BUENOS AIRES -- Llueve torrencialmente, son las once de la mañana de este lunes terrible. Asfixiante, húmedo, ruidoso. En la esquina dos personas hablan a los gritos y no porque estén discutiendo o peleando, sino porque el ruido de la ciudad cada vez es mas ruidosa. Hasta las sirenas han aumentado su volumen para hacerse oír. El dólar blue ha bajado a casi cinco pesos y medio.
Estoy muy enojado con un ídolo boquense que puede terminar jugando en Tigre, eso dicen los diarios en internet y me cae muy, pero muy mal. Por suerte, los dos hombres de la esquina hablan de otra cosa.
-- No soporto a Ramón Díaz porque es tremendamente... dice uno, justo en el momento que en la calle de enfrente estaciona un gran camión y no me permite oír el final de la frase. La charla de los dos hombres cesó de golpe y comenzó cuando el ruido se fue.
-- Te decía que no soporto a Ramón Díaz porque es tremendamente ganador y creo que exageró con ese gesto.
-- ¿Eh? ¿No te entiendo? Toda la vida fuiste de River... -le dice el otro y continúa-, atraviesan el peor momento de la historia, se fueron a la B y ahora no querés a un técnico que gane todo. ¡No te entiendo!
-- Sí, querido, cuando las pretensiones son enormes por lo general se dan los resultados deformes. Mi equipo tiene que ir de a poco, no podemos ser el Milan en tres meses.
Me acerqué al semáforo y escuché un poco más. Ahí descubrí el nombre de uno de los caballeros.
-- ¡Eusebio Anacleto Frondizi, pará un poco!, le gritó uno al otro. Si hace diez años que no juegan a nada, no ganan una copa ni un campeonato y encima se fueron a la B. Lo peor de todo es que hoy juegan peor que el año pasado.
-- Sí, pero no me gusta la actitud compradora de Ramón Díaz, populista, para la tribuna.
-- No digas, eso, che, Eusebio, ubícate, Ramón tiene una mentalidad ganadora, como en Europa.
-- Lo que tienen en Europa es educación y plata. Resulta que ahora viene él y salimos campeones del Mundo. ¡No me hinchés, Elton Jhon Carmona, por favor! Y encima me lo decís vos que sos un hincha de Boca y tus viejos te pusieron ese nombre cuando el cantante británico fue a hacer un recital a la Boca y tu vieja embarazada se enamoró de él, que no parece muy hombre...
-- No seas como Chilavert, homofóbico. No discrimines por la tendencia sexual de cada uno.
-- Como hincha de River, te lo digo, Ramón Díaz es irresistible, pero es un megalómano farsante que nos quiere hacer creer a los riverplanteses que va a armar un Mercedes con este Gordini...
-- Te ponés filosófico, Eusebio Anacleto Frondizi...
-- Te cuento más para tu información. Cualquiera se da cuenta que nuestro Riquelme es Ramón Díaz. Nos va a volver locos, en marzo va a pedir refuerzos, que no se los darán, terminará peleándose con Passarella y se irá dando un portazo con River más confundido que ahora.
-- Es duro lo que decís, ¿tan apocalíptica ves la mano, Eusebio Anacleto?
-- Sí, Ramón Díaz es el técnico mas ganador, es un ídolo irresistible, pero en los ídolos no hay que confiar. Te hunden, yo sé lo que te digo. River tiene muchos ídolos que tiran para atrás. El ídolo es un ser especial, que funciona por sus propias leyes sin importarle nada.
-- ¿Vos jamás pondrías un ídolo como director técnico? Según tu óptica, los ídolos fuera de la cancha que vayan al sillón de su casa a ver partidos.
-- Sin duda, el fútbol argentino tiene que reflexionar sobre los ídolos extemporáneos, aquellos que ya no juegan y continúan siendo ídolos y comienzan a hacer macanas. Esto también te lo digo para vos, que sos hincha de Boca, Elton Jhon Carmona.
-- ¡Tenés razón, amigo, a los ídolos siempre es mejor tenerlos lejos!