Ezequiel Morales 11y

Futuro Argentino = Lucas Noguera

BUENOS AIRES -- Cuando las grandes figuras del deporte de la ovalada emprenden la senda del retiro, luego de consumarse -o no- los objetivos que se pusieron a lo largo de su carrera, es el momento en el que los más jóvenes dejan de mirar hacia arriba y ya no siguen sus pasos. Son los tiempos de la consolidación y de los grandes retos, de tomar las riendas. Pero para que eso suceda hay un camino que se debe seguir desde joven.

En eso anda Lucas Noguera Paz, un pilar de 19 años que vive en el barrio Valle Rincón del Este, de la ciudad tucumana de Alderetes. El forward ya tuvo la oportunidad de integrar los seleccionados nacionales de la M18 y M19, además de calzarse la camiseta de su provincia.

"Empecé a los cinco años, mi papá me llevaba al club y allí ya jugaba desde muy chico porque era algo que desde el primer momento me gustó mucho", cuenta Lucas. Su papá es Esteban Noguera, quien fuera entrenador del club y que siguió con su camada hasta que cumplieron 14 años. Por ese tiempo no estaba metido entre la primera línea sino que asistía desde atrás, con la 8 en la espalda.

El cambio de posición no fue sencillo. Pasó de estar en un puesto en el que intervenía más tiempo en las jugadas y en el recorrido de la pelota, a otro en el que debía batallar a cada momento y perder la referencia de la guinda. "Al principio fue feo. Uno estaba acostumbrado a un juego porque tocaba millones de pelotas por partido, y de repente pasé a preguntarme ¿donde estoy?", recuerda desde el otro lado de la línea. "Pero con el tiempo le vas a sacando el juguito. Esas mañas, esas maneras de jugar, fueron las que después me hicieron darme cuenta de que la decisión había sido la correcta", sostiene en el mano a mano con Scrum.

Los resultados deportivos avalan su postura: a mediados del año pasado, con sólo 18, fue titular en un partido de la primera división ante Universitario, enfrentando en el scrum a rivales que promediaban los 10 años de experiencia en la categoría.

-¿No tuviste miedo?
-No, porque me sentí muy cómodo e iba mentalizado de todas las cosas que uno aprende de chico en cuanto a formaciones como el scrum: la altura que debe tener el pack para que esté bien armado y tener la cabeza en el pecho del rival. Lo que sentía era una presión impresionante, pero no solamente del otro equipo, sino también de mis compañeros. Claro que hay que tener cuidados, pero eso va de la mano con la técnica.

-¿El estilo de juego de Lince favorece eso?
- Acá se utiliza mucho a los forwards. Nos basamos bastante en lo que puedan llegar a hacer los pilares. Esta manera de aprender el rugby que tenemos te termina puliendo y formándote como jugador adentro de la cancha. Es un poco la cocina de todo, el ABC del rugby.

Sueña que su carrera deportiva lo lleve a jugar con la camiseta de algún club francés, por encima de la Premiership u otro certamen del Viejo Continente. "Es que me atrae mucho Francia como país", explica. Y una posible antesala de eso será el Mundial Juvenil que se jugará allí este año. Su meta es estar en esa lista.

Y para meterse de a poco en eso, cada vez que Los Pumas se acercan a Tucumán aprovecha para no perderse todos los detalles. Como cuando uno de los choques por la ventana de junio se jugó en el José Fierro, el estadio de Atlético, ante Francia. Fue caída para el equipo de Santiago Phelan, pero la impresión en vivo y en directo, y los movimientos en cancha llenaron sus ojos. Y el resto de las veces en las que no pudo estar, se prendió a la televisión para seguir todo.

-Es muy obvio a quien admiro en mi puesto...

-¿A quién?
- Rorro, a full. Sería un gusto enorme conocerlo. Además no solo por la función en la cancha, sino que los dos estudiamos medicina. El ya está recibido, yo estoy en segundo año de la Universidad Nacional de Tucumán y le voy a seguir dando para adelante. Lo que pasa es que mi mamá es médica, de manera que entre el deporte y lo que estoy siguiendo dejo contentos a mis papás.

-¿Cómo repartís tu tiempo con tus obligaciones?
-Lo que pasa es que en los primeros años de la carrera no tenés que leer, aparte siempre me gustó. Salvar vidas y jugar al rugby son dos pasiones diferentes. La complicación va a ser desde el año próximo, cuando nos den una cantidad impresionante de material de lectura van a venir los problemas.

-¿Y qué vas a optar?
- Si me decís ahora, con todo el tema del Mundial de Rugby, si me voy al mundial o me quedo aprobando las materias, ya lo tengo decidido. ¡Cierro los ojos y me voy al mundial!


FICHA:

Fecha de Nacimiento: 5 de octubre de 1993.

Inicio en el rugby: a los cinco años, cuando lo llevó su papá Esteban.

Puesto: Pilar. Hasta la M17 fue octavo.

Categoría en 2013: Juega en la Primera y la Intermedia, contra rivales que promedian los 25 años o más.

Debut en Primera: Agosto de 2012.

Plantel UAR: M20.

Espejo Puma: Rodrigo Roncero.

Espejo en Lince Rugby Club: Juan Avila, pilar de la Primera División.

La Familia y el Rugby: "Mi mamá es fanática número uno. Además tengo dos hermanas más pequeñas.

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