El mexicano Marco Estrada respondió con creces a la responsabilidad que le otorgó el manager John Gibbons en un juego de vida o muerte al montar una gran labor desde la lomita en el Juego 5 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana al permitir que los Toronto Blue Jays aún mantengan esperanzas de llegar al Clásico de Otoño.
Por segunda vez en la postemporada el sonorense llegaba en un juego en el que la única opción era ganar y tras ser castigados con 14 carreras en el Juego 4, Estrada silenció a la batería de los Royals durante siete episodios en los que sólo permitió que dos hombres alcanzaran las almohadillas, uno por imparable y el otro por base por bolas, enfrentando sólo un bateador más por encima del mínimo ya que fue capaz de forzar para doble play en el cuarto rollo.
Estrada retiró a los primeros nueve enemigos --en los que se incluyeron cuatro ponches-- hasta que Alcides Escobar le conectó sencillo que no generó mayor peligro en el cuarto inning cuando obligó a Ben Zobrist a batear para doble play.
El diestro continuó con su magia desde la lomita de las responsabilidades cuando retiró a los siguientes 10 hombres que enfrentó hasta que otorgó una base por bolas a Lorenzo Cain en el inning de la suerte y que cerró con fly al izquierdo de Eric Hosmer.
Dado el control que mostraba, John Gibbons decidió dejarlo para el octavo rollo donde inició con ponche para Kendrys Morales y posteriormente un fly al central de Mike Moustakas para que después Salvador Pérez lo castigara con un cuadrangular y Alex Gordon con un hit al derecho para que salieran con la grúa.
Aaron Sánchez completaría el octavo capítulo y en la novena saltaría el también mexicano Roberto Osuna, quien sólo requirió de cinco lanzamientos para cerrar el triunfo de los Blue Jays 7-1 ante los Kansas City Royals.
Los números finales de Marco Estrada indicarían 7.2 innings, tres hits, una carrera limpia, una base por bola y cinco ponches.