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Carlos Beltrán, listo para reescribir historia de Mets

NUEVA YORK -- Carlos Beltrán no necesitaba ni estaba buscando otro trabajo. Su ilustre carrera de dos décadas en Grandes Ligas, siendo nombrado nueve veces Todo Estrella y habiendo ganado tres Guantes de Oro, dos Bates de Plata y un anillo de Serie Mundial, lo vio devengar un salario de más de $200 millones de dólares.

Desde su retiro como pelotero profesional hace dos años, Beltrán estaba disfrutando de su nuevo rol como asesor especial de los New York Yankees, trabajando en el desarrollo de peloteros jóvenes, y dedicándoles más tiempo a su esposa Jessica y a sus tres hijos, al igual que a su Academia de Béisbol en Puerto Rico.

Es así como haber aceptado la oportunidad de guiar a los controversiales New York Mets dice mucho sobre su compromiso con el desafío que está dispuesto a asumir con su ex equipo.

“El mejor pelotero que he sido, eso fue aquí con los Mets, y estoy listo para reescribir nuestra historia”, explicó Beltrán tras ser anunciado como el primer mánager latino entre los cuatro equipos deportivos principales de la Ciudad de Nueva York la tarde del lunes en Citi Field.

“Es una bendición el momento que estamos viviendo como familia, estar de vuelta aquí en los New York Mets, una plataforma tan especial como Nueva York, es un privilegio y lo aceptamos con mucha humildad; estamos preparados para lo que viene”, agregó Beltrán en un aparte con ESPN.

No cabe duda que Beltrán buscará reescribir el último capítulo de su carrera con los Mets, la cual no finalizó en los mejores términos en 2011. Beltrán firmó un acuerdo de $119 millones en enero de 2005, el cual para aquel entonces había sido el contrato más lucrativo en la historia de la franquicia neoyorquina.

El ex jardinero puertorriqueño vistió el uniforme metropolitano por seis temporadas y media, donde tras sufrir varias lesiones se creó un alto nivel de tensión con la gerencia principal. Eso llevó incluso al propietario mayoritario, Fred Wilpon, a criticarlo abiertamente antes de ser canjeado en 2011, diciendo que era el “65 ó 70 por ciento del jugador que alguna vez fue”.

Beltrán dejó muy claro el lunes que ese tema jamás surgió durante el proceso de entrevista, el cual duró cerca de un mes después del despido de Mickey Callaway.

“Es algo que sinceramente ni siquiera discutimos”, explicó Beltrán. “Todo eso está en el pasado. No estaría parado aquí si todo no estuviera muy claro con la organización. Me siento muy emocionado de estar de regreso y no puedes progresar en la vida si estás pensando en el pasado. Tienes que vivir en el presente”.

Los Mets optaron por contratar a Beltrán, sin importar su falta de experiencia, por encima de candidatos más experimentados como Joe Girardi, recientemente nombrado como nuevo dirigente de los Philadelphia Phillies. El gerente general Brodie Van Wagenen explicó que su contratación fue más allá de comparar cualidades con los demás candidatos.

“Consideramos a todos los candidatos y sus fortalezas, y finalmente fueron las fortalezas de Carlos las que sobresalieron. No fue sobre en qué otros candidatos se quedaron cortos y mucho más específicamente sobre lo que el liderazgo de Carlos aporta a nuestro equipo”, explicó Van Wagenen.

“Carlos no necesitaba un trabajo. Carlos no quería un trabajo. Él quería este trabajo”, continuó el ejecutivo neoyorquino. “Él tiene una apreciación y comprensión inigualables de lo que es ser pelotero y es un gran comunicador. En medio de las más altas expectativas y la presión más intensa en el béisbol, Carlos ha sido un ganador. Su compromiso es ganar campeonatos. Carlos es un ganador”.

Beltrán siempre fue un pelotero muy popular y reconocido por su liderazgo dentro y fuera del camerino, ganándose profundo respeto a través de todo el béisbol. Siempre fue un ejemplo a seguir para muchas de las jóvenes estrellas en el béisbol, y en particular en los Houston Astros en 2017, contribuyendo a conquistar el primer campeonato en la historia de la franquicia.

Tras la contratación de Beltrán, por primera vez en la historia habrá cuatro dirigentes de raíces puertorriqueñas activos en Grandes Ligas, los últimos dos ganadores de la Serie Mundial, Alex Cora con los Boston Red Sox y Dave Martínez con los Washington Nationals, además de Charlie Montoyo con los Toronto Blue Jays.

Tener una nueva oportunidad de poner en alto el nombre de Puerto Rico, como una vez lo hizo el inmortal Roberto Clemente, es un desafío que Beltrán se siente orgulloso de asumir.

“Es un momento muy bonito y de mucha historia para Puerto Rico y me siento muy orgulloso de ser parte de esto”, explicó. “Yo lo veo como una oportunidad que uno puede aportar y que uno puede cambiar ciertas cosas y cambiar la historia y convertirnos en ganadores. Es bien emocionante. Ahora nos toca seguir haciendo las cosas bien”.

“Muchas personas jamás tienen oportunidades como ésta y quiero ser un buen compañero de equipo y establecer relaciones personales de una manera positiva”, continuó Beltrán. “Fue una decisión que tomamos en conjunto, como familia, y me siento muy orgulloso de esta oportunidad. Fue una gran oportunidad, la cual surgió, y entonces, ¿por qué no?”.