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Alund y esa sensación de ser Top 100

Copa Claro/Sergio Llamera

BUENOS AIRES -- Aunque algunos disimulen bastante la dificultad de conseguir este reto, ser Top 100 es uno de los logros más trascendentes en la carrera de cualquiera que pasa más horas arriba de aviones, trenes y micros con un raquetero encima, que en su propia casa.

Desde el lunes, el argentino Martín Alund llegó. "Tengo 27 años, un montón de profesionalismo encima, muchas horas de tenis trabajadas. Llegar a las dos cifras es muy sacrificado, el primer gran objetivo de cualquier tenista. No es para nada sencillo. Algunos pueden ver que Del Potro lo había hecho de muy joven y fácil, pero me incluyo en el resto de los jugadores que luchamos a full y cuando no se nos da, seguimos y seguimos... Es una alegría enorme", le cuenta, con un característico acento cuyano, a ESPNtenis.com.

Para él, aparecer con apenas dos cifras delante de su apellido parece ser mucho más significativo que el hecho de hacer semifinales en San Pablo, incluida la victoria ante el francés Jeremy Chardy y la derrota ante Nadal, situación que, según confiesa, "no me hubiera imaginado ni voy a olvidar".

Para este mendocino acostumbrado al circuito Challenger, pero que nunca se despidió de los Futures e incluso de la Bundesliga, "mi sustento, mi sponsor que hizo posible que pueda jugar en Europa", estar adentro de los 100 no es un dato más: "Jugué un montón de Futures porque no sabía cómo iba a terminar... (se corrige) a seguir mi carrera. No estaba pasando por un buen momento. Lo necesitaba. Me sirvió un montón por puntos y confianza. Nadie se avergüenza de jugarlos".

Familiero, sencillo y de muy bajo perfil, hizo tiempo para hacer referencia a Francisco Bahamonde, también mendocino, y el argentino más joven en sumar puntos ATP desde que se implementó la computadora en 1973: "Tiene un futuro muy prometedor. Siempre trato de aconsejarlo en lo que puedo y darle una mano. Es una gran persona y su familia es de 10. Cuando estoy en Mendoza entreno con él. Me hace bien. Le deseo lo mejor".

Desde fines de 2011, Alund trabaja con Fabián Blengino, el mismo que supo entrenar a Guillermo Coria y Agustín Calleri, entre otros, y hoy conforma un equipo capaz de trabajar con varios jugadores, en donde hoy él y el bahiense Guido Pella son los que más lucen.

Los tres viajarán juntos en busca de un lugar en los cuadros principales de Indian Wells y de Miami: "Cambié muchos aspectos tenísticos y tácticos con Fabián. Le estoy muy agradecido porque me ayudó un montón. Es una de las personas que más sabe de tenis en la Argentina. Y poder viajar los tres juntos cambia para bien. Es una ayuda durante los partidos y también en la semana. Ayuda a mejorar cuando no se está en competencia".

Hoy el día a día del surgido en Andino Tenis Club se modificó. De mantenerse entre los 100 de arriba podrá jugar los torneos del Grand Slam. Sin ir más lejos, luego de la gira estadounidense podrá disputar al menos tres torneos ATP sobre polvo en abril. Al igual que su coequiper, de no irse contento, volvería a jugar Challengers. Sin embargo, y después de mucho tiempo, aun no tiene decidido jugar Interclubes. Su foco hoy es otro. Su vida cambió.