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Cuatro uruguayos en el Superclásico

BUENOS AIRES -- El River-Boca del próximo domingo tendrá entre sus protagonistas a cuatro futbolistas extranjeros, todos ellos uruguayos y los cuatro, debutantes en el clásico mayor del fútbol argentino: Carlos Sánchez y Rodrigo Mora en River, Emiliano Albín y Santiago Silva en Boca.

La historia de los uruguayos en el superclásico del fútbol argentino incluye nombres imborrables, legendarios, como los de Walter Gómez y Enzo Francescoli, Severino Varela y Sergio Martínez en Boca, sólo por citar algunos destacados entre muchos otros.

Hay tres uruguayos que lo jugaron con las dos camisetas: Iseo Fausto Rosello en los años cincuenta y mucho más tarde, Rubén Da Silva y Néstor Gabriel Cedrés ya en la década de los noventa.

Rosello, interior izquierdo cerebral y lento, conductor ofensivo del Boca campeón de 1954, jugó con la de Boca tres veces ante River, con un triunfo y dos derrotas entre 1954 y 1955. Participó de un recordado 4-0 en cancha de Racing, en 1955. Con River, su único superclásico significó un duro 1-5, en La Bombonera, en 1959.

El Polillita Da Silva jugó por River, entre 1989 y 1993, nueve superclásicos (dos ganados, dos empatados y cinco perdidos con un gol). Por Boca jugó cinco (dos, dos y uno también con un gol), en 1993/95.

Cedrés, que cuenta con la curiosidad difícil de repetir de haberse entrenado una mañana en River y por la noche debutar en Boca, estuvo en River en 1994/96 con cinco superclásicos (2-2-1) y después jugó por Boca en 1996/97 con dos superclásicos (1-1-0).

Por Boca marcó dos goles: uno de penal en el recordado 3-2 definido sobre la hora con "nucazo" de Hugo Guerra, en el Apertura 1996 y otro en el no menos recordado 3-3 del Clausura 1997, cuando River remontó una desventaja de tres goles.

Otros tres uruguayos jugaron con las dos camisetas: el delantero Anempodisto García, de River en 1907/9 y de Boca en 1911, no estuvo en ningún superclásico como así tampoco el arquero Luis Solans, de River en 1909/10 y de Boca en 1916.

Una leyenda de la época amateur, el puntero derecho Zoilo Canavery, que pese a su nacionalidad llegó a integrar el seleccionado argentino, jugó un solo partido por River, en 1913 pero no contra Boca. En Boca estuvo en 1919/20 y participó de un superclásico, empatado, partido correspondiente al campeonato de 1919 que después se anuló el producirse la segunda escisión institucional del fútbol argentino.

Canavery cumplió los ciclos más destacados de su larga campaña en Racing (1914/17) y en Independiente (1912, 1918 y 1921/28), con lo cual integró cuatro de los cinco tradicionales grandes argentinos y fue campeón en tres de ellos. La excepción, River.

Los primeros uruguayos en participar de un Boca-River fueron el back central José Benincasa y el delantero Armando Artigas, integrantes de Boca en la derrota por 2 a 1 del 10 de diciembre de 1916, en la vieja cancha de madera de Racing.

El primer uruguayo que jugó por River ante Boca fue "El Mulero" Pedro Lago, delantero así apodado por sus artimañas. Estuvo en el histórico primer cruce del ciclo profesional, el 20 de setiembre de 1931 en la cancha de madera de Boca. Ganaba River 1-0 con gol de Carlos Peucelle, hubo un penal para Boca, ejecutó Francisco Varallo, rechazó Jorge Iribarren, insistió Varallo, tornó a rechazar Iribarren y convirtió en tercera instancia Varallo. Los jugadores de River reclamaron foul y llegaron a agredir al árbitro Enrique Escola, quien expulsó a Lago junto con José Belvidares y Camilo Bonelli. River se retiró de la cancha y posteriormente se le dio por ganado el partido a Boca.