ORLANDO -- Manny Ramírez está dispuesto a colaborar para facilitar su salida de los Medias Rojas de Boston en caso de que el equipo haya llegado decidido cortar relaciones con el jardinero dominicano.
"Si los Medias Rojas son mejores sin Manny Ramírez, entonces que hagan un cambio y lo aprobaré sin problemas", dijo Ramírez por teléfono a ESPNdeportes.com el domingo.
"No tengo preferencia, puede ser a un equipo que me convenga, que esté en pelea. No me importa donde sea, puedo jugar hasta en Irak, mi trabajo es jugar pelota", agregó Ramírez.
Ramírez, quien batea .298 con 16 jonrones y 63 carreras empujadas esta temporada, regresó a la alineación de los Medias Rojas el sábado luego de perderse dos encuentros por dolores en la rodilla derecha.
El manager, Terry Francona, y la gerencia de los Medias Rojas conversaron con el quisqueyano después que los resultados de las pruebas a ambas rodillas del pelotero, el viernes, no revelaron lesiones.
Algunos medios de Boston reportaron que el equipo planeaba medidas disciplinarias en caso de que Ramírez no regresara a la alineación para los últimos partidos de la serie contra los Yankees.
También se sugirió todo el fin de semana la posibilidad de que la gerencia de los Medias
Rojas contemple la idea de cambiar al pelotero antes de la fecha límite del jueves.
El dueño de los Medias Rojas, John Henry, respondió en un correo electrónico enviado a The Associated Press que "estamos concentrados en una sola cosa: un lugar en la postemporada".
En otro correo electrónico, el manager general Theo Epstein afirmó: "Nuestra atención está en este equipo, que está a la mitad de la contienda entre los líderes de la liga y, en cualquier caso, sería prematuro hacer comentarios sobre un asunto contractual fuera de la temporada".
Ramírez, de 36 años, juega la última temporada del contrato de 168 millones de dólares por ocho años que firmó con Boston en diciembre del 2000. El club conserva dos opciones de 20 millones cada una.
Los Medias Rojas tienen hasta el 9 de noviembre para decidir si mantienen para el próximo año el contrato de 20 millones de dólares anuales con Ramírez, quien tendría que aprobar cualquier transferencia en su condición de veterano con 10 años y cinco con el mismo equipo. Boston tiene una opción similar para el 2010. Ramírez se encuentra en el último año garantizado de su contrato de ocho años por 160 millones de dólares.
"Si pueden conseguir un cambio, lo aprobaría. Si no me pueden cambiar, entonces simplemente deben informarme al final de la temporada que no ejecutarán las opciones y cada cual sigue su camino", dijo Ramírez, quien debe aprobar cualquier cambio a otro conjunto por su condición 10-5 (10 años en Grandes Ligas y los últimos 5 con el mismo equipo).
"No quiero ser un problema y una distracción para los Medias Rojas en una parte tan importante de la temporada. Quiero ayudar al equipo, incluso facilitando mi salida", dijo Ramírez.
Sobre las molestias en su rodilla, Ramírez dijo que piensa que es tendonitis y rechazó de plano el inventar lesiones para enviar mensajes a la gerencia.
"Soy un pelotero con más de 500 jonrones y casi dos mil carreras empujadas, soy un profesional. No sé cómo alguien puede alegar que invento mis dolores", dijo Ramírez, quien batea .312 con 509 jonrones y 1,667 impulsadas en 16 temporadas.
El jugador está convencido de que todo el alboroto alrededor de su lesión y situación contractual es parte de una campaña de los Medias Rojas para justificar otras situaciones y de paso retratarlo como "el malo de la película".
"Los Yankees se están acercando y se están armando, mientras que nosotros no hemos realizado muchos movimientos", dijo Ramírez.
"Podría decir que ahora mismo hay una atmósfera rara en el equipo", agregó.'
Información de Associated Press fue utilizada en esta historia.