BLOEMFONTEIN -- El árbitro uruguayo Jorge Larrionda cometió uno de esos errores que quedarán en la leyenda de las copas mundiales el domingo al no convalidar un gol de Inglaterra ante Alemania, en una jugada en la que la pelota pegó en el travesaño y picó claramente adentro del arco.
Con el marcador 2-1 a favor de Alemania, Frank Lampard sacó un disparo desde el borde del área que pasó por encima del arquero Manuel Neuer. La pelota dio en el travesaño, picó y volvió al terreno de juego.
En esta época de repeticiones instantáneas por televisión desde distintos ángulos, resultó evidente que el juez de línea uruguayo Mauricio Espinosa cometió un error garrafal al no levantar la bandera cuando un remate del inglés Frank Lampard ante Alemania dio en el travesaño y la pelota picó adentro. Hubiera colocado el marcador 2-2, un minuto después de que Inglaterra descontase tras quedar 2-0 abajo, y seguramente le hubiera dado otro rumbo al partido.
La bandera de Espinosa, sin embargo, se quedó abajo y el árbitro Jorge Larrionda, también uruguayo, hizo seguir el juego, ante el desconcierto de los ingleses.
Concluido el primer tiempo, Wayne Rooney y David Beckham, quien acompaña al cuerpo técnico de Inglaterra, se dirigieron hacia Espinosa y le recriminaron porque no levantó la bandera.
Al final Alemania ganó 4-1 tras anotar otros dos goles de contragolpe en el complemento, aprovechando el adelantamiento inglés en busca del empate. Pero los ingleses dirán que el error de los conductores del partido selló su suerte, ya que Inglaterra parecía estar reaccionando luego de ceder dos goles y después de ese incidente el equipo se desinfló.
Es una de esas fallas de proporciones épicas, de la que se hablará por mucho tiempo y que marcará un capítulo especial en la historia de las legendarias confrontaciones entre ingleses y alemanes.
Para los alemanes, el episodio tuvo sabor a revancha.
En la final de 1966, con el partido entre ingleses y alemanes empatado 2-2 en un alargue, un disparo del inglés Geoff Hurst dio en el travesaño y picó en la raya. Tras consultar con el juez de línea, el árbitro señaló un gol que en realidad no había sido.
Inglaterra terminó ganando 4-2 ese encuentro, con otro gol de Hurst. Pero los alemanes siempre se quejaron de que el gol que no fue les costó el partido.
FIFA SE REHUSA A COMENTAR
La FIFA rehusó comentar el domingo sobre un error de los árbitros que le negó a Inglaterra un gol en su derrota 4-1 ante Alemania por los octavos de final de la Copa del Mundo.
La FIFA dijo en un comunicado que "no hará ningún comentario sobre las decisiones del árbitro en el partido".
Agregó que el organismo que fija las reglas del fútbol acordó en marzo no continuar los experimentos con la tecnología que le permitiría a los árbitros saber si una pelota cruzó la raya de gol.
BECKENBAUER: "FUE UN GOL CLARO"
El mítico ex jugador
alemán Franz Beckenbauer admitió que el gol anulado a
Inglaterra en los octavos de final del Mundial debió haber subido
al marcador.
"El juez de línea tiene que verlo. Fue un gol claro", criticó
en declaraciones a la agencia DPA.
En el minuto 38, cuando Inglaterra perdía por 2-1, Frank
Lampard lanzó un disparo que se estrelló en el travesaño, rebotó
adentro del arco y volvió a salir. El juez, el uruguayo Jorge
Larrionda, no permitió que el gol subiera al marcador, aunque en
las repeticiones se observa claramente que la pelota entró en el
arco.
La situación recordó de inmediato a la final del Mundial de
Inglaterra en 1966 disputada en el estadio de Wembley. Un gol
similar de los locales en la prórroga supuso el 3-2 contra los
alemanes, que terminarían por perder el partido y el Mundial por
4-2.
"Kaiser", que jugó la final de 1966, destacó también el
juego de Alemania, que finalmente se impuso por 4-1. "Nuestro
equipo fue simplemente mejor, superó a los ingleses en todas las
áreas. Lo que Jogi Löw ha formado se deja ver ahora", alabó al
seleccionador Joachim Löw.