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Fernando Alonso y los peligros de Monza a lo largo de los años en F1

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Fernando Alonso y según pasan los años en Monza con F1 (1:31)

El español de Aston Martin contó cómo era correr en el templo de la velocidad hace 20 años. (1:31)

El asturiano correrá por 22ª vez en el templo de la velocidad con un auto de la máxima categoría y en la previa habló sobre los cambios con cada reglamento.

Fernando Alonso está listo para disputar su 22º Gran Premio de Italia en el mítico trazado de Monza. Su primera participación con un Fórmula 1 en el templo de la velocidad fue en 2001 con un Minardi. Este fin de semana, 24 años después, estará otra vez en el trazado de Lombardía. Allí corrió, además de con el team de Faenza, con Renault, McLaren, Ferrari, McLaren, Alpine y, desde 2023, con Aston Martin.

En tantos años, el asturiano corrió en Monza con diferentes reglamentos técnicos en F1. En motores, por ejemplo, pasó por los V10, V8 y los V6 turbo híbridos. En cuanto al chasis, de pequeños y livianos, con alerón trasero con muy poca incidencia, a los de efecto suelo actual, con muchísima carga aerodinámica. En la conferencia de prensa previa al inicio de la temporada, le preguntaron cómo fueron cambiando las conductas de los choches en la rapidísima pista y Alonso no dudó en poner al peligro como protagonista.

“Definitivamente, cambió mucho. Manejé con diferentes configuraciones en Monza, no solo la actual. Pero sí, la forma en que cambiaron los coches hace que Monza sea un poco diferente al pasado. El comportamiento de la carga aerodinámica ahora lo hace un poco más seguro. Recuerdo los primeros dos años en Monza, conduciendo prácticamente sin alerón trasero, el coche parecía flotar en las rectas y no tenerlo totalmente controlado. No diría que ahora es fácil, pero se tiene el control en todo momento”, contó Nano.

Y continuó, entrando más en la seguridad: “Obviamente, ahora tenemos diferentes dispositivos que hacen que este lugar sea más seguro. Para mí, esa es la mayor diferencia. Antes, cuando veníamos a Monza, sentías el peligro, la velocidad y la adrenalina. Ahora es un poco más difícil sentirlo. Tenemos el halo, el dispositivo hans y otras cosas que no tenía la primera vez que conduje aquí. Además, todos hacen pruebas en Monza antes de llegar a la F1, o al menos con muy poca carga aerodinámica. En la década de 2000, no existían estos privilegios”, cerró.