El campeón súper welter de la Organización Mundial de Boxeo, Jaime Munguía, y su equipo de trabajo liderado por el promotor Fernando Beltrán han comenzado a analizar las distintas ofertas que tiene para su regreso en el mes de octubre, con nombres como Gennadiy Golovkin y Jessie Vargas, entre otros, en la mesa.
El púgil mexicano de 22 años ha estado entrenando desde hace un mes con el excampeón mundial Érik 'Terrible' Morales y Fernando Fernández en su natal Tijuana tras finiquitar la relación que tenía con el entrenador Roberto Alcázar. Además de Vargas y Golovkin, nombres como Patrick Teixeira y Dennis Hogan aparecen en el radar también.
En el caso de Gennadiy, quien se quedó fuera de la pintura en el camino de Canelo Álvarez, al menos para este septiembre próximo, pues han estado buscando posibilidades luego que derrotó a Steve Rolls el pasado 8 de junio en el Madison Square Garden de Nueva York.
El kazajo ya estuvo cerca de enfrentar a Munguía cuando se cayó la pelea con Canelo Álvarez para mayo de 2018, pero entonces la comisión no aprobó la pelea y terminó por no suceder, aunque semanas más tarde Jaime se convertiría en campeón mundial al destronar a Sadam Ali.
Y si fuera Jessie Vargas el hombre, sería la oportunidad que tendría el de sangre guerrerense para ir en busca del tricampeonato del mundo luego de haber logrado ya coronas en peso súper ligero y welter. El avecindado en Las Vegas tiene en la mira esa pelea desde hace tiempo y goza del respaldo del promotor Eddie Hearn al respecto.
En dado caso de que no fuera ni Gennadiy ni tampoco Jessie, entonces existe la oportunidad para que el brasileño Patrick Teixeira y el australiano Dennis Hogan sean sus rivales para la quinta defensa del cetro súper welter OMB que ostenta el tijuanense. Con Hogan obviamente sería la revancha tras el ajustado triunfo que tuvo en abril pasado, y para el sudamericano sería su primera oportunidad titular.
De cualquier manera, Jaime entrena constantemente en el gimnasio de la Zona Norte de Tijuana, con miras a cualquiera de estas posibilidades que representan distintos riesgos, pero también recompensas de calibre variable en el deporte de los puños en el que tiene ya casi seis años como profesional.