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Lo siento Anthony Yarde, Artur Beterbiev vs. Dmitry Bivol por la corona de 175 libras debería ser lo siguiente

NEW YORK - Artur Beterbiev aún no ha encontrado a su némesis, y el sábado en el Teatro Hulu en el Madison Square Garden no fue diferente.

Joe Smith Jr. entró al ring con una ventaja de tamaño, fuerza y una mano derecha tremendamente poderosa, pero nada de eso importó. Beterbiev fue demasiado preciso, sus golpes demasiado dañinos.

Su subestimado coeficiente intelectual en el ring le permitió a Beterbiev entregar algunos de los golpes más precisos del deporte, lo que lo condujo a propinar tres caídas y una victoria por nocaut técnico en el segundo asalto. Él recogió un tercer título de peso semipesado para consolidarse como uno de los dos mejores peleadores de 175 libras en el mundo.

El otro, por supuesto, es su compatriota Dmitry Bivol, quien derrotó a Canelo Álvarez, el ex rey libra por libra del boxeo, en mayo para retener su título de peso semipesado.

Una reunión cumbre entre Beterbiev y Bivol no solo coronaría a un campeón indiscutible de peso semipesado, sino que también representaría uno de los mejores enfrentamientos que puede ofrecer el boxeo.

Naturalmente, al ser boxeo, esa pelea no está en el horizonte inmediato. En cambio, Beterbiev (18-0, 18 KOs) está alineado para defender sus tres títulos contra el inglés Anthony Yarde, el retador obligatorio de la OMB. No hay acuerdo, pero la pelea está planeada para el 29 de octubre en Londres, según le dijeron las fuentes a ESPN.

"Tengo dos peleas de unificación. Las peleas de unificación son más interesantes, más motivadoras", dijo Beterbiev. "Prefiero la pelea de unificación. Quiero ser indiscutible.

Esa pelea tendrá que esperar, por supuesto. Yarde, que estaba en primera fila, parece ser el siguiente. Y al igual que Beterbiev, Yarde es un golpeador peligroso que demostró en su única oportunidad por el título que pertenece a este escenario.

Yarde pareció estar a uno o dos golpes de derrotar a Sergey Kovalev cuando se enfrentaron por un título de peso semipesado en 2019. En cambio, Kovalev detuvo a Yarde en la siguiente ronda. Yarde tuvo que viajar a Rusia para esa pelea, pero esta vez peleará en casa contra otro ruso de gran pegada en Beterbiev.

"Esa [pelea contra Kovalev] me preparó mucho, especialmente para ir a Rusia también", dijo Yarde, quien estaba en primera fila, a ESPN el sábado. "No se puede obtener una mejor preparación que esa. Yo era más joven en ese entonces, mental y físicamente... Creo que he recorrido un largo camino con la experiencia y estoy mucho más preparado mentalmente".

Si bien Beterbiev-Yarde es una pelea de acción atractiva, y un gran evento en el Reino Unido, ciertamente no es la pelea que todos queremos ver en las 175 libras. Ese enfrentamiento sigue siendo Beterbiev-Bivol por todas las canicas en 175 libras.

Bivol y Beterbiev estaban en conversaciones para la unificación del título de peso semipesado esta primavera en San Petersburgo antes de que el primero enganchara la pelea con Álvarez. Ahora, el enfrentamiento por el campeonato indiscutible podría tener que esperar hasta al menos la primera mitad del próximo año, y tal vez incluso más.

Álvarez decidió dirigirse a una tercera pelea con Gennadiy Golovkin el 17 de septiembre en lugar de ejercer la cláusula de revancha para una segunda pelea con Bivol. Sin embargo, todavía es posible que Canelo busque el encuentro el fin de semana del Cinco de Mayo en 2023, lo que impulsaría una pelea por el título indiscutible con Beterbiev hasta al menos el otoño del próximo año.

Beterbiev cumplirá 38 años el próximo enero y todavía está buscando una pelea importante, genuina, que se ajuste a su inmenso talento. Está en la cúspide de la lista libra por libra y es el único campeón de boxeo con un récord de 100% KO.

Demostró una vez más el sábado que es uno de los mejores boxeadores libra por libra del mundo. Una pelea con Yarde presentará otra oportunidad para que Beterbiev brinde una actuación deslumbrante en una pelea, pero esa no es el pleito que Beterbiev, o los fanáticos del boxeo, quieren. Y Beterbiev se lo merece antes de que sea demasiado tarde.