JORGE KOECHLIN:
Gil, campeón de la Fórmula CART, el primer campeón brasileño desde Emerson, rumbo a ser bicampeón!

GIL DE FERRAN:
Ya veremos, el campeonato no ha terminado. Y estamos a punto de obtener un buen resultado también este año. Pero no ha terminado aún, Jorge.

JORGE KOECHLIN:
Si te consideras técnico dentro de mundo motor… ¿cómo aprendiste a ser técnico, como empezaste a aprender a poner a punto un auto?

GIL DE FERRAN:
Lo que me parece importante es que el piloto, en primer lugar, es necesario que él sienta lo que ocurre. Porque algunos pilotos hacen algo, se detienen y ni siquiera recuerdan cómo hicieron la última vuelta. El segundo paso es transmitirle al ingeniero lo que se siente, de forma que el ingeniero entienda. Y el tercer paso, que en mi opinión es lo más importante y que pocas personas logran hacer, es tratar de explicarle a los ingenieros, adónde quieres llegar; no sólo lo que estés sintiendo, sino lo que quieres sentir.

JORGE KOECHLIN:
Gil, la temporada del 2000, una gran victoria para Penske, la victoria número 100; te regalaron el trofeo, te dieron un cheque, un bono, porque esa victoria la estaba esperando Roger Penske!

GIL DE FERRAN:
El equipo Penske pasó dos o tres años en los cuales no obtuvo los resultados esperados. Cuando yo me uní al equipo a finales de 1999, para la temporada del 2000, ellos estaban trabados en la victoria número 99, aunque de todas formas, 99 victorias son más de las que tienen los otros en la categoría; fue entonces cuando Roger reorganizó todo el equipo. Creo que fue en la cuarta o la quinta carrera del año en Nazareth, la cual fue aplazada a causa de la nieve, en la cual obtuve mi primera victoria pilotando con el equipo. Para mí fue algo realmente fantástico. Sé que Roger siempre la recordará como su centésima victoria, pero para mí siempre será mi primera victoria con ellos.

JORGE KOECHLIN:
Montoya, en Cleveland que es tu pista, Cleveland ganaste tu carrera ahí con Jim Hoalt y un año lo estuviste persiguiendo a Montoya, ¿qué tan bueno es Montoya?

GIL DE FERRAN:
Es realmente uno de los mejores pilotos que yo haya visto. He corrido con muchos pilotos buenos, pero Montoya es un talento especial. Su habilidad para controlar el auto en situaciones extremas es increíble. Aunque parezca que sufrirá un accidente, él siempre termina sin errores. Es una persona que comete muy pocos errores. A pesar de ser muy joven, tiene una actitud muy madura en las pruebas. Es un piloto especial.

JORGE KOECHLIN:
El '97 fue un buen año para tí con las Goodyears, no tuviste ninguna victoria, ¿tú sabes que tienes el récord de ser el piloto de tener mayor número de podiums sin victoria?

GIL DE FERRAN:
Yo tengo una cantidad enorme de marcas de esa clase. Pero como ya dije, ese fue mi primer año con Derek, fue mi mejor posición en el campeonato hasta ahora. Aunque ese año no hayamos tenido ninguna victoria, tengo buenos recuerdos de ese año.

JORGE KOECHLIN:
¿Ese año, después del '97 podrías haber ido a Fórmula uno, te quedaste en CART, en Fórmula mundial, un error?

GIL DE FERRAN:
En primer lugar, yo tenía un contrato con el señor Walker. Yo no estaba descontento con mi situación en esa época. Para mí siempre fue más una cuestión de equipos que de categorías. Y hoy en día soy piloto de un equipo que considero como uno de los mejores del automovilismo mundial.

JORGE KOECHLIN:
¿Y eres el hombre más rápido del mundo?

GIL DE FERRAN:
¿Quién, yo?

Jorge…si tú (se rie) el récord de velocidad

Es verdad. Tengo un récord de 241.4.

Jorge … 385 kms/hora

Fue un récord que el día cuando lo conseguí, para serte sincero, no estaba familiarizado con los récord de velocidad. Porque eso ocurrió el fin de semana en que yo disputaba el campeonato. Obtuve ese récord en la clasificación para la carrera de Fontana, y debido a eso obtuve un punto adicional que valió mucho más que el récord, porque lo importante era el campeonato. Claro está, ganamos el campeonato, pero desde entonces le he dado más valor a ese récord, que me parece que fue uno de los grandes momentos de mi carrera.

JORGE KOECHLIN:
Hablando de Fórmula uno y de equipos que podrías haber corrido, una relación muy especial con Jackie Stewart

GIL DE FERRAN:
Es verdad

JORGE KOECHLIN:
Una relación que cuando estuviste en forma…llegaste a Europa y corriste una carrera en Fórmula 3 en clase B y luego fuiste a correr Fórmula Ford como todos y de ahí corriste con Stewart

GIL DE FERRAN:
El inicio de mi carrera en Europa fue poco común. Yo fui para allá como la mayoría de los pilotos brasileños. Ahorré algo de dinero en el Brasil. Recuerdo que entonces yo quería correr Fórmula Ford 2000 y Fórmula 3. Y corrimos juntos en el 92, el 93 y el 94. Ganamos el campeonato de Fórmula 3 en el año 92, y corrimos dos años en Fórmula 3000, en el 93 y el 94. El llenó la brecha que había entre la Fórmula Ford y lo que hago hoy en día.

