BUENOS AIRES - Escribo a pedido de muchos hinchas que me dicen. “Cucu, escribí algo a favor de Tevez, todos sabemos que es un excelente profesional incapaz de lastimar a nadie”. Y yo creo que, además de Ezequiel Ham, a quien le mando un fuerte saludo y toda la energía para que se recupere lo mejor posible, los más perjudicados son los hinchas.
Aclaro para algún desinformado. Estos pedidos que me escriben los hinchas son en obvia contestación al choque que Carlitos del Pueblo, tuvo con Ezequiel Ham, el joven jugador de Argentinos Juniors. Y desgraciadamente le provocaron una quebradura a Ham.
El comunicado de la familia Ham: "Las imagenes de la lesión son más que elocuentes". http://t.co/0I3SWG7Vtm pic.twitter.com/fT3qVfiCEb
— TodaPasion (@TodaPasion) septiembre 21, 2015
Los hinchas de Boca Juniors están preocupados, sienten que atacan demasiado a su ídolo. Y francamente, entre saber cómo está el jugador del Pueblo y en saber si hay que sancionarlo de oficio, prefiero pensar en Ham. Todos sabemos que Tevez sería incapaz de hacerle daño a otro jugador. Así que podemos descartar la mala intención.
Escribo esto porque es importante saber que Ham estará unos buenos meses sin jugar y que no es bueno que tomemos una actitud efímera y nos olvidemos de este suceso.
En mi opinión no podemos echarle la culpa de todo al fútbol. El fútbol argentino es un deporte de choques, golpes, roces constantes. Lo que debemos aprender de esta situación es que los jugadores tienen que ser más cuidadosos, más medidos con sus acciones y controlar los movimientos a destiempo que suelen provocar lesiones.
Eso también es parte del profesionalismo de cada jugador, pensar en que si se llega a tiempo a una pelota se puede lastimar a un colega. Cada jugador debe saber que una imprudencia puede ser un arma mortal.
Sin embargo, lo más anecdótico que tiene esta historia que atrae polémicas en todos los diarios y canales de televisión, es pensar la forma de actuar de la sociedad ante un hecho un tanto polémico. Tuvo la culpa, es inocente, hay que sancionar, todo gira en base a estas palabras y nos olvidamos de Ham.
Aparece el fanatismo, defender los colores y al jugador del Pueblo ante todo. Y la cuestión es fácil, Tevez se equivocó al ir mal en una jugada, como podemos equivocarnos y nos equivocamos de hecho, todo el tiempo. No es culpable de nada. Pero tiene su grado de responsabilidad y eso no se puede eludir.
El único perjudicado en todo esto es Ezequiel Ham, como Bueno y tantos otros jugadores que sufren lesiones. Pero también el hincha que exacerba todo su fanatismo y no es capaz de pensar y cuestionar actitudes que son incuestionables.
Tevez debe ser sancionado y esto tiene que ser una decisión unánime aceptada por todos los hinchas y administrativos que hacen al fútbol. No tienen que existir dudas en este sentido. No hay que dramatizar, para eso está el reglamento y a veces es bueno que el reglamento esté por encima del parecer de los árbitros que también tienen derecho a equivocarse. Pensar en las intensiones, ya es un juicio moral que no corresponde hacerle a nadie.
En cambio, sí se deben tener en cuenta las responsabilidades. Ser buen jugador no es solo tener un alto rendimiento dentro de una cancha. Ser buen jugador también es pensar en el otro, no ser irresponsable, tener mas cuidado y pensar que no pasa nada si se pierde en una jugada, no se acaba el mundo. Peor es lastimar a un compañero.