Esta será la fecha límite de intercambios más impredecible que jamás hayamos visto. Mi colega Brad Doolittle acaba de hacer un gran trabajo describiendo los problemas que enfrentan los equipos en esta fecha límite, junto con una mirada posición por posición sobre quién podría estar disponible y qué equipos tienen huecos que llenar.
Un factor importante aparte de los problemas de flujo de efectivo que existen en 2020 y los playoffs ampliados que mantienen a más equipos en la carrera es que solo los jugadores del grupo de 60 jugadores de cada equipo pueden ser intercambiados, por lo que los lanzadores de Clase A que a menudo se intercambian por relevistas establecidos no serán elegibles.
Con eso en mente, aquí hay cinco preguntas principales que darán forma a lo que podría suceder el 31 de agosto:
¿Implotarán por completo los Red Sox... e incluso considerarán intercambiar a Xander Bogaerts?
Chaim Bloom y el resto de la oficina central de Boston tienen que realizar una autoevaluación seria durante los próximos 10 días. Dado el comienzo absolutamente espantoso de la temporada de los Medias Rojas, ¿qué tan lejos de competir está este equipo? Por muy malas que estén las cosas, debes tener cuidado:
1. Es malo, pero son solo 26 juegos.
2. Está bien, son malos, pero vamos, son más como un equipo de .400, no como un equipo de .280.
3. Van a recuperar a Chris Sale en algún momento de la próxima temporada; con suerte, Eduardo Rodríguez estará autorizado para lanzar; podrían fichar a un par de agentes libres y ser competitivos en 2021.
Por otro lado, toda la idea detrás del cambio de Mookie Betts no fue solo para recortar la nómina, sino también para comenzar a construir un roster y un sistema de fincas más profundo, similar a cómo operan los Rays y los Dodgers, pero complementando eso con el poder financiero de los Dodgers. Entonces Bloom podría intentar cambiar a los agentes libres pendientes Jackie Bradley Jr., Kevin Pillar y Brandon Workman, junto con JD Martínez, Matt Barnes, Heath Hembree y Mitch Moreland.
El escenario más interesante, sin embargo, involucra a Bogaerts. Firmó un contrato a largo plazo hasta 2025 con una opción para el 2026, pero como señaló Ken Rosenthal del Athletic, Bogaerts tiene un par de cláusulas interesantes en su contrato. Primero, tendrá una cláusula completa de no cambio una vez que cumpla siete años de tiempo de servicio, lo que ocurrirá el 6 de septiembre. También puede optar por salirse del contrato después de 2022, y dado que su acuerdo se considera por debajo del valor de mercado, al menos según su valor de la temporada 2019, esa es una posibilidad clara (a diferencia de Martínez, quien tiene una cláusula de salida después de esta temporada, pero ha tenido problemas desde el principio).
Entonces, si los Medias Rojas estarán en modo de reconstrucción durante los próximos años, tal vez intenten sacar provecho de Bogaerts. Las probabilidades son escasas, e incluso si eso es lo que se piensa, es más probable que ese intercambio ocurra en la temporada baja, cuando se abra el grupo de prospectos de cada equipo. También vale la pena señalar que todos los mejores equipos tienen su plaza de campocorto ya cubierta, aunque tal vez un equipo como los Bravos podría cambiar a algunos de sus lanzadores jóvenes y a un jardinero como Drew Waters para que Bogaerts juegue en la tercera base. En pocas palabras: si tenemos una fecha límite de intercambio activa, probablemente sea porque Bloom esté ocupado manejando y negociando.
¿Qué harán los Braves?
