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 Los Juegos Olímpicos son la máxima cita del deporte mundial a la que un atleta puede aspirar. Muchos solo sueñan con participar, otros en poder colgarse una medalla para quedar en la historia, pero solo está reservado para unos pocos compartirlo con un hermano o hermana y este último anhelo, lo cumplirán varios argentinos en Tokio 2020.
El Gaucho Martín Fierro sostiene en uno de los pasajes de la extraordinaria obra literaria de José Hernández de 1872: "Los hermanos sean unidos porque ésa es la ley primera. Tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos se pelean, los devoran los de afuera". Un hermano es el primer amigo que uno tiene en la vida con el que suele compartir incalculables momentos, tanto de los buenos como de los malos. Es un lazo que muchos atesoran y otros desprecian, unido por la sangre. Los hermanos más chicos, generalmente, tienen al más grande como guía y lo copian en todo lo que hacen, por esto también es que terminan teniendo las mismas pasiones, aunque no así los gustos. Todos los casos que detallaremos a continuación son sin dudas la de hermanos y hermanas que comparten pasiones y que serán unos privilegiados de poder estar codo a codo en un Juego Olímpico representando al país.  En el handball, más precisamente con Los Gladiadores, tenemos la particularidad de que no solo están los tres Simonet, Sebastián (35), Diego (31) y Pablo (29), sino que también están los Pizarro, Federico (34) e Ignacio (31). Es en la única disciplina que hay más de un par de hermanos en el mismo equipo en la delegación argentina. Estos serán los terceros Juegos Olímpicos para la Selección de handball y, posiblemente, los últimos de Federico y Sebastián (se retira). Si bien los Simonet ya han compartido JJOO anteriores, esta será la primera y última vez que lo hagan los tres juntos (Pablo era muy chico en Londres 2012 y en Río 2016 Diego no participó por lesión). Podemos esperar un momento muy emotivo cuando finalice el último encuentro de Los Gladiadores en Tokio. En la selección argentina femenina de hockey sobre césped, Las Leonas, están María José (26) y Victoria Granatto (30). Aunque 'Majo' ya estuvo en Río 2016, compartirá Tokio con su hermana mayor en busca de una ansiada medalla. Siempre vale recordar el momento en el que 'Majo' mandó al frente a 'Vicky' en ESPN Hockey al contar cuando entró con su credencial a la ceremonia de clausura en Rio.  En tanto, Melisa (36) y Federico (33) Gil nuevamente van a compartir una cita olímpica: ya lo hicieron en Río 2016, en la modalidad de skeet de tiro. En dicha ocasión Federico finalizó en el puesto 27 de la tabla de posiciones, mientras que su hermana mayor fue diploma olímpico al quedar en la octava posición. Restan dos parejas de hermanos, que tienen la peculiaridad de que no comparten la disciplina en la van a competir, pero sí están relacionadas.  Fernanda (30) y Federico Pereyra (33) comparten la pasión por el voley desde muy chicos. Ambos podrán compartir por primera vez, y quizás única, los Juegos Olímpicos. Fernanda estará junto a Ana Gallay en beach voley femenino, mientras que Federico lo hará en el equipo masculino de voley que intentará repetir la actuación en Río 2016 (primeros en su zona con triunfos históricos, pero cayeron en cuartos de final ante Brasil, que a la postre sería campeón).
Finalmente llegamos a las hermanas Cecilia (36) y Romina Biagioli (32). Competir en un JJOO no es una novedad para Cecilia, que tendrá su quinto con Tokio 2020: Sydney 2000, Atenas 2004, Beijing 2008 y Londres 2012 (no participó en Río 2016 porque fue mamá de Joaquín en 2013 y decidió estar junto a su familia). Los primeros tres fueron en pileta, mientras que en 2012 y los que comenzarán en días, en aguas abiertas. Probablemente sean la última vez que Cecilia participe como atleta en la máxima cita del deporte mundial (en Sydney 2000 era la más joven de la delegación con 15 años) y será la primera vez que lo haga Romina (triatlón). Ambas competirán bajo la atenta mirada de su hermano Claudio, entrenador de aguas abiertas, por lo que los tres hermanos vivirán un momento único en Tokio 2020. Los JJ.OO. pueden tener muchos y distintos significados para cada persona. Pero muchos coincidirán en que representan la hermandad en el mundo, la unión a través del deporte, atletas que han luchado y familias que se han sacrificado por muchos años para alcanzar objetivos. Sin dudas, todos van a disfrutar del evento deportivo más grande del mundo pero los pocos privilegiados que lo harán con sus hermanos, se llevarán un recuerdo y una sonrisa imborrables por el resto de sus vidas.
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