PANAMÁ (Notimex).- El cerrador de los Yanquis de Nueva
York, Mariano Rivera, ha pasado de héroe a villano en su natal Panamá
por su negativa a jugar con la selección local en el Clásico Mundial
de marzo próximo, en un país donde el beisbol es el deporte nacional.
La noticia era uno de los comentarios obligados de
los panameños que lanzaron duras recriminaciones contra el estelar
taponero, considerado uno de los mejores en la historia de las
Grandes Ligas, tras confirmarse su marginación del equipo canalero.
El malestar de la afición contra Rivera se sentía en programas
deportivos en la radio y foros de Internet donde los fanáticos
cuestionaron su decisión de rechazar vestir por primera vez el
uniforme panameño en un torneo internacional.
Los fuertes reproches contra el lanzador, oriundo de la
empobrecida comunidad pesquera de Puerto Caimito, 40 kilómetros al
oeste de la capital, contrastaron con los momentos de gloria que
vivió el diestro entre sus compatriotas.
Rivera se había convertido en el nuevo ídolo deportivo de los
panameños ante el ocaso de figuras como el legendario púgil Roberto
"Manos de Piedra" Durán, alimentado por sus hazañas con el equipo más
popular del beisbol mundial.
Esos momentos quedaron en el olvido este martes cuando la
afición y la prensa deportiva exteriorizó su desilusión hacia el
"apagafuegos" de los Yanquis.
Después de varias semanas de especulaciones sobre su presencia
con Panamá en el Clásico Mundial, Rivera confirmó al mánager del
equipo, Roberto Kelly, su negativa de disputar el torneo que reunirá
a las 16 principales selecciones del beisbol internacional.
Su rechazo causó mayor malestar tras supuestamente alegar que
declinaba porque Panamá carecía del "nivel necesario" para enfrentar
a las otras novenas que jugarán en la competencia. Los canaleros
están ubicados en el Grupo C con Cuba, Puerto Rico y Holanda.
Kelly dijo que conversó vía telefónica con Rivera, quien negó
haber cuestionado la calidad del equipo panameño que integrarán otros
peloteros de Grandes Ligas como el jardinero Carlos Lee (Cerveceros
de Milwaukee) y el lanzador Bruce Chen (Orioles de Baltimore).
El periodista Rodolfo Newland, jefe de deportes del diario El
Siglo, llamó al cerrador a reflexionar sobre su postura que consideró
raya en la "soberbia".
"Vemos que su estatura como lanzador ha subido, siendo
calificado con justa razón el mejor cerrador de Grandes Ligas, pero
también reconocemos que se ha achicado en el aspecto humano", opinó
el cronista deportivo en una columna.
Las recriminaciones a Rivera aumentaron cuando el presidente de
la Federación Panameña de Beisbol (Fepabe), Franz Wever, reveló la
supuesta declaración del tirador sobre el nivel de juego de la novena
local de cara al Clásico Mundial.
"Si él no se siente suficientemente panameño como otros que ya
han confirmado su participación, que el pueblo que lo vio nacer lo
juzgue", expresó Wever a una radio local la semana pasada, aunque
luego Rivera desmintió la versión.
La participación del taponero de los Yanquis estaba en duda
desde diciembre pasado cuando se ausentó de una ceremonia en la que
otros jugadores de la "gran carpa" firmaron un convenio para disputar
el torneo con Panamá.
La Fepabe incluso inscribió a Rivera en una nómina preliminar de
56 peloteros que entregó la semana pasada a la oficina de las Grandes
Ligas con miras al Clásico.
Junto a la baja del lanzador se suma la del fuerte toletero
Olmedo Sáenz (Dodgers de Los Angeles), quien se negó a jugar por
diferencias personales con la directiva de la Fepabe que preside
Wever.
El equipo panameño inició este martes su cuarta semana de
entrenamientos con la presencia de grandes ligas como Lee, Chen y el
receptor Einar Díaz (Indios de Cleveland).
También deben reportarse en las próximas semanas el jugador de
cuadro José Macías (Cachorros de Chicago), el máscara Julio Mosquera
(Milwaukee) y el tirador derecho Ramiro Mendoza (Yanquis).
Los ligamayoristas se reportarán cuando Panamá instale un campo
de entrenamientos en Florida a partir del 3 de marzo donde disputarán
un fogueo contra los Nacionales de Washington antes de trasladarse a
Puerto Rico para el arranque del Clásico Mundial.
Panamá fue ubicada en el Grupo C de la primera ronda con sede en
Puerto Rico contra el que debutará el 7 de marzo.
Los otros grupos del torneo los forman Japón, Corea del Sur,
China y Taiwán en el A. Estados Unidos, Canadá, México y Sudáfrica
jugarán en el B, mientras República Dominicana, Venezuela, Italia y
Australia fueron ubicados en el D.
De cada llave avanzarán dos equipos a la siguiente ronda con
sede en Puerto Rico y Anaheim, California, entre el 12 y 15 de marzo.
Las semifinales y la serie por el título tendrán como escenario la
ciudad de San Diego del día 18 al 20.