De los líderes de división actuales, los Braves son el equipo con los huecos más grandes que llenar. Con Mike Soroka fuera por toda la temporada y Cole Hamels lesionado, la rotación aparte de Max Fried ha tenido problemas. Los jóvenes Kyle Wright y Touki Toussaint han tenido problemas para lanzar strikes, Sean Newcomb fue devuelto al lugar alternativo de entrenamiento y ahora movieron al veterano Josh Tomlin a la rotación. También han tenido problemas en la tercera base, donde el poderoso Austin Riley está promediando .167 y sigue teniendo problemas de contacto, y el utility Johan Camargo está bateando .192 con sus propios problemas de ponches. El jardinero central Ender Inciarte también ha tenido problemas en el plato y Nick Markakis está en cuarentena. (El cotizado prospecto Cristian Pache acaba de ser convocado y podría desplazar a Inciarte en el jardín central).
De todos modos, los Braves tienen huecos y jugadores jóvenes para intercambiar. Por supuesto, no es realmente la forma de operar de los Braves el agregar nómina o canjear jugadores jóvenes, y probablemente puedan ganar la División Este de la Liga Nacional con el roster actual. Además, la lista de posibles lanzadores abridores disponibles es... no muy buena. ¿Mike Minor? Ha tenido un mal comienzo. ¿Johnny Cueto? Ganará $21.8 millones de dólares la próxima temporada. ¿Jeff Samardzija o Kevin Gausman? Trevor Bauer sería una buena opción, pero con los playoffs ampliados, es poco probable que los Rojos se rindan temprano.
Entonces, tal vez los Braves tengan que pensar en superar a sus oponentes a fuerza de batazos. Kyle Seager está bateando .301/.391/.548 para los Mariners, juega una sólida tercera base y le daría a los Braves otro bate zurdo para ayudar a equilibrar la alineación. El problema es que ganará $18.5 millones el próximo año, no es oneroso, pero estos son los Braves. Los Mariners podrían endulzar la oferta con Taijuan Walker o aportar algo de dinero.
¿Harán los Dodgers un gran movimiento?
En temporadas recientes, los Dodgers han estado activos alrededor de la fecha límite de cambios. En 2016, adquirieron a Rich Hill y Josh Reddick de los Atléticos (e intercambiaron un prospecto poco conocido llamado Yordan Alvarez por el relevista Josh Fields). En 2017, fue Yu Darvish, más un par de relevistas. En 2018, Manny Machado sustituyó al lesionado Corey Seager, además de Brian Dozier y David Freese. El año pasado, estuvieron un poco más tranquilos, agregando un par de piezas de repuesto en Jedd Gyorko y Adam Kolarek , pero principalmente confiando en los ascensos de los novatos Will Smith y Gavin Lux como las principales incorporaciones. Tal vez las cosas hubieran sido diferentes si Dave Roberts hubiera usado a Kolarek para enfrentar a Juan Soto en el Juego 5 de la Serie Divisional en lugar de Clayton Kershaw, ya que Kolarek se había enfrentado a Soto tres veces en la serie y lo consiguió sacar de out las tres veces, incluidos dos ponches.
Los Dodgers están llenos de talento una vez más. La rotación tiene profundidad con Kershaw, Walker Buehler, Julio Urías, Dustin May y Tony Gonsolin, quien no ha permitido una carrera en tres aperturas. El bullpen luce mucho más profundo y mejor que el del año pasado, cuando la falta de fe de Roberts en sus relevistas lo llevó a usar a Kershaw en relevo ante los Nationals. Ellos tienen a Kolarek, Jake McGee y Caleb Ferguson del lado zurdo, con Kenley Jansen, Blake Treinen, Dylan Floro, Pedro Báez y Brusdar Graterol del lado derecho. En realidad, el mayor problema hasta ahora es Cody Bellinger, Max Muncy y Joc Pederson, los tres grandes bates zurdos de poder, y que todos batean por debajo de los .200. Vas a necesitar a esos tres, aunque los fanáticos de los Dodgers se apresurarán a señalar que Bellinger es un bateador de .178/.234/.326 en la postemporada.
