CINCINNATI -- El croata Marin Cilic le puso un freno a Andy Murray, se impuso por 6-4 y 7-5 en la final de Cincinnati y se anotó su primer título en torneos de Masters 1000.
Luego del sufrimiento de las semifinales, en las que venció bien entrada la noche a Grigor Dimitrov, a este festejo con puño cerrado tras una notable actuación y una victoria en sets corridos ante Andy Murray, quien llegaba con una racha de tres títulos seguidos y 22 triunfos en línea. Gran partido de Cilic, quien regresó al Top 10 (será N°9 el lunes) y se planta como amenaza de cara al US Open, torneo que supo ganar en 2014 y que comenzará en poco más de una semana. Y todo a pocos días de haber cortado con su coach.
En el comienzo del partido fue Murray el que dio los primeros avisos desde la devolución, pero sin embargo Cilic creció a fuerza de un gran pasaje en el encuentro y firmó un quiebre decisivo para marcar la primera distancia. Y el croata aprovechó al máximo su momento y sacó un segundo break de distancia.
El británico, no obstante, no bajó los brazos y puso a prueba a Cilic, que, tras no poder cerrarlo en el 5-2, selló el primer set gracias a tres grandes servicios y a un gran punto.
Con la ventaja, Cilic mantuvo el orden desde su servicio, con apenas tres puntos cedidos hasta el 5-5 a través de esa vía, y golpeó duro desde la devolución para el primer quiebre del set. Lo tuvo que trabajar, no obstante: no lo pudo cerrar en el 0-40 ni en el cuarto break point. La llave llegó mediante una derecha a la red de Murray.
El croata no dejó pasar su oportunidad y en un juego sin fisuras se quedó con el duelo en una hora y 34 minutos de acción. Desahogo y gran festejo para su primer título de Masters 1000.
Cilic, que estaba 0-8 en cuartos de final de M1000 hasta esta semana, firmó además su primer título en el año (finales en Marsella y Ginebra) y apenas su tercero desde su gran consagración en el US Open 2014. Sus otros dos triunfos, con una particularidad: fueron en el ATP 250 de Moscú.
Por su parte, Murray, campeón aquí en 2011 y 2013, llegaba al partido decisivo tras una buena victoria ante el canadiense Milos Raonic, en su partido N°14 en los últimos 15 días, y con una racha de 22 victorias seguidas (33 en sus últimos 34 partidos) y tres títulos consecutivos, en Queen's, Wimbledon y Rio.
El británico, cabe destacar, iba en busca del título en Cincinnati para quedar a sólo 800 puntos de Novak Djokovic en la Carrera a Londres, que en definitiva será la que terminará graficando el N°1 del mundo a fin de temporada. En Flushing Meadows, una nueva batalla en esa lucha mano a mano.