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Brett Okamoto 5y

Max Holloway por redimirse en la revancha ante Dustin Poirier

 ATLANTA - Cuando Max Holloway firmó por primera vez con el UFC en 2012, la promoción le ofreció al peso pluma de 20 años una opción entre dos oponentes para su debut en el Octágono.

"Uno es un cinturón negro [de jiu-jitsu brasileño], y uno es un golpeador", dijo Holloway a ESPN. "Les dije: 'Eso es un pastel . Lucharemos contra el golpeador’".

"El golpeador" resultó ser Dustin Poirier, de 23 años, quien rindió a Holloway a través de un amarre de brazo en menos de cuatro minutos. Los dos cruzarán caminos nuevamente el sábado en el evento principal de UFC 236, una pelea por el título de peso ligero interino para la cual Holloway está subiendo una categoría de peso. El ganador probablemente retará a Khabib Nurmagomedov por el título indiscutible de 155 libras este otoño.

Para Holloway, de Waianae, Hawaii, esta pelea por el título interino es una declaración de lo lejos que ha llegado. Después de comenzar su carrera con marca de 3-3 en UFC, Holloway ha obtenido 13 victorias consecutivas, ganó un campeonato de peso pluma y lo defendió dos veces.

¿Cómo se compara el Holloway de hoy con el que luchó contra Poirier hace siete años?

"La mejor manera de describirlo es, como yo en este momento, mataría a ese tipo", dijo Holloway (20-3). "Literalmente lo pondría en un cementerio. Hay un cementerio cerca de mi casa. Probablemente lo visitaría todos los días".

Holloway era un cinturón blanco de BJJ cuando luchó contra Poirier en 2012. No tenía un entrenador llamativo. Su "equipo" de artes marciales mixtas consistió en él mismo, el entrenador de BJJ Rylan Lizares y el ex luchador de UFC Dustin Kimura. Los tres entrenaban en lucha en Gracie Technics Academy en Honolulu y esencialmente formaron su propio programa de MMA.

 

Lo mejor de Max Holloway: Recuerda lo más destacado del campeón de peso pluma de UFC Max Holloway antes de desafiar a Dustin Poirier por el cinturón interino de peso ligero.


Siguió así por más de un año. De hecho, Holloway no agregó un entrenador de golpeo hasta agosto de 2013, cuando sufrió su tercera derrota en UFC.

"Estábamos bien, ¿sabes?" Holloway dijo. "Después de perder con Dustin [Poirier], ganamos tres en fila. Mi entrenador [Lizares] me decía: 'No soy un entrenador de golpeo. Traiga un entrenador en hugolpeo'. Mi cabeza dura era como, 'Nah, yo y Dustin [Kimura] entendimos esto. No te preocupes' ".

A la vez que la pelea del sábado es una declaración sobre lo lejos que ha llegado Holloway, podría ser más una declaración sobre a dónde se dirige.

Ahora con 27 años, Holloway ya es quizás el mejor peso pluma en la historia del deporte. Pero si las cartas caen bien, puede estar en la cúspide de una carrera que empequeñecería sus logros anteriores.

Si Holloway supera a Poirier (24-5), se convertiría en el tercer peleador en la historia de UFC en tener títulos en múltiples categorías de peso al mismo tiempo. Se establecería una súper pelea contra Nurmagomedov, quien mencionó la posibilidad de un regreso en septiembre en Abu Dhabi.

No es un secreto que Holloway, cuyo apodo es "Blessed", tiene mucha confianza en su habilidad para vencer a Nurmagomedov , invicto con marca de 27-0. Hace un año, accedió a luchar contra el dagestaní con seis días de anticipación, pero finalmente fue retirado de la pelea debido a preocupaciones sobre un recorte de peso de último minuto.

Sobre el registro perfecto de Nurmagomedov, Holloway dijo: "Recuerdo haber estado en mi banquete de séptimo grado y el DJ dijo: 'Es esa hora, muchachos. Todo lo bueno debe terminar'. Si el ‘Blessed Expres’ viene y lo detiene, los buenos tiempos podrían haber terminado. Eso me emociona. Esa lucha me emociona mucho ".

La confianza en sí mismo de Holloway no es solo específica del emparejamiento de Nurmagomedov. En realidad, es lo que él atribuye por estar donde está hoy.

Holloway quiere ser recordado como el mejor peleador del mundo, pero se apresura a decir que ni siquiera es el mejor peleador de Waianae. Holloway dice que creció viendo a innumerables atletas de su ciudad natal por debajo del rendimiento, porque la historia les había enseñado que esa era la única opción.

"Vi a tantos muchachos que se suponía que estaban en la liga", dijo Holloway. "Se supone que deben estar aquí, donde estoy sentado. Se supone que deben estar haciendo cosas más importantes que lo que están haciendo. Pero siempre vi cosas pequeñas que los traían de vuelta. Y siempre me dije a mí mismo: 'De ninguna manera . Yo uso eso como combustible.

"Serían la estrella número uno en la escuela y luego verían a sus tíos, ¿saben? Y sus tíos están allí, trabajando en la construcción. Después del trabajo, van a beber. Sacan botellas, lo que sea, y hablan de lo que hicieron en la escuela secundaria. Y siempre me decía a mí mismo: 'No voy a ser yo' ".

En cierto modo, todo está perfectamente preparado para la revancha del sábado contra Poirier, quien ha ganado ocho de sus últimas nueve peleas para ganar una oportunidad por el título interino. Holloway ya es un campeón; uno de los luchadores más entretenidos y devastadores de MMA.

Y dependiendo de lo que suceda en un futuro cercano, podría hacer que su caso sea el mejor de todos los tiempos. Pero para obtener esa oportunidad, tiene que subir de peso y pasar por el hombre responsable de su primera derrota en su carrera hace siete años.

"Todos nos estamos relamiendo para este", dijo Holloway. "Estamos listos, ¿sabes? Es historia. Cuando todo está dicho y hecho, todo el glamour, toda la fama, todo esto desaparece. Mi nombre está en el libro de historia. [El nombre de mi equipo] está en el libro de historia conmigo. Nadie va a quitarnos eso ".

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