MÉXICO -- El trabajo del silbante guatemalteco Walter López en el partido entre México y Costa Rica iba bien hasta el primer tiempo extra, pues luego se equivocó, creo, sobre todo ya en el final de la segunda parte.
En esos últimos 15 minutos se cayó. Hubo gran cantidad de patadas. Hay dos acciones que en mi opinión son de tarjeta roja. Para mí marcó mal la jugada clave del partido, el del penalti. No era penalti. No existe falta alguna.
Previo a la jugada que le marcaron favorablemente a Oribe Peralta -dentro del área- Walter se equivocó al no marcar una falta sobre Francisco Javier ‘Maza’ Rodríguez.
Luego tomó una decisión en la acción de Paúl Aguilar, pues este es quien encimó, metió el cuerpo y cometió la falta. Marcó bastante bien después, porque no hubo falta de Guardado y amonestó a Campbell por simular una falta.
LAS DOS CARAS DE ORIBE
A medida que avanzaba el juego vino una serie de acciones fuertes. En una Díaz ya estaba amonestado y me parece que ameritaba la segunda amarilla. Iniciando el primer tiempo extra hubo un golpe en la cara de Oribe, que tampoco vio y no es sancionado.
Una de las fallas más notorias fue el faul que comete Oribe. Tenía que haber recibido roja directa, por una entrada por detrás; fue una jugada muy brusca, muy violenta que el árbitro no se atrevió a sancionar.
NO LO IBA A MARCAR
Por último reitero: la última jugada del encuentro no fue penalti. Viendo la acción de primera instancia, sin repetición, nos damos cuenta que el silbatazo es posterior. El silbante no iba a marcar nada. Aquí el problema es que se deja llevar por lo que le dijo el asistente. No veo empujón. No veo nada. Me parece que se equivocó el asistente al decirle a López que era penalti. Para mí es inexistente.