rol protagónico el domingo.
"Blount siempre corre con determinación", concluyó Brady. "Cuando él tiene éxito por tierra, tenemos la mitad de la batalla ganada".