Los San Antonio Spurs darán la bienvenida de regreso a los aficionados para sus juegos el 12 de marzo, lo que significa que la mitad de la NBA tiene el plan de permitir asistencia limitada a sus arenas, un año después de que la liga detuvo operaciones por la pandemia por el coronavirus.
Los Boston Celtics tienen el plan de permitir la entrada a sus aficionados a partir del 22 de marzo.
La capacidad reducida de los Spurs en el AT&T Center será de 3,200 aficionados para permitir el distanciamiento social, informó el equipo.
Actualmente, 14 equipos ya permiten el ingreso de los aficionados a sus juegos. Los Atlanta Hawks, Brooklyn Nets, Cleveland Cavaliers, Dallas Mavericks, Houston Rockets, Indiana Pacers, Memphis Grizzlies, Miami Heat, Milwaukee Bucks, New Orleans Pelicans, New York Knicks, Orlando Magic, Phoenix Suns y Utah Jazz juegan ante asistencia reducida en sus arenas.
En cuanto a otros equipos que aún no dan luz verde a sus aficionados, varios factores han influido en su decisión, incluidos los protocolos y regulaciones de los gobiernos locales, el costo para equipar las arenas con las provisiones propias de salud para sólo unos cuantos juegos y la potencial tensión que podría crearse entre aficionados por la obligatoriedad del uso de los cubrebocas y reglas de distanciamiento.
La mayoría de los equipos han emitido comunicados en los que indican que planean trabajar con autoridades estatales y locales en algún momento para permitir el ingreso de los aficionados en la actual temporada.
Los equipos que ya permiten la asistencia de los aficionados exigen cumplir con protocolos como usar el cubrebocas en cualquier momento, a excepción de cuando se come o bebe, distanciarse socialmente, registros de temperatura, boletos virtuales, mejoramiento en la limpieza de superficies, además de sistemas de purificación y filtración de aire, entre otras reglas.