La Varsity Cup sudafricana será el lugar elegido para estrenar, y testear, la regla de Power Play que alentará a los entrenadores a emplear tácticas ofensivas mientras fomenta una generación de jugadores de rugby dinámicos y ajustables.
La regla consiste en eliminar a cualquiera de los dos jugadores de la línea de backs del equipo rival por un período de tres minutos de tiempo de juego.
Se puede solicitar mientras que en el equipo juegue en su propio campo, debe ser llamado por el capitán, y sólo puede utilizarse una vezser llamado una vez.
Si el equipo cuyos jugadores fueron eliminados obtiene un try durante el período Power Play, se les otorgan dos puntos adicionales (siete puntos antes de la conversión).