MANACOR -- El comunicado de este jueves de Rafael Nadal, anunciando el punto final a 2016, marcó que entonces este fue su año con menos títulos ganados tras 11 temporadas. En este calendario, el español consiguió dos ATP, su peor marca desde que obtuvo su primer certamen, en 2004. Además, por primera vez desde ese mismo año, no superó los 40 triunfos.
La caída ante el serbio Viktor Troicki en el Masters 1000 de Shanghai de la semana pasada fue así su último choque de la presente temporada, en la que se coronó campeón en el Masters 1000 de Monte Carlo y el ATP 500 de Barcelona, ambos en arcilla, su superficie favorita.
El zurdo de Manacor, uno de los grandes del tenis de toda la historia, con el récord de más títulos en un mismo Grand Slam, con nueve en Roland Garros, conquistó 14 Majors en toda su carrera. En total, ya se adjudicó 69 campeonatos, pero desde 2004 que no obtenía tan pocos.
Aquella vez, Nadal abrió su cuenta personal en el clay de Sopot, para ya quedarse con 11 torneos al año siguiente, en 2005, temporada en la que festejó por primera vez en la arcilla de París. Al fin y al cabo, ese fue su récord de festejos en un solo año, seguido por 2013, cuando logró 10 ATP.
Este año, además, el español jugó otra final, en Doha, que la perdió en la apertura del calendario. Sin dudas, otra vez los problemas físicos fueron determinantes en el mal andar de Nadal, quien estuvo muy irregular. De hecho, el actual Nº6 del mundo y exlíder del ranking ATP terminó 2016 con 39 triunfos y 14 derrotas.
De esta manera, el zurdo ganó menos de 40 partidos por primera ocasión desde los 30 de 2004, cuando era muy joven. Desde 2005 había sumado más de 45 victorias por temporada, con la única excepción de 2012, cuando consiguió 42 pero el atenuante fue que no jugó más desde Wimbledon, por lo que se perdió la segunda mitad del circuito por problemas físicos.
Así, con 30 años, Nadal vive un presente oscuro. Dijo que se prepara para trabajar a pleno con vistas a un mejor 2017. Sin dudas, lo necesita él, su equipo de trabajo y sus millones de fans. El desafío es grande.