|
BUENOS AIRES -- Si la historia de un dirigente se escribe por sus aciertos y errores, el capítulo del Campeonato Argentino de Interior con hándicap, decididamente se encuentra en la primera columna. Hacia fines de los años 80, la Asociación Argentina de Polo entendió que este deporte en las provincias se moría. La transformación de las últimas décadas no hizo más que darle la razón. Los jugadores de alto hándicap ya no van como circos móviles mudando sus carpas de pueblo en pueblo disputando lo que antes era un circuito donde el polo de campo disfrutaba con los grandes de la Triple Corona. En todo caso se agudizó ese círculo vicioso que hace que los grandes jugadores de Palermo necesiten emigrar de su tierra entre 5 y 7 meses, para luego poder sostener desde sus propios bolsillos la temporada más dura, competitiva y menos redituable del mundo, que es la Argentina. Así nació la idea de desarrollar un campeonato interprovincial que, a diferencia de la Copa República Argentina, disputa su ronda final en sedes que van rotando de una provincia a otra cada año. Esta vez, Estancia Grande Polo Club de la Provincia de San Luis, fue la encargada de recibir al "circo del interior", en su 28va. versión. El equipo pampeano de Chapaleufú tras derrotar a Los Sauces (San Luis) por 11 a 7, consiguió su octavo título en el certamen, y se transformó en el máximo ganador. Los ganadores de las copas subsidiarias fueron para los cordobeses de San Gonzalo y los santafecinos de Venado Tuerto. Los resultados finales fueron los siguientes: Copa Sesquicentenario de la Revolución de Mayo (Ganadores de Zona): Chapaleufú (La Pampa) 11, Los Sauces (San Luis) (Recibió 2 goles por su menor valorización de conjunto) 7; Copa Roberto Cavanagh (Segundos de Zona): San Gonzalo (Córdoba) 8, Hípico Santa Catalina (Corrientes) 7; y Copa Amistad (Terceros de Zona): Venado Tuerto (Santa Fe) 13, La Justina (Entre Ríos) (Recibió 3 tantos) 7. CHAPALEUFU (La Pampa) VS LOS SAUCES (San Luis) Tras un excelente comienzo del equipo puntano, comandado por Ezequiel Sánchez –de buen encuentro–, Los Sauces se adelantó 4-0 promediando el primer chukker, aprovechando los dos goles recibidos por hándicap. Pero poco a poco el equipo pampeano se fue amoldando en la cancha 1 de Estancia Grande, algo mojada por una leve llovizna, y comenzó a merodear los mimbres rivales. En el segundo período, en el que se destacaron los hermanos Lariguet, Chapaleufú igualó el marcador con cuatro chukkers por delante. A partir de ahí, el conjunto pampeano logró jugar al polo que más les gusta, abierto y corrido, ante una formación de Los Sauces al que no le salieron las cosas, ya que su mejor valor, Cristian Bernal, fue muy bien marcado por los hombres de “Chapa”, quienes entre el segundo y el quinto chukker convirtieron 10 tantos contra 1 sólo (y de penal) de su rival. Fue un partido casi perfecto de los pampeanos, ya que sus cuatro jugadores se destacaron: Andrés Lariguet, muy sólido en defensa y acompañando en ataque; Alberto Garzarón, con un incansable ida y vuelta y eficacia goleadora; su hijo Nicolás, luchando cada bocha como si fuera la última; e Iván Lariguet, la gran figura del partido, armando juego y llegando al gol con gran efectividad. Así las cosas y pese a un par de descuentos de Los Sauces en el último parcial –Juan C. Sánchez y un penal de Cristian Bernal–, el equipo pampeano logró el título por octava vez en la historia del CAIH, tras cuatro años –último en 2012– sin poder lograrlo. Alberto Garzarón marcó un récord, ya que consiguió su cuarto campeonato en el torneo –todos con Chapaleufú– (1989, 2005, 2012 y 2016) y se convirtió en el jugador más ganador de la historia del certamen, superando a Horacio Etcheverry, Christian Guevara, Sergio Magrini e Ignacio Tillous, que cuentan con 3. En tanto, Andrés Lariguet se consagró campeón por segunda vez, pero la primera con su equipo (el anterior triunfo fue en San Luis, en 2010, jugando para los entrerrianos de Donovan). En tanto, su