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El torneo de Roland Garros tiene desde esta edición la primera gran remodelación lanzada el año pasado y que deberá culminar en 2021, la tercera cancha en tamaño, bautizada como Simone Mathieu y que albergará a 5 mil espectadores a partir del inicio de la competición el próximo 26 de mayo. La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, el expresidente Nicolas Sarkozy y el presidente de la Federación Francesa de Tenis (FFT), Bernard Giudicelli, dieron el banderazo al nuevo estadio que lleva el nombre de una tenista que ganó 12 veces el torneo en los años 30 pero también de una luchadora, enrolada en la resistencia del general De Gaulle durante la ocupación nazi. "La edición de 2019 se prevé apasionante, con un punto de interrogación ¿logrará Rafa Nadal su duodécimo título", se preguntó el director del torneo, Guy Forget. Por el momento, cuando el 9 de junio próximo abran el telón, los organizadores aspiran a superar los 480000 espectadores del año pasado, para lo que cuentan con el atractivo de su nueva cancha y de algunas de las reformadas. La central, que luce el nombre de Philippe Chatrier, estará lista para la ocasión, aunque hasta el año que viene no tendrá el techo retráctil que ha estado en el origen de toda la gran renovación. También 2020 es el año elegido para acabar con la cancha 1, conocida como la "plaza de toros" por la forma de sus gradas. La inauguración de la Simone Mathieu marca, además, el fin de una polémica con el vecindario del acomodado distrito 16, que se negaba a ceder un espacio que, desde hace muchos años albergaba unos históricos invernaderos. El bloqueo del proyecto estuvo a punto de obligar a la FFT a trasladar el torneo a las afueras de la ciudad, pero finalmente se llegó a un acuerdo que mantuvo Roland Garros en la capital francesa.
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