Robin Hackett 12y

Manchester Utd, temporada 2012-13

LONDRES -- Se ha hecho muy fácil pasar por alto el hecho de que el Manchester United dejó pasar la oportunidad de capturar su vigésimo título de liga la temporada pasada por diferencia de goles. Al igual que en el 2009-10, cuando el Chelsea terminó primero por un solo punto, los eventuales campeones hicieron brillar su superioridad a través de la naturaleza a menudo enfática de sus victorias. El hecho de que la plantilla espléndidamente montada del Manchester City haya terminado en primer lugar sólo después del giro más dramático que se haya visto desde 1989, es un testimonio de la gestión notable y la espectacular mentalidad ganadora de Old Trafford.

A diferencia del Manchester City, el United ya se ha reforzado este verano, con el fichaje de Robin van Persie y Shinji Kagawa como un motivo justificado de optimismo. El delantero fue el goleador de la Premier en Arsenal, la campaña anterior. El mediocampista talentoso y creativo que desarrolló un gusto por la platería durante su estadía con el Borussia Dortmund podría convertirse en una fuerza importante en Old Trafford. Nick Powell, un joven centrocampista proveniente de Crewe, llega para continuar con la política de reconocer y desarrollar el potencial.

Sin embargo, existe la sensación de que hacen falta más fichajes. Eden Hazard y Lucas Moura han optado por otros destinos este verano, y, como Mesut Özil no fue fichado en el 2010 y Wesley Sneijder no fue fichado en el 2011, los fans tienen buenos motivos para creer que al Manchester United le falta influencia financiera. La adquisición de los Glazers se ha traducido en pérdidas estimadas de £550 millones a servicio de deuda en los últimos siete años y, a pesar del leal apoyo de Sir Alex Ferguson a los propietarios, las filas de verde y oro parecen estar creciendo nuevamente.

Los grupos de ayuda han reaccionado con ira ante la noticia de la salida a bolsa, que será utilizada como un intento de reducir la deuda, a pesar de que finalmente condujo a una admisión de retraso en los documentos oficiales presentados en la solicitud a la Bolsa de Nueva York: "Nuestra deuda podría afectar negativamente nuestra salud financiera y posición competitiva". El hecho de que la deuda haya agotado los fondos de transferencia es una fuente de gran frustración; el mensaje de que el equipo está buscando "valor" en el mercado se ha repetido sin cesar, pero un club que Forbes considera como el más valioso en el mundo de los deportes ahora parece tener grandes dificultades para competir en los fichajes de elite.

Sin embargo, Ferguson siempre ha mantenido que recibió todo el apoyo que ha solicitado en el mercado, y el club ciertamente estuvo decidido a poner la firma antes del cierre de la ventana de transferencias, tras haberse mostrado inusualmente público en la búsqueda de Robin van Persie. Este fichaje se destaca entre los movimientos recientes del club: en parte porque el United no ha pagado por un jugador de campo de más de 27 años desde Henning Berg en 1997, pero también porque muchos creen que otras áreas deberían ser la prioridad.

Ferguson ha indicado que él cree que los mediocampistas tackleadores convencionales son un anacronismo en el nivel de elite -- "Se trata de anticipación y de leer el juego", dijo recientemente -- pero el interés en Hazard y Lucas sugiere que le gustaría mejorar sus opciones creativas. Si bien Kagawa representa un logro importante en este aspecto, hay justificación para una mayor inversión en la zona del mediocampo central. El regreso de Paul Scholes de su retiro fue decisivo en la mejora del rendimiento durante la segunda mitad de la temporada pasada, pero, ya cerca de los 37 años, tendrá que ser manejado con cuidado. Ryan Giggs también se encuentra en el ocaso de su carrera. Tom Cleverley parece prometedor, pero, aunque Ferguson lo haya etiquetado como "probablemente el mejor jugador de medio campo de Gran Bretaña, potencialmente", aún no queda claro si estará a la altura de esta descripción. El hambre de Anderson parece demasiado literal. Michael Carrick, a falta de un verdadero volante de contención, ha tenido que limitar su reparto creativo por conveniencia.

La posición de lateral izquierdo, dado el deterioro del estado físico de Patrice Evra, también parece ser un área más evidente de carencia que la ofensiva. Incluso podría decirse que hace falta otro defensor central, dado que Rio Ferdinand, Nemanja Vidic, Jonny Evans y Chris Smalling han tenido problemas importantes de lesiones. Ferguson ha revelado que está considerando introducir a Carrick como cobertura si es necesario.

Hay mejoras por hacer, pero es muy fácil poner demasiado énfasis en la debilidad de la segunda parte de la primera temporada sin un trofeo importante desde el 2004-05. Se han planteado serios interrogantes sobre la gestión y los jugadores tras una campaña estéril, pero las dudas rápidamente dieron paso a una nueva era de dominio. Como Sir Alex Ferguson señaló en el 2010, cuando Wayne Rooney había intentado dejar el club: "Una vez tuve un jugador que me dijo que Rooney y Ronaldo no eran suficientemente buenos y él no estaba dispuesto a esperar a que lo fueran. Ese es el problema con el potencial. La gente no identifica el potencial. Le cuesta mucho. He identificado el potencial de los jóvenes durante toda mi vida. Yo conozco el potencial. Sé cómo desarrollarlo y le tengo fe, y los jóvenes te sorprenderán si les das la oportunidad. De eso se trata este club".

Los últimos fichajes del Manchester United han mostrado un énfasis en la juventud, y con eso viene la promesa de mejora. Aunque el Manchester City arrancará la nueva temporada como favorito, haría bien en recordar las lecciones de la temporada 2010-11, cuando el Chelsea se inclinó en barrer todo a su paso: el United, tras haber fichado solamente a Javier Hernández, Smalling y Bebe, terminó con nueve puntos de ventaja en la punta de la tabla y llegó a la final de la Liga de Campeones por tercera vez en cuatro años. En tiempos de adversidad, Sir Alex Ferguson prospera.

"Para nosotros sigue siendo un desafío y somos buenos con los desafíos", dijo después de que el título de la temporada pasada le fuera arrebatado. "Las buenas experiencias entusiasman a la gente, pero cuando tienes una mala, te da un sentido de determinación".

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