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Vive un sueño. Y es un sueño que se extiende y espera ser aún más largo y maravilloso. Stefanos Tsitsipas, de 20 años, transita sus días más gloriosos y no puede creerlo. Ya batió varias marcas, siendo el primer griego en semifinales de un Grand Slam, y sin dudas lo suyo es de primera. No sólo había eliminado a su ídolo, el suizo Roger Federer, sino que dio otro gran paso al vencer al español Roberto Bautista Agut. Tsitsipas logró hacer lo que muchos no pueden: volvió a ganar tras dar un batacazo en un gran torneo. Esto no es sencillo de concretar y él lo consiguió, apoyado en su gran nivel, con su terrible revés de una mano, velocidad y mentalidad firme. Llegó a Melbourne con muy buenos antecedentes, pero está quebrando registros importnate y, de hecho, si supera al español Rafael Nadal el viernes se asegurará meterse por primera vez en el Top 10 de la ATP. No sólo es el primer griego en semis de un Major, también es el primero nacido en 1998 en alcanzar esa instancia y el más joven desde que el serbio Novak Djokovic, ahora N°1 mundial, trepó a semifinales en el US Open 2007.  "Necesito tiempo para responder y procesar todo. Siento que esto es como un cuento de hadas. Simplemente estoy viviendo mi sueño, viviendo todo por lo que he trabajado tan duro. Estoy un poco sentimental, porque realmente he trabajado muy fuerte para llegar hasta aquí. Esto es real y está ocurriendo", afirmó incrédulo. "Estoy un poco sorprendido, sí", respondió. "He leído algunas publicaciones y he visto algunas fotos pero no tengo ni idea de lo que se está diciendo en Grecia y la verdad, quisiera saber lo que se está diciendo. Tengo muchos mensajes en mi teléfono que todavía tengo pendiente contestar. Recibí mensajes de apoyo de celebridades de mi país y siento que mi actuación aquí está teniendo impacto, lo que se siente muy bien", confesó. Y remarcó el valor de lo hecho, en especial tras eliminar a Federer. "La primera noche fue dura de procesar. No me podía dormir. Tenía dolor en un dedo del pie y no me dejaba dormir. También sentía dolor en todo el cuerpo y mucha tensión. Esa noche dormí menos de seis horas y me preocupé para este partido. Pero la noche siguiente dormí muy bien. Sabía que la victoria ante Federer era valiosa porque él jugó un rol muy importante en mi vida, de lo que soy ahora. Sabía que el mayor desafío al que tenía que enfrentarme hoy era demostrar que podía volver a hacerlo", admitió el griego. Tsitsipas contó que en la pretemporada se fijó el objetivo de llegar a semifinales en los Grand Slams en este año. "Estoy feliz de haber alcanzado mi objetivo pero este debe ser el punto de partida. Jugué contra Rafa en dura y en clay. En Toronto, aunque el marcador fue 6-2 7-6, siento que estuve muy cerca de su nivel. Recuerdo que en el vestuario, después de aquel partido, me dije a mí mismo que lo iba a hacer mucho mejor la próxima vez. Entendí mucho mejor lo que hace", remarcó, mientras sigue soñando despierto.
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