Boxeo
Bernardo Pilatti 8y

El Top 10 de la rivalidad boxística de México contra Puerto Rico

La rivalidad entre mexicanos y puertorriqueños ha producido grandes batallas. Ellas son parte de la mejor historia del boxeo mundial y perduran para siempre en la memoria colectiva.

México y Puerto Rico le han dado al mundo más de 270 campeones mundiales y desde 1934 los duelos entre ambos se han alternado con victorias o derrotas que han ido alimentando esa rivalidad.

Elegir las diez mayores batallas dentro de esa preferencia no es tarea fácil. Aún más, me atrevería a afirmar que jamás existirá unanimidad sobre este punto, ni entre fanáticos ni tampoco entre periodistas. Cada época tuvo a sus mejores peleas y cada uno elegirá a esas mejores con los ojos de su propio tiempo.

La presente lista, refleja apenas mi criterio personal y en ningún momento trata de interpretar el pensamiento colectivo de los fanáticos de uno u otro país. El boxeo en general tiene mil razones para interpretarlo, por ello nunca nos pondremos de acuerdo y por esa razón (¡vaya paradoja!), es tan atractivo como deporte. La unanimidad extrema es demasiado aburrida y en boxeo, felizmente, es imposible de que suceda tal anormalidad.

LAS DIEZ MEJORES

1.- SALVADOR SÁNCHEZ vs. WILFREDO GÓMEZ (1981)

A todos los efectos, esta es la pelea que marca un antes y un después en la rivalidad entre mexicanos y boricuas. Fue el 21 de agosto, en el célebre Cesars Palace de Las Vegas.

Gómez, era el monarca invicto e indiscutido de las 122 libras, 33 victorias, 32 de ellas por KO y en su haber contaba con una racha de diez victorias sobre rivales aztecas. Con su aire de invencible subió a las 126 libras para retar al joven y dominante monarca del CMB, Salvador Sánchez.

El mexicano, a sus 21 años, ya era toda una leyenda del boxeo azteca y llegaba a esa batalla con un récord increíble de 40 victorias, una sola derrota, un empate y 30 KOs. Una anécdota sobre la forma en que el combate se calentó en lo previo, asegura que Gómez le habría gritado a Sánchez, aconsejándole “tomarse una foto antes de la pelea, ya que después nadie lo reconocería”.

Fue una pelea emocionante y bautizada como “La Batalla de los pequeños gigantes”. Gómez que cayó tan temprano como en el primer asalto, tuvo sus momentos, pero el dominio y los mejores golpes fueron del mexicano, que lo estaba vapuleando en el octavo asalto cuando el árbitro filipino Carlos Padilla resolvió detener el combate.

Muchas cosas se dijeron después. Que Gómez, por orgullo, no quiso mostrar su rostro magullado, que se negó a pasar por una revisión médica en un nosocomio y que en Puerto Rico fue día de luto entre los fanáticos. Ese es apenas, parte del color habitual. No obstante, muchos historiadores del boxeo alegan que la rivalidad encarnizada nació esa noche.

Después, Wilfredo se recuperó de la derrota, regresó a los supergallos defendiendo su cinturón de manera exitosa en cuatro ocasiones más, para regresar a los plumas donde finalmente, en 1984, pudo ganar su cinturón en esa división ante Juan Laporte. Se retiró en 1989 como la, hasta hoy, mayor figura del boxeo boricua.

Sin embargo, al contrario de otros duelos, la revancha contra Salvador Sánchez no fue posible. Como en un teatro de la vida, la historia de esta pelea tuvo un final triste para boricuas y también para mexicanos. Los puertorriqueños debieron guardar esa dura derrota para siempre en su memoria, sin posibilidades de cambiar el destino en un nuevo combate.

Para los mexicanos, tal vez, el final fue aún más dramático. Después de vencer a Gómez, Salvador Sánchez realizó tres peleas más. Le ganó a Pat Cowdell, a Rocky García y a Azumah Nelson, antes de fallecer de manera trágica, en un accidente carretero, con apenas 23 años.

