El antesalista de 21 años sigue siendo uno de los peloteros más seguidos del equipo, pero sus resultados en el terreno colocan en duda si ocupará el sitial de cara de la organización.
Es importante iniciar diciendo que Junior Caminero, tercera base de los Tampa Bay Rays, es probablemente, uno de los jugadores más excitantes con los que cuenta el béisbol en estos momentos. Su pasión por el juego, así como algunos momentos que ha creado dentro y fuera del béisbol de los Estados Unidos, lo convierten en un atractivo que cada vez que está en pantalla, se hace imposible de ignorar.
Esa característica es esencial para un equipo que busca un rostro, una nueva identidad, especialmente en el caso de los Rays que su más reciente intento, Wander Franco, está en medio de procesos judiciales en su natal República Dominicana y hasta ahora no existe la más mínima seguridad de que podrá volverse a uniformar en Grandes Ligas.
Como pelotero profesional, Caminero marca todas las casillas correctas para atraer a la gente, para entretener, para detenerse a ver sus turnos o sus jugadas, eso es algo que no se encuentra todos los días y en el caso de un deporte como el béisbol, algo que se necesita con carácter de urgencia para atraer a más fanáticos jóvenes. Sin embargo, hasta este momento, el rendimiento demostrado en el terreno de juego por Caminero no es el de un futuro rostro de franquicia.
Caminero llegó a Grandes Ligas en 2023, pero por la poca cantidad de partidos disputados y turnos tomados, retuvo su condición de novato para 2024, siendo ubicado como el prospecto número 4 de MLB previo al inicio de la pasada temporada. “La Máxima” mostró, por momentos, algunas de sus herramientas, pero por la poca cantidad de juego, nuevamente, no fue demasiado lo que pudo presenciarse.
En 2025 inició el año como el tercera base titular de los Rays y los resultados han estado por debajo de lo esperado. Además de que defensivamente ha dado un paso hacia atrás, lo que queda demostrado con su DRS (carreras defensivas salvadas) de -7, sino que ofensivamente, a pesar de ya tener marcas personales en algunos departamentos, sus números han sido pobres.
Tomando en cuenta toda la carrera en MLB de Caminero, en 95 juegos batea para promedio de .239 con OPS de .686, OPS+ de 94, 15 jonrones y 45 remolcadas. Su WAR de carrera es tan solo 0.3 y su proporción de ponches por cada base por bola es de 4 a 1 en este momento.
Obviamente, la muestra no es tan grande como se podría desear y con tan solo 21 años, Caminero tiene mucho espacio para crecer, pero al comparar con otras estrellas del equipo a esa misma edad o similar, la diferencia es notoria.
Comparemos con el propio Franco, por ser jugadores de la misma organización. En sus primeros 95 partidos, Franco bateó para promedio de .302 y OPS de .833 con 13 cuadrangulares, 57 remolcadas y 73 anotadas. Evan Longoria, quien anunció su retiro recientemente, bateó para .278 con OPS de .878, 19 vuelacercas y 61 impulsadas, mientras que anotó 51 veces.
Nuevamente, resulta importante destacar que con 21 años, es mucho lo que a Caminero le falta por crecer como pelotero, pero visto el desempeño hasta el momento, la pregunta resulta válida: ¿sigue siendo la promesa para un nuevo rostro para los Rays?