El debut de Cooper Flagg con los Mavs es el más esperado en la NBA. Nuestros expertos analizan lo que será su primera campaña.
El debut de Cooper Flagg con los Mavericks es el más esperado en la NBA desde Victor Wembanyama y el naturalmente, el debut más esperando en Dallas desde Luka Doncic.
El prometedor alero de Duke demostró en su única temporada colegial que es un talento inigualable, pero llegar a los Mavericks por la suerte del draft, le da una ventaja y una desventaja. Al llegar a un equipo contendiente, tiene la suerte de que no necesitará que se ponga una capa de superhéroe porque el equipo ya lo tiene en Anthony Davis y en algún momento tendrá a Kyrie Irving. Pero por otro lado, la naturaleza del equipo puede colocarlo en un rol que le reste visibilidad como candidato a ganar el premio de Novato del Año.
¿Le juega a favor o en contra llegara Dallas? ¿Cómo le afectarán los dolores de crecimiento como uno de los novatos de menor edad? Nuestros expertos responden esa y otras preguntas.
1- Llegar un equipo contendiente juega a favor de Cooper Flagg.
Ficción: En teoría, Flagg llegar a un equipo armado para competir ahora debería ayudarlo en su desarrollo, dejando a un lado la presión de carga que normalmente llevaría un primer pick, similar quizás a un Magic Johnson o Tim Duncan.
Sin embargo, esa ‘presión’ también ayuda a afilar a las estrellas del futuro, tanto en el aspecto físico del juego como mental. LeBron James, Shaquille O’Neal y más recientemente Victor Wembanyama la vivieron. Cada situación es única, claro. Pero las expectativas sobre Flagg en Dallas lo colocan en una posición diferente, ya que también llega para ser la cara de la franquicia en reemplazo de Luka Doncic, una propuesta a corto y largo plazo.
Flagg tiene todo para brillar y dejar su marca de inmediato en el renglón que más cuenta: ganar. No obstante, cuando ganar es ahora, los reflectores brillan más y la carga se hace más pesada, aún si no tienes que llevarla sola. --Víctor O. López
Realidad: Por varias razones. Ser la primera selección del draft implica una gran responsabilidad para estos atletas que apenas son adultos. Son considerados los mejores de su generación, los que van a salvar a la franquicia en la que llegan y llevarla a la cima de la NBA. Todos los ojos de la liga están sobre ellos. Y la gran mayoría no puede con la responsabilidad ni las expectativas.
De los últimas 10 primeras selecciones del draft, ninguno ha podido llevar a su franquicia a la final de la NBA. El último que pudo cumplir fue Kyrie Irving (primera selección del 2011) tras ser campeón con los Cleveland Cavaliers en 2016.
Cooper Flagg llega a los Mavs con la etiqueta de ser la próxima estrella del equipo, no la estrella actual. La franquicia lo arropará con jugadores experimentados y campeones como Anthony Davis, Kyrie Irving y Klay Thomson, y tratará de llevarlo con pasos seguros al estrellato. --Luis Salazar
2- Un número de Cooper Flagg camino a la temporada 2025-26.
18 años y 305 días. Esa será la edad que tendrá Cooper Flagg el día de su proyectado debut en la NBA el 22 de octubre frente a los San Antonio Spurs (ESPN, 9:30 pm ET). Si te dio curiosidad, no es el jugador más joven en llegar a la liga, honor que pertenece a Andrew Bynum (18 años, 6 días), pero será solo dos días mayor que LeBron James (18 años, 303 días) cuando debutó con los Cavaliers el 29 de octubre de 2003.
Mientras trata de ayudar a su equipo como se espera, Flagg también tendrá que lidiar con los problemas de crecimiento en la mejor liga del mundo muy joven. Hay quienes han hecho la transición con éxito como James y Luka Doncic (19 años, 231 días), pero llegar temprano no siempre garantizan el éxito y el aplauso inmediato como en el caso de Kobe Bryant (18 años y 72 días en su debut), quien promedió 15 minutos y 7.6 puntos por juego en su temporada de novato y Tracy McGrady (18 años, 72 días), quien promedió 8.0 puntos por juego en sus primeras dos temporadas.