Hablando de los fanáticos de los Dodgers, ¿confían completamente en Jansen, quien tiene efectividad de 0.87 y tiene 7 de 7 en oportunidades de salvamento? No, y no lo van a hacer, al menos no hasta que consiga ese último out en el juego final de una Serie Mundial. Si Mariano Rivera quiere salir de su retiro, tal vez le des el trabajo, pero no veo que los Dodgers consigan en cambio a Workman, Trevor Rosenthal o Ken Giles y confiar en ellos con deberes de cerrador. Este es su equipo, fanáticos de los Dodgers, y todavía parece el mejor equipo del béisbol. No se necesitan adiciones.
¿Harán los Yankees un gran movimiento?
Los Rays acaban de barrer a los Yankees en una serie de tres juegos para ascender a la cima del Este de la LA, incluso con Charlie Morton en la lista de lesionados, Tyler Glasnow sin lanzar tan bien (ERA de 6.00) y Blake Snell promediando menos de cuatro entradas por apertura. Los Yankees no estuvieron con sus fuerzas completas en esta serie, ya que Aaron Judge, DJ LeMahieu y Giancarlo Stanton están lesionados, pero los resultados sugieren que este no va ser un viaje fácil para los Yankees.
Suponiendo que la ofensiva se resuelva por sí sola (los Yankees están empatados en el cuarto lugar en las mayores con 5.40 carreras por juego), las preguntas giran en torneo al cuerpo de lanzadores. James Paxton abrió el jueves, y aunque permitió solo un hit con ocho ponches en cinco entradas, también permitió cuatro bases por bolas y tres carreras, y su efectividad en la temporada es de 6.64. Después de que se sometió a una cirugía de espalda en febrero para reparar una hernia de disco y que le extirparan un quiste, su velocidad se mantiene muy por debajo de la de 2019, con una recta promedio de 92.3 mph en comparación con 95.4. Promedió solo 91.4 contra los Rays, y Aaron Boone anunció después del juego que Paxton se someterá a una resonancia magnética después de sentir molestias en el área del antebrazo/codo. ¿Suena como un lanzador que va a abrir el tercer juego de una serie de playoffs?
El problema es, al igual que con los Braves: ¿Cómo vas a mejorar la rotación? El escenario más probable es que los Yankees busquen agregar profundidad al bullpen y utilizar a los relevistas en los juegos no iniciados por Gerrit Cole o Masahiro Tanaka. Aparte de los relevistas mencionados arriba, otros candidatos a cambios podrían incluir a Mychal Givens, Tony Watson, Chris Stratton, Richard Rodríguez y Ian Kennedy.
¿Qué si los Astros deciden... ser vendedores?
OK, vamos a jugar todos aquí. De acuerdo, esta idea era un poco más plausible antes de la actual racha de ocho victorias de los Astros, pero consideremos:
• Yordan Álvarez está fuera por toda la temporada tras su cirugía de rodilla.
• El cerrador Roberto Osuna está fuera por toda la temporada tras su cirugía Tommy John.
• No hay un calendario para el regreso de Justin Verlander. (Hizo ejercicios de atrapadas el lunes.)
• George Springer, Michael Brantley, Josh Reddick y Yuli Gurriel serán agentes libres luego de esta temporada.
• Verlander, Zack Greinke, Carlos Correa y Lance McCullers Jr. serán agentes libres luego de la temporada 2021.
¿Qué pasaría si los Astros deciden que este no va a ser su año, tienen en cuenta los jugadores que pueden irse, tienen en cuenta el hedor que pesa sobre la organización (lo que hace que sea más probable que esos jugadores se vayan) y deciden hacer algunos movimientos? Es poco probable, y ciertamente si Verlander está sano en octubre, una rotación con Verlander, Greinke, McCullers y José Urquidy (que ha recibido autorización para lanzar, pero todavía está en el sitio de entrenamiento alternativo del equipo) es lo suficientemente bueno para hacer la corrida.