La Federación Mexicana de Boxeo envió un comunicado a los seleccionados nacionales para que traten de llevar a cabo los ejercicios que les recomendó el equipo técnico y se mantengan en forma mientras las condiciones lo permitan debido a la contingencia del coronavirus Covid-19.
Tras el cierre del Centro Deportivo Olímpico Mexicano, los pugilistas fueron enviados a casa con un programa de trabajo para no perder el acondicionamiento que ya tenían cuando se alistaban para el torneo preolímpico que iba a realizarse en Buenos Aires, Argentina, a finales de marzo y terminó por suspenderse.
“Hoy nos llegó un oficio, que hay que estar preparados por si llegan a hacer la eliminatoria este año, hay que estar preparados para eso. A final de cuentas, siento que nos beneficia porque nos da más tiempo para hacer una preparación más adecuada y mejor planeada”, dijo Rogelio Romero, una de las cartas más fuertes del combinado nacional. “Y nos dejaron un entrenamiento los profesores, así que estamos tratando de seguir con el entrenamiento también”, destacó.
Rogelio aceptó que, tras seis años en la selección, sus planes eran irse en este 2020 al profesionalismo, y ahora los planes cambiaron. “Yo quería ir a la eliminatoria, después a los Juegos Olímpicos y ya irme (a profesional), pero hay que esperar, si ya nos aguantamos seis años, hay que quedarse uno más”, añadió el chihuahuense, quien ha ganado dos veces el bronce panamericano.
Como la mayoría de los boxeadores a nivel global, Romero se dijo imposibilitado para realizar un entrenamiento a tope. “Lo que afecta es que hayan cerrado gimnasios, la manera en que estamos entrenando, en la calle, en la casa, eso es lo que nos afecta”, explicó el mexicano de 25 años.