Lejos de conformarse, quiere dar otro paso clave. Diego Schwartzman, en el mejor año de su carrera deportiva, sigue siendo el argentino más consistente de 2017 y ahora, en su tercera semifinal, busca vencer al griego Stefanos Tsitsipas en el ATP 250 de Amberes.
En este certamen en superficie dura y bajo techo, dotado con 589.185 euros en premios, Schwartzman quiere repetir la final de hace 12 meses. Con 25 años, disfruta del mejor ranking de su carrera, siendo Nº26 del mundo, y se impuso en su décima participación en cuartos de final en la temporada. Viene de caer en semis en Estambul y Tokio y pretende cortar esa serie.
El porteño viene de eliminar al español David Ferrer, ex-Nº3 del ranking ATP y finalista de Roland Garros, y ahora se topa con el ascendente y sorpresivo Tsitsipas (122º). En este caso, el sudamericano llega como favorito y el europeo viene de punto, pese a que dejó afuera al local David Goffin (10º), máximo candidato y clave para que Bélgica haya llegado a otra final en la Copa Davis.
Con marca 35-25 en este año, Schwartzman, cuarto cabeza de serie, se mide por primera ocasión con Tsitsipas, que viene de la qualy, y quiere sacar pasaje a su tercera final de ATP. El año pasado jugó ambas, ganando en la arcilla de Estambul y cayendo en el hard de Amberes, donde ahora se puso a un triunfo de ser otra vez finalista.
El segundo sembrado de esta cita belga, el francés Jo-Wilfried Tsonga (17º) ganó su duelo semifinal vs. Ruben Bemelmans (98º) por 6-3 y 6-3, y así esperar tranquilo el domingo.