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A-Rod, renovado a los 40

La experiencia de cubrir a los Yankees de Nueva York implica la singularidad de atestiguar la evolución de Alex Rodríguez, proceso que tiene como elemento diferenciador el antes y después de su suspensión y admisión de culpa (y disculpa) ante el uso de sustancias para mejorar el rendimiento.

Este Alex Rodríguez versión 2015 es uno muy diferente al de años pasados - más accesible, mucho más balanceado e incluso más maduro.

Sus hijas siguen siendo el epicentro de su vida, al punto de que parecen haberlo hecho una mejor persona. Al lado de Ella y Natasha, A-Rod está muy lejos de ser una súper estrella; da gusto verlo porque es irreconocible, simplemente un papá.

Pero lo más interesante es cuando los demás peloteros me preguntan de este A-Rod renovado, en particular los de raíces dominicanas.

"Después de tantos años en Grandes Ligas, esta temporada es que me vino a saludar", me dijo uno de los compatriotas de A-Rod recientemente. "A la verdad que parece otra persona".

Esa es la realidad.

Y si quieres hablar de béisbol, prepárate porque es hora de dar cátedra. A-Rod te puede hablar por horas de un swing, de un lanzamiento, de una jugada, de un turno o de un juego en particular, con una exactitud asombrosa, sin importar si sucedió ayer o hace dos décadas.

No cabe duda de que cuando se retire del béisbol tendrá que ser entrenador o dueño de un equipo para canalizar todo ese conocimiento.

Es también muy bromista. De hecho, creo que ese es uno de los lados de A-Rod menos conocido.

Entre él y Carlos Beltrán se dedican muchas veces a bromear antes o después de los partidos fuera de casa, en particular cuando llega el momento de contestar preguntas en el récord, lo cual no es su actividad favorita. Sin otra, el reportero asume sus posturas a regañadientes.

Recientemente le pregunté a A-Rod cuál había sido su mayor lección después de "estar en el piso" durante su suspensión, por citar sus propias palabras, y me dijo que la humildad, y que el mayor ejemplo era que hemos tenido más conversaciones este año que en todos los años anteriores combinados.

Cuando hablas con A-Rod es muy difícil saber si lo que está diciendo es mentira o verdad. Y es que por años nos mintió sin impunidad. Ahora parece ser honesto, pero sólo A-Rod sabe cuál es la realidad.

El tema de los esteroides sigue siendo el mayor tabú.

Fuera de los pocos comentarios que hizo previo a los entrenamientos primaverales, donde admitió que "cometió el peor error de su vida", cualquier pregunta sobre el uso de sustancias para mejorar el rendimiento es recibida con evasivas y respuestas estándar, tales como "estoy enfocado en el béisbol y aquí para ayudar a mi equipo a ganar".

En el terreno de juego, A-Rod se está disfrutando el béisbol como nunca y con una ética de trabajo irreprochable; de paso, los resultados han venido por añadidura.

"Algunos días me siento como de 50 años y otros días como de 30", dijo A-Rod de cara a celebrar sus 40 primaveras. "En general, me siento feliz, saludable y en un buen lugar en mi vida".

Esa felicidad se ha visto reflejada en el terreno de juego, donde está teniendo una de las mejores temporadas históricas para un pelotero de su edad.

Con 23 cuadrangulares este año, Rodríguez está precisamente a 23 de convertirse en el cuarto miembro del súper exclusivo club de los 700 jonrones. A este paso, con dos temporadas más bajo contrato hasta el 2017, podría sin duda desafiar los 714 de Babe Ruth o incluso los 755 de Hank Aaron.

Al fin y al cabo, no importa en qué lado de la historia termine la carrera de Alex Rodríguez, no cabe duda de que la temporada durante la cual cumplió 40 años será muy difícil de olvidar.