SAN LUIS -- Los Dodgers de Los Ángeles llegaron a San Luis para una serie de cuatro juegos, con la esperanza de enderezar el camino a playoffs y con la necesidad de que sus jugadores estelares se calienten en el momento justo. Con tres jonrones el sábado y cinco en dos días, Yasiel Puig se ha movido más allá del territorio caliente.
Puig produjo siete carreras --récord personal-- en una victoria de 17-4 sobre los Cardenales de San Luis, mientras disfrutaba el primer juego de tres jonrones en su carrera. Fue una continuación impresionante de lo sucedido el viernes, cuando conectó dos jonrones contra los mismo Cardenales.
''Me siento bien en el plato'', dijo Puig. ''Intento buscar buenos lanzamientos para batear y tratar de poner la pelota en el aire, como mis compañeros de equipo y mis entrenadores me dijeron. Me dijeron que tenía que dejar de pegar rolas al cuadro''.
Con la victoria, los Dodgers avanzaron un juego por delante de los Cardenales en el segundo puesto de comodines en la Liga Nacional. Los Ángeles se ha llevado los primeros tres juegos de la serie, que acaba el domingo.
Los Dodgers también empataron momentáneamente el liderato en la División Oeste de la Liga Nacional con los Colorado Rockies, que jugaban más tarde el sábado en San Francisco. Luego de un año de sorprendentes altibajos, los Dodgers se ven como un equipo que se une en el momento justo.
''Sabemos que tenemos talento'', dijo el manager Dave Roberts. ''Uno ve a los muchachos echándose vibra unos a otros. Parte de lo que te gusta de esto es cómo competir y ser parte de algo. Entendemos su importancia. Puedes ver a nuestros muchachos pasando un buen rato con eso''.
Puig se aseguró de eso, mostrando su lado tierno al besar al coach de bateo Turner Ward en la mejilla, después de abrir la cuarta entrada con un jonrón, cuando los Dodgers construyeron una temprana ventaja de 3-0.
Esa buena vibra desapareció con un swing al bate de Patrick Wisdom, quien ante el abridor Rich Hill vació las bases en el cuarto episodio al pegar un grand slam, dando a San Luis una ventaja de 4-3 e inyectando vida ante un lleno completo en el Busch Stadium.
''Hice demasiados lanzamientos malos en fila'', dijo Hill. ''Pero nosotros estamos haciendo swings en el momento adecuado. Lo que Yasi hizo anoche (viernes) y hoy (sábado), y la forma en que la ofensiva ha dado la vuelta, ha sido enorme''.
Los Dodgers no se quedaron atrás por mucho tiempo: L.A. anotó 14 carreras sin respuesta, incluyendo cinco en la mitad de la entrada después del grand slam de Wisdom. Ese ataque fue coronado por un rayo láser, un cohete de tres carreras de Puig. Según Statcast, la bola salió disparada del bate de Puig a 114.7 millas por hora, la velocidad de salida más rápida para cualquier jugador de Dodgers esta temporada.
Y la diversión del dugout continuó, con Ward besando a Puig en la mejilla.
Para cuando Puig conectó su tercer jonrón, la victoria estaba encendida. Pegó un batazo por el prado izquierdo en el octavo, para su segundo cuadrangular de tres carreras del día.
¿Y la celebración? Puig quería un beso en los labios, pero cuando Ward lo iba a hacer, puso su mano entre sus bocas.
''Eso es demasiado''.
Puig ahora tiene seis jonrones en septiembre y 21 en la temporada. En sus últimos tres juegos de titular, batea de 12-9. Candente. No podría haber llegado en un mejor momento.
''Jugamos duro todos los días, porque queremos volver a los playoffs todos los años'', dijo Puig. '' [Queremos] ganar el Oeste por sexta vez consecutiva. Necesitamos jugar como un equipo, como una familia, jugar duro todos los días y en cada pitcheada''.
Con 17 carreras en la pizarra, obviamente la actuación de los Dodgers no fue solo en solitario de Puig. Su compañero de equipo, Cody Bellinger, impulsó seis carreras --la más alta de su carrera--, y ni siquiera fue la más alta del equipo. Podría ser un signo de lo que vendrá.
''[Puig] es ejemplar'', dijo Bellinger. ''Creo que ha estado muy cerca de hacer lo que sabe que puede hacer. Va a ser bastante aterrador''.