JORGE KOECHLIN:
Importante para la vida tuya, la relación con Stewart Racing, ¡ahí conociste a Ángela!

GIL DE FERRAN:
Además de todo lo que hay en el plano profesional, en el cual él me ayudó mucho, está Angela, quien hoy es mi esposa.

Jorge…¿cuando le pusiste el ojo?

GIL DE FERRAN:
Yo trabajaba para él. Y en 1990, mi primer año en el equipo, ella manejaba las relaciones públicas del equipo y Jack y la conocí. Empezamos a salir a mediados del año 90, en el 91 empezamos a vivir juntos y en el 93 nos casamos.

JORGE KOECHLIN:
Con 2 lindos hijos, Ana y Luke, Luke se llama así por tu padre!

GIL DE FERRAN:
Luke y Ana se llaman así por varios motivos. Uno de los más importantes es que como tenemos raíces en Inglaterra, Francia y Brasil, necesitábamos un nombre que fuera similar en los tres idiomas, que es lo que sucede con los nombres Ana y Luke. Claro que además de eso, Luc es el nombre de mi padre.

JORGE KOECHLIN:
Y tu padre es ingeniero, él te ayudó mucho cuando eras joven

GIL DE FERRAN:
Yo aprendí mucho con mi padre, sobre todo al inicio de mi carrera. Porque cuando yo corría (CART) el equipo lo formábamos mi padre, mi madre, un amigo mío y yo. Era una actividad familiar. Nos divertíamos mucho. Viajábamos todo el fin de semana por la provincia de São Paulo. Fue una actividad que nos unió mucho y aprendí mucho con mis padres.

JORGE KOECHLIN:
Y tienes a tu mamá, ahora tu madre esta contigo, una relación especial,

GIL DE FERRAN:
Muy especial. El hecho de vivir aquí en la Florida ayuda mucho, porque es fácil venir desde Brasil y ella siempre viene a ver a sus nietos, porque yo ya no le intereso a ella. Así que ella viene a ver a Ana y a Luc.

JORGE KOECHLIN:
Porque tú tenías toda la atención, tienes 2 hermanos, una hermana y un hermano

GIL DE FERRAN:
Tengo una hermana de 29 años y un hermano de 28. Una de las cosas difíciles de mi carrera fue que yo era muy joven cuando salí del Brasil. Yo fui en pos de una carrera en el exterior cuando tenía 19 años. Por lo tanto, no pude vivir esa relación con ambos. Pero tengo excelentes relaciones con mis hermanos.

JORGE KOECHLIN:
¿Quienes son tus héroes, tu gente…Emerson te dio tu primer trofeo en CART?

GIL DE FERRAN:
El me entregó mi primer trofeo. En el año 82 yo gané una carrera en el campeonato paulista de CART. Ese año, mi primero en las carreras, yo corría contra Rubens Barrichelo y Christian Fittipaldi. Emerson es tío de Christian y la carrera fue en Limeira. Limeira es donde Emerson tenía su finca de naranjas y él fue a ver correr a su sobrino. Yo gané la carrera y él me entregó el trofeo.

JORGE KOECHLIN:
Gil de Ferran

GIL DE FERRAN:
Sí, señor.

JORGE KOECHLIN:
¿El mejor momento de tu carrera?

GIL DE FERRAN:
Creo que las victorias siempre son el mejor momento. Y la victoria que me ha marcado más fue la del campeonato del año 2000 en Fontana, ocasión en la cual no gané la carrera, pero sí el campeonato. Ese momento lo tendré grabado siempre en la mente y el corazón.

JORGE KOECHLIN:
¿A quién puedes agradecer por tu carrera?

GIL DE FERRAN:
Yo tuve mucha suerte, Jorge. Me asocié, conocí y trabajé con personas muy honestas, que me enseñaron mucho, que me aportaron muchas cosas, cosas que traigo conmigo hasta el día de hoy.

JORGE KOECHLIN:
El deporte, la vida, son 20 años que corres y te ha dado todo esto, ¿qué le vas a dar tú al deporte de regreso?

GIL DE FERRAN:
Buena pregunta. Hoy en día estoy absorto, mucho más que absorto, estoy concentrado en mi actividad al cien por ciento. Quizás sea porque soy algo lerdo, pero no puedo hacer dos cosas a la vez. Para ser piloto y alcanzar mi potencial necesito concentrarme mucho y trabajar mucho conmigo mismo. De vez en cuando consigo el tiempo, pero no la capacidad de dedicarme a otras cosas.

JORGE KOECHLIN:
¿Qué sueños te quedan en la vida. Tienes tiempo para pensar en eso?

GIL DE FERRAN:
Todavía amo lo que hago, aunque esté corriendo autos desde 1982, es decir, desde hace veinte años. Esta es mi vigésima temporada y aún me subo al auto, aún salgo del en la mañana con muchas ganas, muy contento. Yo adoro lo que hago. Todavía me siento bien al pilotar el auto. Me divierto mucho. Todo lo hago con mucho entusiasmo. Y mientras tenga este entusiasmo y las ganas de acelerar, de trabajar y compartir con el equipo, seguiré corriendo. No tengo planes de hacer grandes cambios en mi carrera. Mis planes son seguir teniendo éxito, seguir mejorando como piloto, porque creo que, aunque no sea un ascenso pronunciado, yo sigo mejorando.

JORGE KOECHLIN:
Eso de la perseverancia es el don de los dioses.