No la está pasando bien. Y sufre mucho, demasiado. Victoria Azarenka, que reapareció oficialmente en Indian Wells, contó que el tenis es ahora su única vía de escape a los problemas personales que tiene en la lucha por la tenencia de su pequeño hijo.
A los 28 años, la bielorrusa, ex-Nº1 del mundo y dos veces campeona del Abierto de Australia, atraviesa un duro presente en su vida. Ya había faltado en Melbourne y ahora, en su vuelta a la competencia en el circuito de la WTA, contó sus vivencias actuales, en dura disputa con el padre de su niño.
"Me maravilla el hecho de ser capaz de concentrarme y ponerme las 'pilas'. No sé ni cómo lo hago con todo lo que tengo encima. Me sorprende muchísimo, la verdad. No me imaginaría nunca que fuera capaz de estar así de calmada y positiva", comentó la ganadora de 20 títulos WTA, tras perder con la local Sloane Stephens en Indian Wells.
"El tenis es la única escapatoria que tengo para olvidar lo que sucede en mi vida. No es sólo una diversión, es lo que hago para vivir pero por mi situación, es muy difícil concentrarme. Me pasa en los entrenamientos, cuesta mucho... A veces me paro porque no soy capaz de centrarme en la pelota", dijo Vika.
Reconocida luchadora, de mentalidad fuerte y ganadora, Azarenka reveló cómo se siente por los inconvenientes diarios que atraviesa. Desde Roland Garros 2016, apenas disputó tres certámenes. Lo mejor fue haber accedido a octavos de final en Wimbledon, el año pasado. Sin dudas, hoy la vida no le sonríe y busca salir adelante cuanto antes.