Gordon Hayward dijo que está manejando el dolor de espalda que estaba "empeorando progresivamente", mientras el delantero de los Boston Celtics se prepara para el primer partido de la temporada regular la próxima semana.
Hayward, quien no jugó en la final de pretemporada del sábado contra los Cleveland Cavaliers, dijo a los reporteros el miércoles que su espalda lo había molestado en el pasado, pero que se recuperaría rápidamente.
Esta vez, el dolor persistió, dijo Hayward.
"Eso es lo que me hizo sentir que necesitaba volver a marcar un poco", dijo Hayward. "En el pasado, me molestaba, pero siempre se calmaba y estaba bien con los tratamientos y esas cosas. Pero esta vez estaba empeorando, especialmente después de jugar".
Hayward espera estar en la cancha el martes contra los Philadelphia 76ers, pero el jugador de 28 años entiende que le llevará algún tiempo regresar con toda su fuerza luego de perderse todos los partidos menos uno de la temporada 2017-18.
"Descubrí que va a ser un proceso porque no jugaré durante tanto tiempo", dijo Hayward. "El resto de mi cuerpo tiene que reajustarse a jugar".
Hayward se rompió la tibia de la pierna izquierda y se dislocó el tobillo el 17 de octubre de 2017, y se perdió el resto de la temporada. Una cirugía adicional en mayo para remover un plato y tornillos retrasó su preparación en la temporada baja.
La semana pasada, le dijo a Zach Lowe de ESPN que la demora afectó la forma en que se siente antes del inicio de la temporada.
"Físicamente, me siento bastante bien", le dijo Hayward a Lowe. "Pero todavía no me siento cómodo en la duela. Una cosa es poder hacer todo físicamente. Otra es ser un jugador de baloncesto en tiempo y ritmos".
Hayward jugó en tres de los cuatro partidos de pretemporada de los Celtics, registrando 19.7 minutos por encuentro.