hermano Iván y Nicolás Garzarón consiguieron inscribir su nombre por primera vez en este certamen, el más importante del interior de nuestro país. Para Estancia Grande fue el tercer CAIH que organizó (los anteriores en 2010 y 2012), con la particularidad que en los tres llegó a la final Chapaleufú, que consiguió dos triunfos (2012 y 2016) y una derrota ante Donovan (Entre Ríos) en 2010. Finalmente, se recuerda que la provincia más ganadora del CAIH es Córdoba, que lleva 10 títulos, pero con varios equipos (Río Cuarto, 4; Vicuña Mackenna y Fortín El Sauce, 2; El Chañar y Washington, 1). Lo sigue La Pampa, con los 8 trofeos de Chapaleufú; y Entre Ríos, que obtuvo 5 trofeos. SAN GONZALO (Córdoba) VS HIPICO SANTA CATALINA (Corrientes) En la cancha 1 también se definió el trofeo que disputaron los segundos de zonas, quienes hasta el momento eran los equipos más goleadores del torneo. Y cuando se esperaba un partido muy abierto y con gran cantidad de tantos convertidos, fue todo lo contrario: un encuentro muy duro y luchado, pero igualmente bueno entre dos formaciones muy parejas. Empezaron mejor los correntinos de Santa Catalina, que esta tarde dependieron casi exclusivamente de lo realizado por Gustavo Usandizaga, goleador de la tarde y también del certamen, y llevaron la delantera en el tablero hasta promediando el quinto chukker. Fue en ese momento cuando los cordobeses de San Gonzalo encontraron su mejor funcionamiento colectivo y con un encendido Sebastián Petracchi –figura–, bien acompañado por su tocayo Borghi, anotaron tres tantos para dar vuelta el partido y quedar arriba con un solo período por jugar. En el último, Petracchi convirtió otros dos tantos para sacar una ventaja de 3, pero los correntinos no se dieron por vencidos y merced a un gol de cada uno de los Usandizaga, quedaron a tiro del suplementario, pero no lograron el empate y el trofeo quedó para San Gonzalo. VENADO TUERTO (Santa Fé) vs LA JUSTINA (Entre Ríos) En el inicio de la fecha final, los terceros de zonas se enfrentaron en la cancha 2. Los entrerrianos de La Justina recibieron tres goles de ventaja, pero los santafecinos de Venado Tuerto lograron neutralizar y superar la ventaja cedida ya en el segundo chukker. Con un excelente partido de los hermanos Rooney –sobre todo de Marcos, autor de 8 goles– Venado Tuerto fue acrecentando su ventaja chukker a chukker y merced al buen trabajo realizado por Santiago Gómez Romero en la defensa de sus mimbres, La Justina –se destacaron los hermanos Vallarino– estuvo casi 25 minutos sin anotar un tanto. Esa falta de gol fue la clave para que el conjunto de Santa Fe logre una clara victoria por 13 a 7 y se quede con el tercer trofeo en disputa. Los equipos finalistas y las progresiones: Copa Sesquicentenario de la Revolución de Mayo Chapaleufú (La Pampa): Nicolás Garzarón 1, Alberto Garzarón 4 (4 goles), Iván Lariguet 5 (5) y Andrés Lariguet 5 (2 penales). Total: 15. Los Sauces (San Luis): Juan Carlos Sánchez 2 (1), Ezequiel Sánchez 4 (1), Rodrigo Sánchez 2 y Cristian Bernal 5 (3, dos de penal). Total: 13. Chapaleufú: (0-2) 1-4, 4-4, 7-5, 9-5, 11-5 y 11-7. Jueces: Esteban Ferrari y Gastón Lucero. Árbitro: Martín Haurie. Copa Roberto Cavanagh San Gonzalo (Córdoba): Lucas Boccolini 2 (1), Sebastián Petracchi 4 (4), Sebastián Borghi 5 (3) y Horacio Etcheverry 5. Total: 16. Hípico Santa Catalina ERSA (Corrientes): Walter Cardozo 2, Gustavo Usandizaga 5 (6, cuatro de penal), Segundo Roca 4 y Guillermo Usandizaga 5 (1). Total: 16. San Gonzalo: (0-0) 1-2, 1-3, 2-4, 3-4, 6-5 y 8-7. Jueces: Martín Haurie y Gastón Lucero. Árbitro: Esteban Ferrari. Copa Amistad Venado Tuerto (Santa Fe): Gonzalo Ferrari 1 (2), Federico Rooney 4 (3), Marcos Rooney 5 (8, tres de penal) y Santiago Gómez Romero 3. Total: 13. La Justina (Entre Ríos): Guillermo Burgos 2, Diego Vallarino 4 (2, uno de penal), Guillermo Vallarino 3 (1) y Facundo Morando 1 (1). Total: 10. Venado Tuerto: (0-3) 3-4, 5-4, 6-4, 9-4, 10-5 y 13-7. Juez: Esteban Ferrari.
|
