"Vamos a ser los primeros en llegar y los últimos en irnos", aseguró Mario Zagallo, técnico de la selección de Brasil, en la previa al Mundial. Y no se equivocó.
Brasil conquistó de punta a punta el tercer Mundial de su historia. Pelé, tras la frustración de Inglaterra '66, apareció en todo su dimensión, acompañado por Rivelinho, Gerson, Tostao y Jairzinho. Sí, una delantera imparable.
Brasil ganó todos los partidos que jugó, y llegó a la final como amplio favorito. Tarcisio Burgnich, defensor italiano, resumió al conjunto de Zagallo. "Jugaron un fútbol de otro planeta. Era imposible ganarles".
Así fue, y tanto Uruguay como Perú, de muy buenas actuaciones, lo sufrieron. Los peruanos, dirigidos por el brasileño Didí, dieron muestras de muy buen fútbol de la mano de Chumpitaz, el patrón de la defensa, y Cubillas y compañía adelante, pero fueron eliminados por la verdemarelha en cuartos. Los charrúas, en tanto, cayeron con Brasil en semis.