NEW ORLEANS -- Steve Kerr sabe que su equipo necesita una sacudida luego de un lento inicio de temporada regular, pero el veterano coach de los Golden State Warriors no quiere que su estrella, Stephen Curry, cambien su estilo de juego en el intento.
Cuando se le preguntó el lunes, antes de la victoria por 134-123 sobre los New Orleans Pelicans, si le gustaría ver a Curry intentar más triples para reanimar a la ofensiva de los Warriors, Kerr dijo que no creía que eso pudiera funcionar por la forma en que su equipo juega.
“No creo que sea así de simple. Podríamos convertirlo (a Curry) en un James Harden y darle el balón en cada jugada. Es algo realmente difícil de hacer y debes construir un equipo para ese fin”, señaló Kerr. “Houston ha puesto a cinco tiradores en la duela por años con Harden para darle espacio. Nosotros no tenemos esa clase de personal, así que no se tiene el mismo espacio y esa clase de basquetbol te agota, especialmente a un tipo de 180 libras como Steph.
“Por eso no creo que la respuesta sea sólo ejecutar un millón de pantallas. Realmente no tenemos los jugadores para eso y no creo que tenga mucho sentido para Steph”, agregó.
Los Warriors necesitaron hacer más cambios tras iniciar el calendario regular con dos derrotas y en las que fueron humillados por los LA Clippers y los Oklahoma City Thunder, pero Kerr considera que su equipo tendrá mejor desempeño conforme el joven grupo de jugadores se conozca mejor. También tiene confianza en que, junto a su staff de coacheo, encontrará formas de poner a Curry en mejor posición para anotar.
Curry llegó al juego ante los Pelicans con 15 aciertos en 38 tiros de campo y falto de ritmo.
“Lo que tenemos que averiguar es cómo podemos dejarlo libre y eso es lo que exploramos diariamente (…), Intentamos crear espacios, intentamos crear penetraciones, tener perfiles de tiro limpios y ritmo ofensivo dentro de todo eso. Ese es el reto y es lo que intentamos”, señaló Kerr.
Sin Kevin Durant ni Klay Thompson a su lado, Curry enfrenta un tipo distinto de defensiva en la actual temporada, luego de que los Clippers y el Thunder mantuvieron a un defensivo sobre él con marca personal todo el tiempo.
Pese a los contratiempos al inicio de la campaña, Kerr elogió a Curry y al veterano Draymond Green por la forma en que han enfrentado la adversidad.
“Ambos son muy pacientes con los jóvenes, adoptan el rol de mentores, jalan a los jóvenes en las prácticas y en las sesiones de video y hablan con ellos, así que ha sido algo realmente bueno, pero es frustrante”, señaló Kerr. “Estos jugadores no están acostumbrados a perder y el primer par de juegos han sido bastante duros, así que lo manejan lo mejor posible, pero no lo disfrutan. Nadie lo disfruta”.
A su vez, Curry permanence optimista de que el grupo entrará en ritmo pronto y como el resto de sus compañeros, considera que una mejor defensiva provocará mejores movimientos a la ofensiva.
“Honestamente, no puedo ni siquiera juzgar a nuestra ofensiva, porque estamos sacando el balón de la canasta en cada posesión y dándoles (a los rivales) intentos de tiros libre y cosas así”, dijo Curry luego de la derrota ante el Thunder. “Hemos fallado mucho de ese lado de la duela, así que es realmente difícil analizar lo que hemos hecho ofensivamente, porque no hemos podido llegar a situaciones de transición y el juego no está en nuestro ritmo, así que, el jurado aún delibera al respecto”.
Kerr y Curry tienen la esperanza de que D’Angelo Russell comenzará a jugar mejor y le quitará parte de la carga ofensiva a Curry.
Mientras tanto, Kerr intenta mantener el sentido del humor al tiempo que continúa en búsqueda de formas que hagan que el par de jugadores tenga mejor desempeño.
“Sería agradable estar una vez arriba en el marcador. Creo que aún no hemos tenido ventaja en el marcador aún, así que debemos tener una en el tercer juego del año, en algún momento. Ojalá al final del partido”, concluyó Kerr.