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Extrañarán Warriors el Oracle Arena, sede de sus éxitos

OAKLAND -- Ahora sí es oficial: Llegó el momento de decir adiós a la que ha sido la casa de los Golden State Warriors durante 47 temporadas y en la que se disputaron Finales cinco años consecutivos.

La Oracle Arena recibirá el Juego 6 de las Finales NBA este jueves, lo que marcará el último partido oficial de los Warriors, antes de mudarse al otro lado de La Bahía, al Chase Center, a partir de la próxima temporada.

“Este ha sido el lugar de un increíble ambiente en el que ser entrenador o jugador ha sido una de las más grandes experiencias", dijo el entrenador de los Warriors, Steve Kerr. "Incluso cuando los Warriors no eran buenos, venir aquí como visitante y sentir la energía en este edificio, hacía que te dieras cuenta de que los aficionados amaban este deporte".

"El ambiente, el ruido y la energía durante estos cinco años en que nuestro equipo creció se combinó con la energía orgánica que este lugar siempre ha tenido", añadió. "Simplemente, ha sido una experiencia increíble ser el entrenador aquí".

Para los seguidores de los Warriors, despedir su arena en un sexto juego de las Finales NBA y con la oportunidad de empatar una serie que parecía perdida, en la que durante los Juegos 3 y 4, fueron avasallados por el rival, será una gran anécdota.

Pero puede salir demasiado cara.

Los asientos a nivel cancha, cerca de donde Stephen Curry tiene la costumbre de entrenar sus disparos de tres puntos brincando fueron vendidos en 48 mil 422 dólares, de acuerdo a un reporte del San Francisco Chronicle, citando como fuente a Ticketmaster.

La empresa revendora Stubhub.com ofrecía boletos este miércoles por la tarde entre 626 dólares y casi 10 mil para la despedida del Oracle Arena, a donde se mudaron los Warriors en 1971 y en la que han ganado cuatro de los cinco campeonatos que cuentan en su historia.

"MI recuerdo favorito fue ganar las Finales de la Conferencia Oeste en el 2015", mencionó Kerr. "Vencimos a Houston en el Juego 5 para avanzar a las Finales. Fue surreal. No estábamos seguros de que éramos suficientemente buenos para hacerlo. Y los aficionados no habían visto mucho de eso en 40 años. Así que para mi fue donde todo esto comenzó hacia las cinco Finales consecutivas que hemos jugado aquí".