La poca efectividad que ha tenido Contreras en su debut con los Yanquis en las Grandes Ligas obligó a Torre a decidir enviarlo a un equipo del filial de la Triple A en Columbus (Ohio), pero 24 horas después tuvo que rectificar y decir que el desertor cubano iba a incorporarse al centro de entrenamiento del equipo en Tampa (Florida).

El cambio de pensar de Torre no fue suyo sino que llegó obligado por la decisión de Steinbrenner que "personalmente" consideró que Contreras no debía ir al equipo de las ligas menores de Columbus.

Torre admitió que no sabía cual iba a ser el siguiente paso para Contreras, si iba a lanzar con el equipo de la Clase A que tienen en Tampa o participar en el campo de entrenamiento.

"Lo único que se es que la última vez que hable por teléfono con George Steinbrenner me dijo que tomase la decisión que considerara fuese la mejor, pero ahora parece que no es caso", declaró Torre con frustración.

Torre explicó que había recibido una llamada del gerente general, Brian Cashman, el domingo por la mañana para informarle que Contreras no iría a Columbus sino que viajaría hasta Tampa.

"Se el lugar que tengo dentro de la organización y conozco mi trabajo", comentó Torre a varios medios de comunicación locales. "Pero creo que no es el camino más adecuado decirme que tengo la responsabilidad de la decisión y luego ser cierto".

Torre se mostró "ofendido" por la manera como Steinbrenner le quiso enviar el mensaje de quien era el "Boss" dentro de la organización.

"Si Steinbrenner deseaba mandarme un mensaje, creo que podría haberlo hecho cuando hablamos por teléfono y mucho menos que tenga que decirme quien es el jefe porque todos sabemos que es él", señaló el piloto de los Yanquis.

Torre dijo que respetaba la decisión del cambio de lugar para Contreras, que era hecha por Steinbrenner, pero se sentía disgustado porque pensaba que era una responsabilidad del manejador del equipo.

"Mi gran problema fue que 24 horas antes me había sentado en el vestuario con este hombre joven para decirle donde iba a ir a jugar", explicó Torre. "Nada de lo que le dije fue cierto y por lo tanto el que quedó como un mentiroso fui yo y eso es algo que no me hace sentir bien".

Torre destacó que siempre se ha sentido orgulloso de si mismo porque ha tratado de ser lo más honesto posible en todas las decisiones tomadas con los jugadores y cuando eres cuestionado por causa de un problema de comunicación, entonces si es algo serio", subrayó Torre.

El piloto de los Yanquis y Steinbrenner han mantenido siempre una relación de entendimiento y civilizada, especialmente favorecida porque el equipo logró cuatro títulos de la Serie Mundial durante su dirección.

Torre ha sabido llevar mejor que nadie las distracciones de Steinbrenner que sus predecesores a los que el dueño de los Yanquis despidió sin ningún tipo de consideración.

Un directivo del equipo declaró al periódico "The Times Sunday" que Torre había siempre mantenido un grado de calma en medio de cada asunto polémico porque no era la primera vez que Steinbrenner la generaba con sus decisiones.

"No hay nada que me sorprenda con la nueva acción, pero creo que Joe se siente mal el haberle dicho a un profesional una cosa y luego sucede todo lo contrario", declaró la misma fuente, que prefirió quedar en el anonimato.

Torre dijo que iba a intentar ponerse en comunicación con Contreras para explicarle personalmente la nueva decisión, que tal vez ya conocía por la prensa y estaría rompiéndose la cabeza sin entender nada.

Contreras, que desertó el pasado mes de octubre del equipo nacional de Cuba cuando estaban jugando en México el Torneo de las Américas, firmó con los Yanquis un contrato por cuatro temporadas y 32 millones de dólares.

Pero el lanzador derecho, después de una carrera estelar en Cuba, no ha podido demostrar el mismo potencial en su debut en las Grandes Ligas como relevista y Torre lo bajó a las menores para que tuviese más oportunidades de lanzar y adaptarse a la nueva competición.

Contreras tiene marca de 1-0 con 10.80 carreras limpias permitidas en las cinco salidas que ha tenido al montículo con los Yanquis.