No había transcurrido un año aún de la pelea contra Wilfredo Gómez y la muerte truncó la carrera del que, para muchos, iba en camino a convertirse en la mayor figura del boxeo mexicano de todos los tiempos. Quizás, esa jugada del destino haya sido la mayor aliada, a la hora de señalar aquella pelea de Las Vegas, como el verdadero e inolvidable clásico de la rivalidad entre puertorriqueños y mexicanos.

2 – WILFREDO GÓMEZ vs. CARLOS ZÁRATE (1978)

Para entender la batalla elegida en el primer lugar, hay que entender el significado de la elegida en el segundo puesto. La victoria de Gómez sobre el invicto e ídolo mexicano Carlos Zárate en 1978, es una muestra de lo que en esa década fue Gómez, un verdadero “mata-mexicanos”.

Fueron diez oponentes vencidos en forma consecutiva y de esos diez combates, el celebrado contra Zárate es el más importante, antes de la venganza de Salvador Sánchez.

3.- JULIO CÉSAR CHÁVEZ vs HÉCTOR “MACHO” CAMACHO (1992)

Fue el 12 de septiembre en la arena del Thomas and Mack Center de Las Vegas ante 15 mil espectadores y ocurrió en un momento de total exacerbación de la rivalidad entre las dos fanaticadas.

Camacho retaba a Chávez por la corona de los Superligeros del CMB. En lo previo el boricua habló mucho, fiel a su estilo, lo que caldeó los ánimos. En México se instalaron pantallas gigantes en varias ciudades, mientras que era tanto el entusiasmo que por TV se transmitió en sistema de PPV.

Fue victoria de Chávez por decisión unánime, en pelea vibrante y que el mexicano dominó de principio a fin.

4.- TITO TRINIDAD vs ÓSCAR DE LA HOYA (1999)

La llamada “Batalla del Milenio” fue vencida, en decisión unánime, por Tito Trinidad y resultó emblemática por más de una razón, en ambos casos directamente relacionados con la rivalidad.

En principio la alegación puertorriqueña de que De la Hoya (nacido en USA) no podía ser considerado mexicano a los efectos de la rivalidad. El segundo aspecto, fue la controversia por su resultado, ya que los fanáticos de De la Hoya, hasta hoy insisten en que el Golden Boy fue legítimo vencedor.

El combate pasó a la historia por el significado que tuvo en la carrera de De la Hoya (perdió el invicto y su aureola de invencible) y las discusiones que hasta hoy provoca su resultado.

5 y 6.- MIGUEL COTTO vs. ANTONIO MARGARITO (2008 y 2011)

El 26 de julio del año 2008, Margarito noqueó a Cotto, luego de una pelea donde le aplicó al boricua un castigo brutal. Ese día, el Tornado de Tijuana se ganó la admiración de los fanáticos y el reconocimiento de la prensa. Sin embargo, precio a su próxima pelea, en enero del 2009 contra Shane Mosley, le descubrieron yeso en los vendajes de sus guantes. Eso causó un gran escándalo y sembró la duda sobre su desempeño anterior. ¿También Margarito habría utilizado yeso en los vendajes ante Cotto?

En el 2011 volvieron a enfrentarse y el boricua gano por KOT. Ese día tomó venganza, pero también alimentó la eterna duda sobre lo que realmente ocurrió en la primera pelea.

7 - JUANMA LÓPEZ VS. ORLANDO SALIDO (2011)

Antes de esta batalla, JM López era el gran ídolo boricua. Campeón, invicto en 30 peleas y en camino a transformarse en otra leyenda boricua rumbo al Salón de la Fama. Sin embargo el guerrero mexicano, que entonces cargaba un récord de 34 victorias y 11 derrotas, rompió todos los pronósticos. Lo noqueó en ocho asaltos.

Al año le concedió la revancha, nuevamente en Bayamón y otra vez lo venció por TKO. Fue una gran decepción para la fanaticada boricua y el inicio del fin para 'JuanMa' López.

