NUEVA YORK (Enviado especial) -- Sin acción. O mejor dicho, a medias. La postergación corrió para los dos partidos de semifinales de damas y para el "dobles de campeones" entre los hermanos John y Patrick McEnroe ante Pat Cash y Mark Philippousis. El resto, en actividad: la continuidad de los juniors y el inicio del tenis adaptado, con presencia del argentino Gustavo Fernández (frenado por lluvia en el tercer set). Además, el comienzo de la competencia colegial con invitaciones a jóvenes jugadores de la NCAA.
La confirmación de la reprogramación de las semis entre Serena Williams-Roberta Vinci y Flavia Pennetta-Simona Halep se dio a cuatro horas antes de la hora pautada por el comienzo. En un día inestable, con precipitaciones por la mañana, la decisión de los organizadores fue no arriesgarse ante un pronóstico de fuertes lluvias por la noche. Buena postura: 18.50, intensa lluvia en el Corona Park.
Tampoco quisieron correr riesgo el miércoles, cuando pasaron el duelo de Stan Wawrinka y Kevin Anderson al Louis Armstrong y adelantaron una hora el partido de Roger Federer y Richard Gasquet. En ese caso, precaución que no habría sido necesaria, dado que finalmente no llovió en Nueva York. Pero es mejor siempre estar un paso adelante en lo posible.
Lo cierto es que con estas nuevas modificaciones de programa habrá un súper viernes de acción. En la jornada matutina, las damas; y por la noche, desde las 17 (hora local), Novak Djokovic ante Marin Cilic y Stan Wawrinka frente a Roger Federer.
¿A quién favorece este cambio de día en las damas? En principio, a ninguna. Recién se sabrá la beneficiada de cara a la final. La que menos tiempo juegue en semifinales, en la víspera de la definición, sin dudas correrá con una pequeña ventaja.
Con respecto al pronóstico para los próximos días, reservado. Probabilidades de lluvia para los tres días, aunque con diferente grado: el viernes, pocas chances de precipitaciones; el sábado, más del 50%; y el domingo, nuevamente espaciadas.
A un año de la inauguración del techo del Arthur Ashe, luego de un torneo sin sobresaltos hasta este jueves, los organizadores empiezan a mirar con mucho más cariño los gastos realizados para el proyecto que verá luz en 2016. Será cuestión de tiempo; y de cruzar los dedos para estos tres días que restan.