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Azarenka y Serena, a la gran final

NUEVA YORK -- La bielorrusa Victoria Azarenka, número uno del mundo, venció a la rusa Maria Sharapova, tercera favorita, en las semifinales del US Open por 3-6, 6-2 y 6-4 y definirá el cuarto y último Grand Slam del año con la estadounidense Serena Williams (4ª), que aplastó a la italiana Sara Errani (10ª) por 6-1 y 6-2 en la segunda semi.

La derecha de Sharapova se fue larga. También se iban más de dos horas y media de acción, de potentes impactos y fuertes gritos. Perpleja, como alguien que no lo podía creer, Azarenka soltó la raqueta y se tomó la cara. Segundos después, regaló una sonrisa. Ahí recién cayó y celebró el triunfo. Es que los últimos games fueron muy intensos, con incertidumbre hasta la última bola. Fue victoria para la bielorrusa, nomás, y pase a la final del US Open por primera vez en su carrera.

Para el triunfo, el sexto en diez enfrentamientos, la número uno del mundo tuvo que trabajar muchísimo. Siempre con el mismo guión bajo el brazo, ése de ir a fondo con sus golpes potentes y esquinados, Azarenka tuvo que dar vuelta la historia tras un primer set adverso en el que Sharapova, con un estilo de juego muy similar, tuvo mayor precisión y mejores decisiones en los momentos clave. Fue justo desde el inicio del segundo parcial en el que el duelo tuvo un giro notorio, en el que la N° 1 tomó el control absoluto y obligó a pegar fuere de eje a la rusa.

Ya con el partido equilibrado, el partido pasó a jugarse en el terreno de las emociones. Y allí fue donde terminó imponiéndose Azarenka, que no sufrió con su servicio en ningún momento de los 74 minutos que duró el set decisivo y aprovechó una de las cinco oportunidades que tuvo para quebrar. Sharapova, por su parte, poco a poco fue viendo cómo el match se le empezaba a ir de las manos. No golpeaba cómoda y, para colmo, erraba demasiado: en el tercer parcial hizo 18 de sus 42 errores no forzados. Muchos, y la terminaron ajusticiando.

Así, Azarenka terminó celebrando la victoria y el pase a la final de US Open, donde buscará su segundo título de Grand Slam de la temporada tras haber celebrado en el Australian Open. Por su parte, Sharapova se quedó con las ganas de volver al partido decisivo del Abierto de los Estados Unidos después de seis temporadas.

Azarenka, de 23 años, que se mete en la final del último torneo de Grand Slam de la temporada por primera vez en las siete participaciones que tuvo, acabó con la racha de Sharapova de haber ganado los 12 partidos que esta temporada disputó en tres sets (12-1).

Esta victoria le permitió a Azarenka ponerse con marca de 6-4 en los enfrentamientos contra Sharapova, de 25 años, que esta temporada consiguió coronarse en Roland Garros.

"Ha sido un partido increíble con Sharapova, que jugó un gran tenis y me tocó concentrarme al máximo para superar la pérdida del primer set", declaró Azarenka nada más concluir el partido. "La clave estuvo en la confianza y en ir a más con mis golpes", agregó.

En cuanto a su rival, Azarenka dijo que lo que estaba asegurado era un partido "emocionante", que los espectadores podrán disfrutar. "Tendrá toda la emoción de la final y mi intención será conseguir la victoria en la primera que disputo en el Abierto", declaró Azarenka, con vistas a la definición del sábado por la noche.

La bielorrusa jugará por 11ª vez contra la menor de las Williams y las estadísticas no pueden ser más desalentadoras para Azarenka, que perdió nueve de los diez partidos anteriores, incluidas las semifinales de Wimbledon y la de los Juegos Olímpicos de Londres de este año.

Serena cumplió con lo prometido de jugar al 200% y no le dio ninguna opción a Errani, de 25 años, la primera tenista italiana que alcanzó las semifinales del Abierto de Estados Unidos tras ser esta temporada finalista en Roland Garros.

El encuentro, que duró una hora y cuatro minutos, no tuvo más historia que ver cómo Williams siguió sin perder un solo set en lo que va del torneo, su 13º Abierto, y va lanzada a por lo que será el cuarto título en el último Grand Slam de la temporada, que ya ganó en 1999, 2002 y el 2008.

Williams, aunque llegó como la cuarta favorita, por su tenis dejó en claro que es la mejor del momento. Con 30 años, consiguió el cuarto triunfo en los mismos enfrentamientos ante Errani y llega a la 19ª final de un torneo de Grand Slam, donde buscará su 15º título en un 'Major'.

"Sabía que si tenía intensidad y confianza en mi tenis lo haría mejor que en partidos anteriores para asegurarme estar de nuevo en la final, que me hace una ilusión enorme, después de haber perdido el año pasado el título", declaró Williams. "Jugar en Nueva York siempre es algo especial y ahora soy feliz".

Las estadísticas dejaron a Williams con nueve aces por ninguno de Errani, consiguió 38 golpes ganadores y cometió 21 errores no forzados, comparados a los 6 y 9, respectivamente, de la italiana.

Los números reflejaron con total exactitud el dominio y la motivación que Williams tuvo durante todo el partido, al que calificó de "importante" porque le permitía disputar la final con la que siempre sueña al comienzo de cada temporada.

"Es el sueño que tengo al inicio de cada año, el estar en la gran final del Abierto y me siento muy ilusionada de haberlo conseguido", destacó Williams.

Williams destacó el talento de Azarenka, su rival en la final, pero dijo que estaba en Estados Unidos y el Abierto era algo muy especial para ella en un año en el que ha sido campeona olímpica. "Es nuestro gran año olímpico y tenemos que celebrarlo con otro gran triunfo en Nueva York. Soy feliz", expresó.

Errani, que tiene la compensación de jugar el domingo la final de dobles femeninos con su compatriota Roberta Vinci, su gran mérito ante Williams fue salvar una pelota de partido y permitir a los pocos espectadores que se habían quedado en las gradas del Arthur Ashe Stadium disfrutar de un juego más, no de buen tenis.