En la otra cara de la moneda, 'Siri' Salido se ganó definitivamente el corazón de la fanaticada mexicana, que venera ese estilo guerrero de pelear por encima de otros estilos.

8 - ÁNGEL ESPADA vs. PIPINO CUEVAS (1976)

El 17 de julio de 1976, con apenas 18 años de edad, José “Pipino” Cuevas, recibió una oportunidad de disputar el título mundial welter de la AMB, contra el ídolo boricua, tres veces campeón mundial, Ángel Espada.

Contra todos los pronósticos, Cuevas lo noqueó en sólo dos asaltos y se convirtió en el mexicano más joven en alcanzar un título universal. Cuevas reconocido como uno de los mayores nombres del boxeo mexicano, desarrolló una carrera de grandes triunfos, pero plagada de derrotas. No obstante, su victoria sobre Espada no fue una casualidad. Ambos volvieron a enfrentarse en otras dos ocasiones y en las dos, se impuso Cuevas por KOT.

Dentro de la rivalidad entre mexicanos y boricuas, las derrotas de Espada ante Cuevas, son recordadas como uno de los capítulos más amargos para la afición puertorriqueña.

9 - EDWIN 'CHAPO' ROSARIO vs. JOSE LUIS RAMÍREZ (1983)

La primera pelea entre estas dos figuras legendarias, se realizó el 1 de mayo de 1983. Ambos iban por primera vez en busca de un título mundial y en el combate estaba en juego el cetro vacante de los ligeros del CMB.

Ramírez era el gran favorito. Llegaba a esta batalla con 84 victorias en su haber y apenas cuatro derrotas ante otras leyendas como Alexis Arguello, Rubén Olivares o Ray Mancini.

Rosario recién había cumplido 21 años y estaba invicto en 21 batallas, aunque sin haber enfrentado a rivales de nombre. La batalla tuvo lugar en el mítico Coliseo Roberto Clemente de San Juan y fue victoria para Rosario por decisión unánime, tras una pelea muy pareja.

Ramírez conseguiría vengarse en la revancha, celebrada en noviembre de 1984 alcanzando su ansiado primer título mundial. Los dos, en el resto de sus carreras enfrentaron con suerte diversa a lo mejor de la época.

Ramírez se retiró del boxeo activo en 1990, mientras que Rosario aún se encontraba activo en 1997, cuando sobrevino su muerte prematura. El ídolo boricua, pago duro precio a la turbulencia de su vida fuera del ring.

En 2006, Chapo Rosario se convirtió en el sexto puertorriqueño en ser incluido en el Salón de la Fama del Boxeo Internacional.

10 - GIOVANNY SEGURA VS. IVÁN CALDERÓN (2010)

Esta pelea tuvo lugar el 28 de agosto de 2010 en Guaynabo, Puerto Rico y fue una batalla de unificación de títulos en el peso Minimosca. Calderón era monarca OMB y Segura de la AMB.

El veterano boricua llegaba con un largo invicto de 34 peleas, condición de imbatido que siempre estuvo amparada por su gran calidad técnica. Contra Segura, una vez más la rivalidad se mediría entre el boxeo estilista de uno y la agresividad mexicana del otro.

Con su poder y las diferencias físicas a favor, Segura estableció el ritmo de la batalla. Lastimó a Calderón round tras round, hasta que en el octavo asalto, el boricua se refugió en una esquina, puso la rodilla en la lona y abandonó el pleito.

Un año después se celebró la revancha en Baja California, México y Calderón fue noqueado en el tercer asalto. Fue el principio del fin del boricua que realizó dos peleas más y se retiró en el 2012 a los 37 años.

Segura se mantuvo en el primer nivel, con suerte dispar. Desde la última batalla contra Calderón, ha peleado ocho veces, con cinco triunfos y tres derrotas ante Brian Viloria, Edgar Sosa y Juan Estrada. Fueron batallas donde nunca abandonó su condición de guerrero.

La pelea entre Calderón y Segura, es importante en la historia de esta rivalidad debido al choque de estilos y por la importancia que tuvo en el tramo final de la carrera de una de las grandes glorias del boxeo puertorriqueño.

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