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CLEVELAND -- El abridor de la Liga Americana en el Juego de Estrellas, Justin Verlander, dijo a ESPN que las pelotas usadas en los juegos de Grandes Ligas en la actual temporadas son “una pu** broma” y que cree al “100 por ciento” que la liga comenzó el uso de pelotas alteradas para aumentar la producción ofensiva. Verlander, de 36 años, es el pitcher que ha permitido más jonrones en la actual temporada con 26. En general, se han conectado 3,691 cuadrangulares en la primera mitad de la campaña, cifra que está en ritmo de llegar a 6,668 vuelacercas, total que destrozaría el récord de 6,105 impuesta en 2017. Las sospechas sobre la pelota altera han aumentado desde después de la pausa del Juego de Estrellas en 2015, tras la cual se disparó el total de jonrones, los cuales están cerca del 60 por ciento arriba del total de 2014. El comisionado Rob Manfred ordenó una investigación para determinar si las pelotas contribuían al alza en cuadrangulares y ésta concluyó que las pelotas se desempeñaban de forma diferente, pero sin atribuir una razón. En junio de 2018, un mes después de que el estudio fue publicado, GL compró a la empresa Rawlings, proveedora de la pelota oficial de Grandes Ligas. “Es una pu** broma”, dijo Verlander, ocho veces seleccionado al Salón de la Fama y quien abrirá su segundo clásico de mitad de temporada el martes. “Las Grandes Ligas están convirtiendo este deporte en una broma. Son dueños de Rawlings y tienes a Manfred diciendo que quizá sea por la forma en que centran el núcleo (de la pelota). “Son dueños de la pu** compañía. Si otra empresa de $40 mil milones compra a una de $400 millones y el producto cambiara dramáticamente, no es difícil adivinar por qué sucedería. Todos sabemos lo que pasó. La primera vez que Manfred habló (como comisionado), ¿qué dijo? Dijo que quería más ofensiva. De repente, ¿llega y las pelotas están alteradas? “No es coincidencia. No somos idiotas”, acusó el lanzador de los Houston Astros. Al ser cuestionado si creía que las pelotas eran alteradas intencionalmente por la liga, Verlander no dudó en responder. “Sí. Al 100 por ciento. Siempre han usado pelotas alteradas en el Derby de Cuadrangulares. Saben cómo hacerlo. No es coincidencia. Realmente me cuesta trabajo creer que las Grandes Ligas sean dueñas de Rawlings y, coincidentemente, las Pelotas se alteran”, señaló. Manfred, quien se convirtió en comisionado en 2015, reconoció la diferencia en las pelotas el lunes en el programa Golic and Wingo de ESPN, pero negó cualquier involucramiento de de la liga en la composición de la bola. “Creemos que lo que ha sucedido este año es atribuible al beisbol. Nuestros científicos que han estudiado la pelota con más regularidad, nos dicen que que este año, la pelota tiene menos resistencia”, explicó Manfred en Golic and Wingo. “No necesita cambiar mucho para producir un cambio importante en términos de la forma en que el beisbol se juega en el campo. Intentamos entender exactamente por qué esto ha sucedido (el aumento de jonrones) y crear un proceso de manufacturación que nos dé más control sobre lo que sucede.  “Debemos recordar que nuestra pelota de beisbol es un producto hecho a mano y que habrá variaciones año con año”, agregó el comisionado. Los pitchers en particular se han expresado en la actual temporada sobre los cambis en la pelota al hablar de las costuras, la piel, el tamaño y cómo se siente más dura. “Uno podría estampar el nombre de Titleis en estas cosas”, dijo Joe Maddon, manager de los Chicago Cubs, al hablar sobre la pelota este fin de semana, en relación a la marca de pelota que se usa en el golf profesional. “Odio la forma en que me siento en la loma”, dijo Verlander a ESPN. “No importa quién sea el bateador. Siento que, constantemente, camino en la cuerda floja, porque cualquier bateador puede batear al lado opuesto, cualquier bateador puede batear cualquier lanzamiento en cualquier zona. Ha habido varas veces este año en las que, hace cinco años, probablemente lanzaría una recta abierta. Ya no puedo, porque tienes a un octavo, noveno bateador que puede conectar un jornón al jardín opuesto”. J.D. Martinez, quien también estará en el Juego de Estrellas, considera que un cambio en el estilo de los bateadores merece crédito por el alza en los jornones. Así como la velocidad de los pitchers aumentó, señaló, su control sobre los lanzamientos disminuyó y la explosión en el conocimiento de los bateadores inclinó la balanza en su favor. “Es una liga de poder en el brazo. Te dan una base por bolas o te ponchas, se trata de repertorio por encima del control”, señaló Martínez. “Se ven más errores encima de home. La velocidad, los bateadores intentando poner la pelota en el aire. Eso es una receta para cuadrangulares”. El debate sobre la pelota alterada en los juegos regularmente se divide en dos caminos entre pitchers que lamentan el aumento de cuadrangulares y los bateadores que se benefician del mismo. Marcus Stroman, pitcher de los Toronto Blue Jays, no quiso señalar explícitamente que la pelota sea diferente, pero fue claro en hacer eco del sentimiento de sus colegas lanzadores. “Estoy de acuerdo con algunas opiniones de Justin, de CC Sabathia”, señaló Stroman. “Estaré de acuerdo con todos ellos. Le daré retuit a lo que sea que publiquen. Es claro. Me he adaptado. Así es esto. Uno no puede controlarlo, así que, ¿para qué pensar siquiera en ello?”. Para Verlander, es sólo cuestión de no sólo cómo la pelota le ha afectado personalmente al mostrar una ampolla en el dedo pulgar que, dijo, es algo que sólo le había sucedido en 2017 y 2019, las dos temporadas en las que se cuestionó a la bola, sino por lo que significa para el beisbol en general. “No sé si sea bueno o malo para. Que ellos lo decidan”, señaló Verlander. “No creo que sea grandioso, que los verdaderos resultados de los ponches, cuadrangulares y bases por bolas sea lo mejor para el deporte. “Hablo mucho sobre el tiempo, ¿cómo te verá la historia? Si vas a cambiar algo tan drásticamente, realmente creo que necesitas que la gente lo sepa”, finalizó Verlander.
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