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Fue un viernes histórico, de película en Wimbledon. Novak Djokovic suspendió con ventaja de 2-1 en sets sobre Rafael Nadal, Nº1 del mundo, debido al horario nocturno en Londres. En primer turno, Kevin Anderson le ganó en un partido muy largo a John Isner, por 26-24 en el quinto set y aguarda rival para la final del domingo. El duelo más repetido de la Era Abierta, que comenzó en 1968, dejó inconcluso el 52º encuentro entre Djokovic y Nadal. Ya de noche y con el techo corredizo, empezaron después de la maratónica primera semifinal. El serbio está 6-4, 3-6 y 7-6 (9) sobre el español, quien no pudo concretar tres chances para obtener el tercer set. Djokovic, dueño de tres títulos en La Catedral, empezó más firme en el mítico césped, con confianza, variando y buscando con sus armas desestabilizar al zurdo de Manacor. Así fue como se adjudicó el primer parcial. Pero se recuperó Nadal, que logró un quiebre y cedió enseguida su servicio en el segundo capítulo. Otra rotura le permitió al líder del ranking ATP, más punzante y arriesgando desde el fondo, para igualar las acciones. 
En el tercer set estuvieron parejos y por momentos se mostró más entero y sólido a Nadal, con Djokovic evitando quedar abajo gracias a su oportuno y gran saque. En la muere súbita dispuso el primero los citados tres set points, hasta que la mayor precisión del serbio fue clave para quedar en ventaja para el sábado. La organización del torneo más tradicional del mundo anunció que, por horario y reglas en el barrio del All England Club, a las 23 local, debió suspender la acción. Por eso, continuarán este sábado, previo a la final de mujeres, con Djokovic con un triunfo más que Nadal (26-25 está el historial). El serbio, exrey ATP, busca su 22ª definición de Grand Slam y el español, dos veces campeón en Londres, quiere su 25ª. El que sudó mucho para lograr su segundo ticket a una final Major fue Anderson. El sudafricano, Nº8 del mundo, se impuso a Isner (10º) en 6 horas y 36 minutos por 7-6 (6), 6-7 (5), 6-7 (9), 6-4 y 26-24. Fue la semifinal más extensa en los Grand Slam y el segundo partido más largo de Wimbledon. El más prolongado en este certamen ocurrió en 2010, también con Isner en la cancha. Esa vez, la acción duró tres días y el estadounidense venció aquella vez en primera ronda al francés Nicolas Mahut por 6-4, 3-6, 6-7 (7), 7-6 (3) y 70-68 en 11 horas y 5 minutos. Nunca hubo un choque de tenis más largo que ese. Esta vez dieron una batalla tremenda y Anderson ya consiguió su pasaje, a la espera de conocer su último adversario, para el domingo en Londres.
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