Y ni hablar de los casos como Darko Milicic (18 años, 133 días) y Yaroslav Korolev (18 años, 181 días). No es por asustarte fan de los Mavericks, pero no hay nada seguro todavía.. --Hiram Martínez
3- La mejor versión de Cooper Flagg en la temporada de 2025-26…
Cooper Flagg es un novato que tiene la capacidad de generar un alto impacto en la NBA. Sin embargo, Dallas Mavericks, un equipo con figuras destacadas y que tuvo mucha fortuna en la lotería del Draft, no lo necesita en un rol de estrella.
El alero tuvo un desempeño imperial en Duke en la temporada 2024-2025, con 19.2 puntos, 7.5 rebotes y 4.2 asistencias. Pero en el equipo de Jason Kidd deberá acoplarse a que los líderes son Anthony Davis y Kyrie Irving, cuando el base esté en condiciones de regresar.
Si Flagg entiende su rol y no busca, por ejemplo, destacarse como el mejor rookie de la temporada, será una pieza clave para que los Mavericks regresen a los playoffs y sean contendientes al título. --Pablo Cormick
4- La peor versión de Cooper Flagg en la temporada de 2025-26 sería…
Para los fanáticos de Dallas, que no cumpla expectativas inmediatamente. Flagg es un talento generacional, pero es muy joven y le queda mucho por aprender. Mucha gente puede exigir que sea el salvador de los Mavericks esta temporada, pero dependerá de la gerencia y la dirección como lo puedan llevar y como responda el chico. Hay que considerar que tendrá todavía 18 años cuando comience la temporada y que contrario a Luka Doncic, que estaba acostumbrado a jugar con profesionales en Europa, este viene de una temporada en la NCAA.
Cualquier cosa que no sea ganar el premio de Novato del año pudiera ser considerada como una temporada por debajo de las expectativas, como ocurrió con Cade Cunningham en 2021-22. Pero una mala versión podría ser algo que se acerque más a las historias de terror de muchos primeros picks, como Markelle Fultz o Anthony Bennett y que se aleje de las de éxito al estilo de Victor Wembanyama, Anthony Edwards y Karl Anthony Towns, por mencionar a algunos de la pasada década. --Hiram Martínez
5- ¿Puede ser factor la edad de Cooper Flagg jugarle en contra en su desarrollo?
Con tan solo 18 años, Cooper Flagg llega a la NBA para jugar en un equipo con aspiraciones y también necesidades de ganar un campeonato. La de levantar el trofeo Larry O’Brien por segunda vez en la historia de la franquicia, es la gran apuesta del GM Nico Harrison. Y también la obligación que le imponen los fanáticos para perdonar al “villano” que expulsó de la casa a Luka Doncic.
Analizando la situación del novato, jugar en un contendiente puede verse como un arma de doble filo. Por un lado, puede ser beneficioso porque Flagg no tendrá que cargar con el peso del equipo. Pero por el otro, esta joven estrella de 18 años no tendrá el crédito para equivocarse tomando malas decisiones como sí lo tendría en un equipo que no fuera candidato.
A no confundirse. Talento es lo que le sobra, pero si comete errores en partidos de playoffs con Dallas, sus minutos en cancha pueden reducirse y con ello, su evolución y crecimiento se retrasarían irremediablemente. Pero por el lado positivo, hay que reconocer que también tendrá estrellas de las que aprender lo que significa jugar en un contendiente, lo difícil que es pelear por ganar un título y, fundamentalmente, que los errores se pagan caro cuando existe la obligación de ganar.
Dicho de otra manera, su crecimiento va a tener que ser partido a partido y no temporada tras temporada. Una presión que no cualquier chico de 18 años puede cargar sobre sus espaldas. --Marcelo Bousquet